capítulo 13

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Capitulo: 13

Luego de estrechar manos con Jubber, Hizan camina a orillas del río, -Esta es la primera vez en que un humano intenta pasar a través de éste portal. Nosotros los elfos, tenemos una entrada específica codificada a nuestra esencia, por esa razón ustedes no pueden venir con nosotros ahora, sin embargo, existe una entrada que, aunque está abierta, siempre es custodiada por soldados. Si ustedes logran atravesar el portal y evadir a los guardias, los esperaré y los llevaré con el guardián Villiam- dice.

-¡No hay problema. Diez o veinte guardias no son un desafío para nosotros!- expresa Stonk con carisma. Sara lo observa, sonríe y dice: -Veremos como lo hacen contra un millar de guardias- dicho eso Stonk pone cara de preocupación, -¡Oye... ¿Es en serio? ¿Un millar de guardias?. Estás tomándome el pelo, ¿Verdad?- dice y Sara le da la espalda entre risa y risa, -Pensé que no sería problema para ti- responde ella. –La verdad no es problema. Solo pienso que exageran en el número- agrega Stonk.

-Bien Jubber, lo que tienes que hacer es sencillo, debes colocar tu mano sobre la superficie del agua, pronunciar tu nombre y solicitar la entrada a Elissomen. Dicho eso, el portal se abrirá frente a ti. Inténtalo- dice Hizan. Jubber no lo duda y camina a la orilla del río, coloca su mano en el agua, observa a Hizan y dice: -¡Soy Jubber, hijo de Deacon y nieto de Niggel. Solicito mi derecho a entrar a Elissomen por éste portal!-

Inmediatamente luego de pronunciar esas palabras, el agua del río comienza gradualmente a elevarse tomando la forma de una enorme puerta muy adornada, todo parece cristal, pero en realidad es agua y Jubber queda muy asombrado. En el centro de aquella puerta, un círculo transparente se hace notar con un leve brillo, -Coloca tu mano dentro Jubber, tú igual, Stonk- dice Sara mientras se coloca al lado de Hizan.

Ambos lo hacen, y aquel círculo comienza a destellar con los diferentes colores del arcoíris, asombrados, los dos no dejan de sonreír, no pueden evitar sentirse entusiasmados. Segundos después, las puertas se abren dejando ver un vórtice de color rosa claro, -Bien Jubber, ese es el portal. La esencia de ambos fue añadida al tocarla, y desde este momento puedes solicitar la entrada cuando quieras con tan solo tocar el agua de ese lugar. Ahora debo irme, recuerda lo que te dije- dice Hizan a medida en que abre un portal en el aire por donde él y Sara se introducen.

Estando dentro, el portal comienza a cerrarse lentamente y Sara aprovecha el momento para decirle a Stonk: -¡Te veo del otro lado!- Stonk la observa y sonríe. Ya cerrado el portal, Sara pregunta: -¿Hizan, por qué decidiste ayudarlos?-, Hizan la observa y con una leve sonrisa responde: -No sé si te distes cuenta, pero esa espada le fue encomendada a Jubber, pensé que solo era un mito eso de que Zurem le dio su espada a un humano, pero por la forma en que la espada se resistió a mí, me dice que ése sujeto tiene algo especial. Si logra cruzar el portal, estoy seguro de que Villiam querrá conocerlo-.

-¿Pero por qué usaste esa entrada? ¿Por qué no solo teletransportarse con ellos?- pregunta Sara confundida. -Simplemente quiero saber si son merecedores de entrar a nuestro mundo o no, después de todo, serán los primeros humanos en entrar desde hace mucho tiempo. Sería una falta de respeto dejarlos entrar sin ponerlos a prueba primero- dice Hizan con una peculiar sonrisa. -¿Y si mueren en el intento?- pregunta nuevamente Sara, -Entonces no eran dignos de pasar- aclara Hizan.

Mientras tanto, Jubber y Stonk se posicionan frente al portal. -Oye Jubber, ¿Qué crees que pasará luego de entrar al portal?- pregunta Stonk un poco desconfiado, -No lo sé amigo, pero si no lo intentamos jamás sabremos, después de todo es la única forma de conseguir respuesta a nuestras preguntas. Solo ten en cuenta lo que dijo acerca de los guardias, no creo que debamos tomarlo a la ligera- responde Jubber y de inmediato se introduce al portal, Stonk observa con cautela y rápidamente lo sigue.

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