| Treinta y ocho |

49.8K 2.3K 196
                                    

Al día siguiente en el instituto, ignoro lo más que puedo a África y Gisele. Si digo que no me dolió que antepusiera a su novia mentiría. Éramos mejores amigas desde que tenía uso de razón, siempre habíamos sido ella y yo, quizás por eso me dolía tanto. Ella solo me tenía a mí. Hasta ahora.

-Buenos días, chicos- entra saludando Enzo a clase.

No le miro. En mi cabeza sigue reproduciéndose la escena del beso. No puedo evitar sentirme así, molesta, celosa… como queráis llamarlo.

-¿Nix?- escucho la voz de África a mi lado –Lo siento si te ofendí ayer. Siento haber tenido un comportamiento de mierda contigo, espero que me perdones. ¿Puedo sentarme contigo?

-Bien-cedo finalmente y se sienta.

-Estoy realmente arrepentida- sigue hablando mi mejor amiga.

-No es tu culpa, África.

-¿Ha pasado algo?- pregunta al ver mi cara. Soy muy expresiva, cuando estoy triste, se nota.

-Vi algo que…

-¿Nix?- Enzo dice mi nombre interrumpiéndome.

Joder.

-¿Sí?

-Apuesto a que tu conversación es más interesante que mi clase.

Ruedo los ojos y me encojo de hombros vacilante –Nah, no creas.

-No estoy para tus tonterías, vete de mi clase- habla cruzándose de hombros con un tono duro. Toda la clase queda en completo silencio.

No me intimida, al contrario, sonrío-¿O qué?

-O tendrás que hacer una reflexión de un nivel cinco veces superior al tuyo.

-¿Es una batalla esto?- digo sonriendo aún más.

-Nix, para- escucho como África me ordena por lo bajo.

-Si fallas, te suspenderé filosofía.

-Sorpréndeme, señor Soler- me levanto y me acerco a él.

Sin vacilar, mí hermanastro-ahora mi profesor- formula la pregunta. Es simple. Sé bastante sobre el tema. He de decir que tengo que pensar un poco la respuesta pero, cuando la digo, veo como Enzo hasta se sorprende. No subestimes nunca mi intelecto, cariño.

Antes de volver a mi asiento, me acerco a él un poco –Mejor que Estíbaliz.- le guiño un ojo y me retiro.

-A partir de ahora esto es lo que os pasará cada vez que decidáis no responderme.

Llego a mi asiento y África habla:-¿Qué cojones ha sido eso?

-He demostrado a este capullo que no puede jugar conmigo-sonrío con arrogancia–Y ahora, si me disculpas, quiero estudiar.

-¿Por qué estás tan enfadada con él? ¿Qué te pasa?

Flashblacks de ayer vienen a mi mente, Estíbaliz acercándose a Enzo. Ellos besándose. Enzo agarrando su cintura.

¿Mi hermanastro? Mi profesor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora