LAS CARTAS DE EL CLUB 69 DE ARIES. LA SIRVIENTA.

PREFIERO SERVIR A DIOS.

LAS CARTAS DE EL CLUB 69 DE ARIES.

Los caminos de México de norte a sur y una máscara para la sociedad.

CAPÍTULO 3 extra

Luis caminó detrás de ella, enseguida le agarraba las nalgas con su mano derecha, ignorando todo lo que pasaba en esta casa.
Norma se revolcaba con su madre María, con su hermano Pablo y con su inquilino y "hermano" de religión
Esteban.
En la casa los cuatro hacían calientes orgías, en el día o en la noche bebiendo sus famosas viñas hasta quedarse noqueados los cuatro en la cama, después de sosegar su lujuria.
Pero, por su religión, ser testigos de Jehová bautizados, ante la gente que los rodeaba y sus "hermanos" de religión, ellos eran una familia moral, recta y muy justa esto solo era
"una máscara para la sociedad", quien los tenía en una alta estima.
-Enciende la televisión y siéntate en lo que preparo algo de almorzar. -
Le comentó Norma cuando caminaba con rumbo a la cocina, Luis se sentó en el sofá, agarró el control de la televisión volteando a ver las nalgas de Norma, que estaban cubiertas por esa horrible falda negra que ocultaba toda su exquisita belleza.
-Te hubieras quedado con el short negro, se te veía bien rico tu bizcochito y tus nalgas, tu blusita dejaba de fuera tus chichotas, te ves más encantadora enseñando todo tu cuerpo semi desnudo Norma. -
Al escuchar este comentario, la chica volteó a verlo muy seria, entonces, le expresó:
-Lo que paso ya paso, no me gusta comentar nada privado en un lugar público, si llega mi madre o mi hermano, podrían escuchar esas mamadas que estás diciendo, así que cállate el pinche hocico. -
Luis se quedó callado, no sabía que pedo con la joven, sí, tal vez era de té presto las nalgas y cállate el pinche hocico, o nada paso entre nosotros, después de la respuesta tan agresiva, Luis mejor volteó para ver el televisor en donde mostraban las imágenes de unas noticias, el reportero comentaba:
-Nos encontramos en la casa del senador Rogelio Villagrán Alvarado, que como ya le dimos a conocer a noche fue víctima de un atentado, le dispararon en una pierna y se encuentra ya estable en el hospital, pero ahora a las cinco de la mañana fue encontrado el cuerpo sin vida de su hija Diana Villagrán Franco.
Sí, la hija de nuestro futuro presidente de los Estados Unidos, fue asesinada y violada de una manera brutal y cruel
en su casa.
Su madre Esther Franco Solís está muy confundida e inconsolable, primero por el intento de asesinato de su marido, y ahora a escasas cinco de la mañana encontró a su hija violada y muerta en su recámara.
En estos momentos toda la policía busca pistas para encontrar al asesino de Diana Villagrán Franco, se confirmó la muerte desde las seis de la mañana del día de hoy....
Al escuchar esta información, Luis gritó:
- ¡No mames! ¡Mira Norma! ¡Córrele! ¡Escucha esta noticia! Mataron a la hija del Senador Rogelio. -
- ¿Qué pasa? ¿La hija de quién? -
-El hispano Rogelio Villagrán Alvarado, el que ganó la presidencia en Estados Unidos, le dispararon en una pierna anoche, lo intentaron matar. -
Norma al escuchar lo que expresó, le contestó:
-Si ya había escuchado esa mala noticia, la expusieron desde anoche, apenas el licenciado Rogelio Villagrán Alvarado celebraba su triunfo con el pueblo... -
-Yo también lo supe esta mañana, pero si ayer en la tarde escuche en la radio que apenas celebraba su triunfo, ahorita dicen que asesinaron a su hija Diana en su casa a las cinco de la mañana. ¡La asesinaron! -
Al escuchar esta nueva noticia, Norma con la boca entre abierta caminó hasta pararse a un lado en donde estaba Luis, preguntándole sin poder creerlo:
- ¿Qué? ¿Mataron a su hija? Pero ¿Por qué? ¿Ella que hizo? Mi madre dice que él es un hombre justo y honesto, va hacer el primer hispano en la presidencia de Estados Unidos.
¿Por qué siempre a los buenos bien les pasa esto? son hombres que intenta hacer el bien. ¿Por qué le estorba a la demás gente? -
-Qué mala leche Norma, le mataron a su inocente hijita, que puta vida. -
-Pobrecita tenía como dieciocho años, era una inocente creatura. ¡Dios mío! En qué mundo vivimos. -
- ¿En un mundo de locos desquiciados? -
Preguntó Luis, Norma lo miró a la cara sintiéndose mal ante estas noticias, mientras en la televisión continuaban comunicando, ella le comentó:
-Yo tengo fe, de que muy pronto viviremos en un mundo sin violencia, lleno de amor, Dios nos traerá el paraíso sobre la Tierra, donde siempre seremos muy felices, pero,
solo será para las personas que somos rectas y justas, que seguimos la biblia y sus principios morales. -
Luis al escuchar estas palabras, recordó la venida en su deliciosa papayita, así que le preguntó:
- ¿Crees ser parte de la llamada vida eterna Norma? -
Ella muy seria y con voz firme le contestó:
- ¡Claro! En mi religión como testigo de Jehová, todos merecemos el paraíso, somos buenas gentes de gran moralidad, tú deberías de estudiar tu biblia, para ser salvo como nosotros lo seremos, Cristo lava nuestros pecados, su sangre lava mi fornicación para que seamos salvos en el día del juicio. -
Luis se quedó pensativo, miraba ese delicioso cuerpo y pensaba nuevamente en la rica fornicación que los dos cometieron, mientras su mano izquierda, por debajo de esa
horrible falda, ya le acariciaba el par de grandes nalgas que ya había gozado con esta pinche zorrita barata.
Pensó Luis por un momento, hasta que le contestó:
-Buscaré tiempo para poder leer mi biblia y ser salvo como tú. -
Norma sonrió, al escuchar que leería la biblia, miró por un momento hacia la puerta, enseguida, le beso los labios a Luis, sintiendo ahora, la otra mano derecha tocarle los dos senos.
Norma con una sonrisa se enderezó para caminar rumbo a la cocina y terminar de hacer el almuerzo.
Diez minutos después Norma le señaló:
-Ven acércate a la mesa ya está listo el alimento. -
Luis se sentó en una silla junto a Norma, ya en la mesa trataban de animarse tras la trágica noticia de la televisión, mientras comían como unos enamorados.
Luis con su cuchara le ponía la comida en la boca a Norma, quien abría sus labios cerraba la boca para después darle un beso en los labios, queriendo otra buena cogida en su bizcochito.
Ella con su mano izquierda suavemente le acariciaba la barba, y con su mano derecha le acercaba el vaso, dándole en la boca beber de su jugo de naranja, entre plática decían:
-Me gustas mucho Luis, dime. ¿Cuándo vendrás a verme? -
Él, pasándose la comida la miró a la cara, viéndole directamente a esos hermosos ojos cafés que ella tenía, bajo un poco la vista mirando esa pequeña boquita de mamadora
profesional de garrotes, que tanto placer le dio, después de un momento, en tono bajito Luis le contestó:
-Me gustaría que fuera pronto Norma, porque tú también me gustas mucho, tienes unas nalgas enormes y deliciosas, un hermoso cuerpo...
me gustaría deslecharme en ti de
nuevo, créeme quiero venir a verte otra vez, claro si tú me dejas.
Pero casi siempre me dan viajes foráneos, ahorita en una fábrica están descargando mi tráiler, espero regresar al Distrito Federal, quizá en tres o cuatro días... no sé, realmente no sé. -
-Bueno, si no sales de viaje en estos días podríamos vernos en algún lugar, mira este es el número de teléfono de mi casa, si contestará mi hermano Pablo, mi madre o Esteban, diles que buscas a Norma, que yo te deje una revista que necesitas hablar conmigo, para una revisita, nos ponemos de
acuerdo en donde vernos, y no se te olvide mi amor.
Preguntas por Norma Vergara Rico. ¿No te gustaría cogerme otra vez mis nalgas? Con más tiempo y en un lugar más privado te haría una deliciosa rusa con mis dos senos, mientras te la mamo con mi boquita, y me tragó tu leche. -
Ante lo que le decía. Luis la miró detenidamente con la boca entre abierta, sí que le gusto la cogida que le dio a la pinche zorrita mustia.
Con una sonrisa le contestó:
-La verdad es que chupas bien rico la Vergara, ja jajá. -
Recibió un beso en sus labios por el comentario, él siguió diciendo:
-Bueno, ya tengo tu número telefónico, tu dirección y tu nombre, te aseguro que nos volveremos a ver
Norma, y te quería pedir un gran favor que me volverá más feliz. -
- ¿Necesitas algo más aparte de haber tenido mi cuerpo? ¡Guau! ¿Qué será? -
-Te quería pedir que me dejaras sacarte una fotografía instantánea, para ponerla en el camarote de mi tráiler, está a unas calles de aquí, ahí tengo una cámara conmigo. -
Ella miró hacia la puerta de la entrada, enseguida se acercó a darle un beso en los labios, recibiendo una delicada caricia en sus senos, al separarse le contestó:
-Cuando terminemos de comer vamos a tu tráiler y me tomas la fotografía, si ya me tomaste el culo que no te de lo que me pides, eres un amor Luis. -
El trailero sonrió ante la respuesta de ella, continuaron almorzando y platicando, después al terminar de comer, los dos nuevos amigos salieron de la casa caminando juntos en la calle, llegando hasta la enorme bodega.
Mostrándole enseguida su tráiler llamado por él "pantera negra", Luis abrió la puerta del copilotó invitándola a subir.
Norma puso el pie en el estribo comenzando a subir a la cabina, mirándole Luis las dos deliciosas nalgas que ya se había "comido", enseguida se subió detrás de ella. Norma se detuvo entre los dos asientos, con su mano derecha recorrió las cortinas negras, metiéndose enseguida al camarote.
Miró con atención y con una gran sonrisa el poster de Sahara Mendoza Luna "la diva de México", el poster de Jorge Morales Sierra "el rey del acordeón", y el poster del grupo de rock pop THE SALEM, que ya tenía pegadas seis fotografías instantáneas de diferentes chicas que había conocido en sus viajes.
Él miró a Norma a la cara, viendo su expresión de alegría.
Enseguida le preguntó:
- ¿Qué te parece? ¿Te gustan? -
-Así me gustaría tener adornado mi cuarto, te envidio Luis, mira el mago, la gitana, la hechicera y mi hermosa bruja, amo tanto a este grupo de rock pop. -
Luis enseguida le expresó:
-Admiro a THE SALEM, pero admiro mucho a Sahara Mendoza Luna, es mi ídolo quisiera algún día poder ver en vivo a la Diva de México. -
Diciendo estas palabras, Luis despacio colocó su mano derecha en el poster, como acariciándole la cara a la artista Sahara, la tocaba con mucha delicadeza, mirándola con mucho amor, enseguida señaló:
-Sabes Norma, "cómo me gustaría ser artista, ellos tienen dinero y no tienen problemas."
Norma veía a Luis muy apasionado con su mano derecha acariciaba el poster de la Diva de México, Sahara Mendoza.
Hasta que le expresó:
- ¡Bueno! Tómame la pinche fotografía, yo quisiera que Jorge Morales Sierra me abriera de nalgas y se deslechara dentro de mí fundillito, pero él es un artista y yo no, pon los pies en la pinche tierra, eres un pendejo soñador, nunca estarás con tu estrella. ¡Nunca! -
-Eres muy cruel. ¿Lo sabias? -
Le preguntó mirándola sonriendo, enseguida se agachaba para agarrar su cámara instantánea. Norma sonrió al mirar que Luis la enfocaba, sintiendo el flash azul de la cámara,
cuando el trailero tuvo la instantánea en su mano se la dio a Norma para que le pusiera su nombre, diciéndole:
-Tú como ellas, serás mi artista, pero tú si me darás tu autógrafo. ¿Verdad preciosa? -
Norma sonrió poniendo su nombre y su firma en la fotografía, escribiendo: "Con amor para mi amigo Luis Estrada Camacho de tu amiga Norma Vergara Rico."
-Gracias por firmar la fotografía, la verdad es que te ves muy bonita Norma. -
Norma ahora agarraba el yurés, colocando su fotografía a un lado de la foto de Araceli García, arriba del poster de Jorge morales Sierra, cuando volteó le dio un beso en los
labios a Luis, quien de inmediato empezó a manosearle sus grandes nalgas, repegándose los grandes senos a su cuerpo.
Al separar sus bocas Norma le comentó:
-Ya me voy, tienes mi número telefónico, me hablas para vernos si no tienes viaje, si algún día regresas ya tienes mi dirección, espero poder estar sola en mi casa... te estaré
esperando. -
Luis al escuchar sus palabras, sonrió contestándole:
-Si no estás sola, aquí mi camarote es amplio para hacerlo una vez más preciosa... ¡Ah! Y aquí está mi tarjeta con mi número telefónico, para estar en contacto cuando quieras llámame preciosa. -
Norma sonrió, recibiendo en su mano derecha la tarjeta de presentación, diciéndole:
-La guardaré para saber en dónde andas Luis, algún día me sienta sola y platicamos. -
Él, sujeto del brazo a Norma, acercando una vez más sus labios a los de ella, después de un largo beso le decía:
-Te voy a extrañar. ¿Me dejarías besarte las nalgas una vez más? -
La joven lo miró directamente a los ojos, bajo su sonrisa contestándole:
-No, ya me voy, no me quiero tardar, aquí adentro de tu tráiler, si me ven las personas que están aquí pensarán mal de mí. -
Luis escuchando la pendeja excusa, la miró a la cara, poniendo su mano derecha en la barbilla de ella, levantándole un poco su rostro diciéndole:
-Vamos amor, no te toma ni un minuto, solo te levantas tu horrible falda, te agachas y te beso tus deliciosas y grandes nalgas. -
Ella, mirándolo a sus ojos sonrió, contestándole:
-Eres un pinche loco y terco, como los chingados burros. ¿Lo sabias? No entiendes pinches razones cabrón. -
-Tus nalgas volverían loco a cualquiera, tu eso de seguro lo sabes, es más déjame decirte que si te cogiera Jorge Morales Sierra, sentiría que está tocando su acordeón con tremendas nalgotas que te cargas... -
Ella lo besó en los labios, callando sus palabras, al terminar el beso le sonrió, enseguida se dio la vuelta dándole la
espalda ya se agachó y con sus manos se levantó la falda negra que le llegaba a las rodillas.
Luis al mirar esto ahora se hincó detrás de ella, mirándole una vez más esas grandes nalgas que lo hicieron derramarse tan rico.
Sin esperarlo, ella se bajó su panti negra hasta las rodillas, él acerco sus labios besándole cada nalga manoseándoselas con mucha lujuria, se las abrió lamiéndole con su lengua el fundillito tratándole de hundir su lengua, después recorría su mano derecha tocándole todo su bizcochito.
-Ya ¡Ya! Es suficiente, capaz que tú vas a querer cogerme aquí otra vez. -
Después de decirle estas palabras, ella se enderezó bajándose la falda negra, se dio la media vuelta, con su mano derecha se sacaba de sus piernas su pequeña panti, puso su mano izquierda en el cabello de Luis lo agachó un poco besándolo en los labios, poniendo en su mano derecha su diminuta panti negra, diciéndole:
-Nunca me olvides amor, llévatela de recuerdo coges bien rico, y la verdad quisiera volver hacerlo contigo, pero no ahora ni aquí. -
Después de decir estas palabras y antes de que él insistirá.
Norma se dio la vuelta saliéndose con cuidado del camarote, sintiendo la mano de Luis acariciarle las nalgas por última vez.
La chica por fin se bajó del tráiler dándole la espalda a Luis caminando de prisa saliendo de la enorme bodega.
Como era vecina de ellos, no quería que alguien la viera y hablarán mal de ella, o que inventaran que estuvo mucho tiempo adentro con el trailero, como buena religiosa que era tenía que cuidar su buena moral e imagen ante la gente, si no.
¿Cómo les tocaría a su puerta cada fin de semana para invitarlos a leer su biblia?
Luis con su mano derecha cerró la puerta del copilotó, ahora protegido por sus vidrios polarizados la vio alejarse de su tráiler, poniéndose enseguida la panti en su boca y nariz, aspirando el delicioso olor que dejaba esa hermosa hembra caliente, pero estos recuerdos eran para que nunca la olvidara, y cuando regresará al estado de San Luis Potosí la buscara sin demora.
Sabía que esas deliciosas nalgas, ya eran de él, no tenía que rogar por ese cuerpo, solo tenía que llamarle y ella ahí estaría dispuesta a hacer de todo con él, para el chofer, solo era una
aventura más, en los caminos de México de norte a sur.

Gracias por seguirme.
Los invitó a leer mis novelas publicadas aquí en wattpad

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Soy Humberto David Arellano Vázquez. Aries.
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