27 de octubre

157 16 0
                                    

Aún no me he atrevido a acercarme a David, simplemente me he limitado a observarlo cual neurótica obsesiva. Oh dios mio, su pelo, rubio, anque más claro que el mío, se mezclaba con su rostro, palido y con esa sonrisa desgarradora.

Pero aunque no me haya atrevido a hablar con el me he puesto a hablar con una chica, se podría decir que ahora somos amigas. Su nombre es Carrie, y tiene 14 años, igual que yo. Es pelirroja y tiene unos ojos verdes preciosos, me conto que es de familia irlandesa, de ahí sus rasgos nordicos. Está aquí por un fuerte desorden alimenticio, es bulímica, y cuando su familia vio que iba de mal en peor comenzaron a enviarla al psicologo, que no soluciono nada. Es de las pocas de aquí que no tienen ninguna enfermedad terminal, es de las pocas que no les queda esa salida. Yo en cambio solo temgo que esperar un poco más...

Hablamos un rato e intercambiamos nuestras historias, realmente me cae muy bien. Pero, como no, la hora tenía que terminar. Así que no pude hablar más con ella.

Y hablando de amigos... Hoy Samuel ha vemido a visitarme. Solo Samuel, sin Iris. Siempre supe que no le importaba a esa zorra, y esto no es algo que diga por un transtorno o mierdas, nunca le he importado a esa puta. Ni siquiera se ha dignado a despedirse, a decirme que se ha cansado de mis problemas.

A que se ha cansado de mi.

No me ha afectado lo más mínimo. Solo quiero verla arder. Nunca le he importado. Joder.

Estoy llorando.

Más tarde...
Tras pasarme unas dos patéticas y penosas horas llorando he parado de golpe. Iris me había escrito una carta. Me da asco. No me voy a dignar siquiera a copiarla aquí, te ahorraré el sufrimiento. De todas formas lo único que decía son las típicas mierdas "no es por ti, es por mi" "espero que me perdones, queelo comprendas", "estoy muy ocupada"... cuanto me gustaría quemarla viva y alimemterme de sus gritos y y y nwjdddjd

Más tarde

No no no. Es increible. Antes, cuando escribía, me emfade muchísimo. Quería matarla, de hacho sigo queriendo, y en ese momento no se que pasó. Note como mi vista se nublaba por los bordes y despues. Bueno.

Despues oí la cama arrastrarse, moverse sola. He sido yo. No puede ser otra cosa.

O dios.

Me estoy mareando.

RosasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora