La Marca De Un Guerrero

Capitulo 25

Capitulo: 25

La noche avanza conforme al paso del tiempo y Hizan, que aun continúa leyendo aquel libro, observa a Jubber por un momento recordando la manera en que derrotó a los monstruos de Hug en ese momento. –Y pensar que con un solo golpe pudo hacer tanto daño. No esperaba que tuviera ese poder- se decía así mismo al tiempo en que se percata de algo fuera de lo común. –Algo ha perturbado la tranquilidad del lugar- se dice de nuevo mientras cierra el libro y lo coloca en la mesa.

Con cautela camina a la entrada de la cueva y se dispone a observar los alrededores en busca de cualquier actividad que resulte extraña o fuera de lo común. No pasa mucho tiempo hasta que se da cuenta de que están siendo observados por dos de sus colegas que se esconden de su vista, pero al detallarlos más detenidamente puede notar que no son parte de sus soldados. –Son parte de los hombres de Rynold. ¿Cómo fue que dieron con nosotros?- se dice así mismo intentando actuar como si no pasara nada para no alertar a su observador.

Decide ingresar de nuevo a la cueva lleno de sospechas e intranquilo ya que no saben cuándo ni cómo obtuvieron su paradero. Al estar junto a Jubber, piensa en despertarlo para poder alertarlo, pero no lo hace, en cambio decide tomar los huevos que poseen y se coloca frente a la pared inferior hacia ellos y con su mano desliza una pequeña porción de ella dejando en descubierto un pequeño espacio que permanecía oculto. Allí decide colocar los huevos y nuevamente lo cierra para prevenir que puedan tomarlos en un descuido de su parte.

Mientras tanto, al observar como Hizan se introduce en la cueva de nuevo, uno de los sujetos le dice a su compañero: -Es hora de ir con el guardián Rynold y notificar que Hizan y Jubber se encuentran en este lugar-. Aquel sujeto asiente con la cabeza y enseguida se marcha. Al ver marchar a su compañero, observa de nuevo hacia la cueva y una sonrisa se dibuja en su rostro, -Fue una buena idea seguirlos, sabía que volverían a este lugar- se dice así mismo y continua con su vigilancia.

Por otra parte, en el Castillo Norte, Rynold se impacienta cada vez más por recibir noticias sobre Jubber. –Ya ha pasado mucho tiempo. ¿Cuánto más debo esperar?- se pregunta así mismo a medida en que se encuentra viendo a través de la ventada de su salón. Acto seguido comienza a recordar la conversación que tuvo con Teudoor en su castillo con anterioridad:

"Teudoor: -Rynold, ¿Tenias conocimiento de que el joven portador de Beliggar se encuentra actualmente en Elissomen?-

Rynold: -Con que eso es lo que hacía Villiam acá. El joven llego hace poco, inmediatamente ordene a dos de mis hombres que lo siguieran. Actualmente visitaron la zona intermedia pero no tengo más información al respecto-

Teudoor: -No quiero que lo pierdan de vista. Si tienes la oportunidad de arrebatarle a Beliggar de las manos, hazlo. Pero no intentes enfrentarlo en combate, no serás rival para él-

Rynold: -De acuerdo señor-"

Al terminar de recordar su conversación, frunce el ceño y aprieta fuertemente su puño para luego golpear la pared. -¡Él no puede ser más fuerte que yo. Eso sería imposible de cualquier modo, no importa si tiene a Beliggar de su parte, solo es un simple humano!- se dice así mismo cuando es interrumpido por uno de sus hombres que toca a la puerta. Intenta parecer tranquilo a medida en que abre la puerta, -Señor, recibimos noticias de los vigías. Nos confirman que Hizan y el joven humano se encuentran en la zona intermedia-.

Escuchando esas palabras, Rynold no puede evitar emocionarse. -¡Muy bien. Quiero que alisten a todos los soldados que forman parte de nuestras filas y se reúnan en la entrada lo más pronto posible!- expresa y de inmediato el soldado afirma con un: -¡Si!- para luego retirarse. –Obtendré la espada Beliggar a como dé lugar. Un simple humano no podrá evitar que pueda tomarla. Le demostrare a Teudoor que soy lo suficientemente capaz de eliminar a Jubber- se dice así mismo mientras toma su capa y espada para luego salir del salón.