–Primero casi te violan y ahora estás que no te puedes sostener de pie–espeta enfadado mi hermanastro cuando arranca el coche–No vas a salir ni a una puta fiesta más, Nix.
–¿Acaso tengo culpa de que casi me violasen?–cuestiono cruzándome de brazos –Y respecto a lo otro: mírame, estoy viva–digo soltando alguna risita que se me escapa.
–No se puede ser más tonta- murmulla en voz baja mi hermano.
Sí, Enzo había venido a recoger junto con Negan y Paul.
–Tú cállate- le grito de vuelta con valentía que no sé de donde he sacado.
Mientras tanto Paul, en el asiento de mi lado se mantiene callado.
Mi hermano como respuesta me fulmina con la mirada, lo que hace que me encoja en mi asiento.
–Ya veremos si se lo digo a tu madre- dice de repente Enzo.
Y enseguida reacciono:–No. No. No me hagas esto, Enzo. Por favor- junto mis manos a modo de súplica y pongo labios de cachorrito.
–¿A cambio de qué?- dice levantando una ceja y con su típica sonrisa pero sin quitar su mirada de la carretera.
–No me jo...- el sonido de su móvil interrumpe mis palabras.Enzo mira de reojo y su sonrisa se hace más ancha
–Anda tu madre querida.
–Hago lo que quieras, Enzo, pero no me jodas por favor- suplico de una manera que ya es humillante.
–Cógelo y ponlo en manos libres- ordena a Negan y este hace lo que le dice
–Hola, Blanca. ¿Cómo va todo?
–Todo va de perlas. ¿Vosotros qué tal? He llamado a Nix pero no me lo coge.
Me tanteo los bolsillos de la falda y en cuanto encuentro mi móvil lo saco.
Pero está roto.
¿Cómo cojones se ha roto?
–Eh... Mamá estoy aquí- digo alzando la voz para que no se note el alcohol que llevo encima.
–¿Estáis en el coche? Oigo ruidos raros.
–Sí.–cruzo mis dedos y suplico en mi mente que no diga nada sobre la fiesta, Enzo parece pensar algo finalmente dice –Hemos salido a cenar.
Suelto un suspiro de alivio.
–¡Ay!–exclama entusiasmada –Cariño, nuestros hijos están haciendo cosas juntos–le habla al que supongo que es Christian –Nos alegra tanto que os llevéis bien, no os hacéis una idea de cuánto es de importante para nosotros- dice de una manera sincera.
Enzo y yo compartimos miradas antes de que yo diga –Sí, si le estoy cogiendo cariño y todo.
En el momento en que escucho la risa de mi madre, mi pecho se infla de algún sentimiento bueno.
–Bueno, chicos, os dejamos tranquilos. Mañana hacemos otro video llamada ¿Eh? Os queremos.
–Os queremos, niños- dice de repente Christian.
–Y nosotros- decimos a unísono Enzo y yo antes de colgar.
Negan no dice ni una sola palabra y no le entiendo.
–Me debes una- repite mi hermanastro.
–Ya veremos.
–Has dicho que harías lo que quisiese.
–¿Y qué?
Enzo sonríe de manera pícara.
–Nada.
Por aquí otro capítulo...
Gracias por comentar y votar de nuevo <3 Os llevo en mi cora.
Mañana intentaré publicar otros dos.
Instagram: @lidiasstorm
Os mando muchísimo amor.
–Lidia.

ESTÁS LEYENDO
¿Mi hermanastro? Mi profesor.
Romansa¿Quieres tenerlo en físico? ¡Pues ya está disponible en Amazon! :) Nuestra historia no es la típica de hermanastros, no. En esas historias, su hermanastro no termina siendo su profesor. En esta sí. Por desgracia, soy alumna y hermanastra de Enzo Sol...