Capítulo 30.🥃

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Pasado

Es inútil amar lo que te ignora. -Ida Vitale.



Alessandro

Por un momento no sabía qué hacer con el cuerpo casi destrozado de Kyle, tuve que quedarme parado viendo a la nada para darme cuenta de que la única persona que puede hacerse cargo de él es la única familia que le queda y que sé que respetaría algo como esto. Su muerte.

Hailee llegó pocas horas después de lo que pasó. Ella dijo que lo llevaría a Las Vegas y lo enterraría junto con su padre. Decidí no contradecir.

En cuanto a Julián y Roxanne, permanecerán en la casa hasta el amanecer, la mujer no se encuentra bien después de lo que pasó y necesita algo de descanso. En cuanto a Andrew y Morgan, se quedarán en Palermo hasta que yo capturé a mi padre y terminé de una vez con todo este maldito tormento. Es parte de nuestro acuerdo.

—Ya está dormida. —Gianna aparece en nuestra habitación— Estaba muy cansada.

—Jugó por más de dos horas con dos niños que debo decir están muy locos —me río

—Mis hermanos eran peor. Mamá los seguía todo el tiempo vigilando que no rompa nada y la Nonna solía decirle que los dejé tranquilos, descubrir era parte de su crecimiento.

—¿La extrañas?

—¿A la Nonna? —asiento despacio— por supuesto que la extraño. Ella fue mi madre, ella me enseñó mucho de lo que sé. Estaría tan orgullosa de verme dónde estoy ahora. Incluso a ti te adoraría.

—Todo el mundo me adora. —Menos tú.

Borra eso de tu cabeza, Russo.

Ya está a mi lado con su cabeza en mi pecho y dando unos cuantos besos. No me dice nada más, solo empiezan a recorrer con sus manos todo mi pecho y sigue bajando, pone una mala cara cuando mira que llevo ropa interior.

—¿Desde cuándo duermes con bóxer?

—Desde que tengo una hija.

—No es cierto, siempre duermes desnudo.

—Eso es lo que tú crees —me río deteniendo su mano cuando veo que va demasiado lejos—. Duerme un poco, ha sido un día largo.

Vuelve a poner mala cara, pero no dice nada. Me besa como si su vida dependiera de ello, después de eso solo de acomoda a mi lado y ambos nos quedamos dormidos en cuestión de minutos.

En definitiva, fue un día muy largo.

🥃🥃🥃

Es extraño que no me haya levantado con el llanto de todas las mañanas de mi hija. Para cuándo abro los ojos, ya veo a Gianna salido del baño con la niña en los brazos, apenas me ve, se pone a gritar y a balbucear la palabra papá.

—Buen día —ya me está pasado a la niña.

—Hola —se sienta a mi lado.

Yo me tomo la molestia de terminar de secar a la niña y vestirla con el lindo conjunto que Gianna escogido para hoy. Mi hija no sé queja y solo se entretiene con la toalla rosa que la envolvía.

—¿Qué hay para hoy? —me dirijo a ella sin levantar la vista.

—Agendé de nuevo las reuniones que tenías. Las de Enzo y Mattia.

Senza Mafia © | ITALIA 2 |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora