Santamaría x Betty

¡Considérese un Pinzón!

*Resto fin de semana*

...

–Mucho gusto, señora. –saludó la economista muy educada –Beatriz Pinzón Solano, novia de Juan Manuel –soltó dedicándole una sonrisa completica a Norma que posó una mueca molesta por su osadía, que negó a tomarle la mano a esa "mujercita" mientras trataba de recuperar la sonrisa, volteando duramente hacia Santamaría que la veía más tranquilo.

Y es que ese no era el mismo Juan Manuel al que podía provocar, no reaccionó ni con su presencia, ni tratando de intimar a la mujercita, ni mucho menos indispuso a Rodrigo que la veía desafiante para su sorpresa.

–Cambiaste de gustos... –soltó venenosamente mientras agitaba su larga y rubia melena, instando a Beatriz a la bajar la mano mientras trataba de no cohibirse.

Pero Santamaría no cayó en su juego, no importaba lo que dijera; la conocía y supo que no le causó gracias que él hubiese rehecho su vida –Los mejoré –soltó firmemente dedicándole una sonrisa mientras estrujaba la cintura de su bella genio.

La rubia soltó un bufido, virando su mirada molesta hacia la economista que carraspeó otra vez –Hace ratico casi le vacío la copa de vino en su vestido... –explicó tímidamente, volteando a ver a su novio que le sonrió –Discúlpeme de nuevo, lo bueno es que es carmín OOJOJOJO No se ve OJOJOOJO –soltó hacia Norma que volvió a comérsela con la mirada.

–Dudo que usted sepa de moda, con esos trapitos y esa facha –soltó la rubia causando el enojo de los abogados pues claramente Beatriz se veía mejor y más natural que la bruja.

Beatriz se retrajo, nunca pudo pelear contra los desprecios hacia su imagen, así que solo optó por abrazarse del abogado que se molestó y salió a defensa de la economista. –No sabes con quien hablas –acusó incrédulamente.

–¿Ah, sí? ¿Y quién es ella? –acusó nuevamente, pues no leyó al revista claramente.

Pero unos señores se habían acercado, admirando a Beatriz que no se percató hasta que Rodrigo señaló hacia los señores de Cámara de Comercio que ahí estaban –Disculpe la interrupción señorita...–musitó un señor amablemente –Es Beatriz Pinzón, ¿no es así? –sondeó tendiéndole la mano mientras ella asentía.

–¡Se ve mucho mejor en persona! Mira, Alberto, ella es la presidente de Ecomoda –comentó el señor animado causando la sorpresa de Norma y la cara de felicidad de Rodrigo que cerró su puño en señal de victoria. –Felipe Cárdenas, Gustavo Alfaro –presentó tendiéndole la mano.

–OJOJOJOJO ¡Ay qué gusto! Ustedes manejan las importaciones y exportaciones de Colombia, ¿Cierto? OJOJOJ –comentó Beatriz muy sonriente mientras Santamaría se regocijaba por cómo saludaron a su novia.

–¿Será que le podemos robar a Beatriz un ratico? –sondeó uno de ellos mientras Beatriz se separaba de su abogado.

–Uno pequeñico, pero de una vez les digo que es mi novia –soltó astutamente haciéndolos reír nerviosamente, pues le echaron el ojo a la economista.

Y claro, muchas personas empezaron a reconocer a la economista, muchos conocían la relación que tenía con Daniel Valencia pues él mismo les comentó sobre el cambio de presidente y Terramoda, así que la plática giró en torno a las estrategias que ella tenía, mientras Norma la veía contrariada pues resultó muy lista.

–Vuelve a tirar veneno contra Beatriz, inténtalo si quieres, pero te juro que te quemaré públicamente –sentenció Santamaría sin inmutarse siquiera.

–No te atreves, nunca pudiste, Juanmita –acusó burlonamente, tratando de acercar su mano a la corbatica, pero Santamaría simplemente se apartó de ella con un manotazo.