Louis toda su vida ha estado enamorado de su vecino, aquel Alfa rizado que le hace suspirar, aquel que hace a su corazón latir y a su omega llorar. Pero la vida nunca es fácil, y mucho menos cuando pasan su celo juntos y Harry esta a pocos días de c...
🎵Tú elevas mi corazón cuando el resto de mí está cayendo y tú, tú me fascinas, incluso cuando no estás cerca. Si existen, si existen límites, intentaré derrumbarlos Estoy aferrado a ti, cariño ahora sé lo que estaba buscando.
Siento que estamos lo suficientemente cerca Quiero tener tu amor... Siento que estamos lo suficientemente cerca Quiero tener tu amor, tu amor...
Ahora que estás tan cerca de mí; no me voy a alejar de ti. Me encadenas cuando me abrazas, estoy aferrado a ti. 🎵
-Kodaline
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―¿Estás bien? ―preguntó asustado Harry. Esto no está pasando, no, no y no.
Y se encontraba lejos de sentirse bien, apenas había puesto un pie en aquella camioneta y ya perdió la razón, el olor a cuero desgastado y moras era más potente, podía ver como Peter le observaba con miedo en sus ojitos, pensando que algo malo le había paso, el pequeño estaba en su regazo dando caricias en su rostro, mientras Louis respiraba con dificultad.
Ni siquiera recuerda cómo es que llegó a parar ahí, los veinte minutos de su vida pasaba eran borrosos y se odiaba por ser tan débil. Su embustero omega quería solo aferrarse a los fuertes brazos de un Alfa que no le pertenecía.
¿Por qué regresar a Nashville había sido lo mejor? Quería ver a sus hermanas y a su madre, pero había cometido un grave error al no pensar que el pasado llegaría a su puerta y luego decidiera no irse nunca más.
Era culpa de Fanny, aquella embustera mujer le había mentido.
Problamente el Alfa vino con su familia y debe de estar esperándolos. Entonces ¿Por qué le observaba preocupado? ¿Por qué parecía ser Louis el centro de su atención? Cuando veía como se contenía para acunarlo entre sus brazos, cerró los ojos mareado, no queriendo preocupar más al par de Alfas.
―Mami, mami ―abrazó a Peter, mientras el cachorro dejaba escapar sus feromonas para calmarlo, aunque no servía mucho. ― Vamos mami, tu vecino está preocupado ¿Debo llamar a Papi Zayn?
Obligó a su cerebro a apartar recuerdos vividos del pasado, obligó a su sistema funcionar nuevamente, se dio una cachetada interna y reguló su respiración. Abriendo los ojos estiró su cuerpo hacia atrás, su cabeza tocó el respaldo del asiento y luego ya con la fuerza necesario acaricio el cabello sedoso de su hijo.
Y miró a Harry, su rostro estoico le quería hacer perder la cabeza nuevamente, parecía que en cuanto Peter mencionaba a su amigo pelinegro todos los colores de su cara desaparecían. El casco ya no estaba en su lugar el cabello corto aun rizado ligeramente se hacía presente, sus verdes ojos dilatados y en alerta mientras sostenía el volante con fuerza. Su mandíbula cincelada que había comprobado con sus propias manos encajaban perfectamente en esas partes para atraerlo, besarlo, sin atreverse a soltarlo.
