26- son las 4am

421 38 1
                                    

26- son las 4am

Durante marzo James casi no veía a la chica Malfoy, nunca estaba en su sala común, en las clases ni siquiera lo miraba, sin duda alguna, lo estaba evitando.

Él no dejaba de buscarla, pero ella nunca estaba en ninguna parte, ni siquiera sabía si seguía durmiendo en la torre que compartían.

Lorcan y él nunca hablaban de ella. Ahora era un tabú hablar de ella con ambos amigos cerca, pero James sabía que cuando no estaba Lorcan cerca era porque estaba con ella y eso causaba un gran dolor en su pecho, uno que no demostraba frente a los demás, pero que ahí estaba.

Se paró en seco en el medio del pasillo en cuanto la vio, su cabellera rubia casi blanca llamaba la atención a donde estuviera. El corazón de James empezó a latir con fuerza, esta era su única oportunidad, no había nadie más que ellos en aquel pasillo, por supuesto que no lo habría, eran las cuatro de la mañana.

Camino hacia ella, llamándola por lo bajo, esperando a que respondiera.

La joven malfoy se dio la vuelta y al verlo quiso echar a correr, pero quería quedarse allí al mismo tiempo, quería verlo.

-Potter.

-Cass.

Se paró en el lugar y cruzo sus brazos, esperando que james dijera lo que tenía para decir.

-¿Cómo estás?

James se golpeó mentalmente por eso y Cassie solo resoplo.

-cansada.

-cool.

-seguro. Potter si no tienes nada que decir, me iré a dormir. - había empezado a darse la vuelta cuando él la tomo del brazo.

-no quería saber eso- Cassie lo miro mal- es decir, si quiero, si quiero saber todo lo que te pasa, pero no es eso lo que más quiero saber.

la chica malfoy sabía que si se quedaba nada bueno podía pasar, lo sabía, pero aun así quería quedarse, quería saber a dónde llegaría todo aquello.

-Potter.

-No, Malfoy, no sé qué ha pasado, en que momento he empezado a sentir cosas por ti, pero ahora no puedo controlarlo. - james comenzó a acercarse a ella, casi no dejando distancia entre ellos- he sido hechizado por ti.

-¿de verdad, Potter? "hechizado"

-es un buen chiste- dijo tratando de sonreír- vamos, tu eres bruja, estas en una escuela de magia, es decir, es chistoso.

Ella negó con la cabeza.

-perdón, estoy nervioso, ni siquiera sé porque estoy nervioso, son las cuatro de la mañana, han pasado semanas desde que tu no me hablas y esta es la primera vez que estamos cerca en todo este tiempo, ni siquiera apareces por nuestra sala común. Es como si hubiéramos roto sin realmente nunca haber estado juntos. Y simplemente me esta volviendo loco- james se acercó hasta dejar sus labios a centímetros de los de Cassie- me estas volviendo loco, Malfoy.

Pero antes de que sus labios siquiera pudieran tocarse Cassie puso una mano en su pecho y lo separo de ella.

-no puedo Potter, son las cuatro de la mañana, no estás pensando claramente y, además, tengo novio.

James se recostó contra la pared mientras se agarraba la cabeza.

-no sé qué me pasa.

-yo tampoco lo sé.

-eres terrible ayudando a la gente- dijo aun sin mirarla.

-para que conste, no trataba de ayudarte.

-seguro serias terrible en eso también- dijo entre risas.

Cassie se sentó a su lado, pero sin mirar hacia él, solo al frente como si la ventana fuera súper interesante.

-soy increíble.

-tienes el mismo tacto que un basilisco.

Ambos se rieron de ello. Y de pronto un cálido silencio los abrazo, se quedaron allí sentados, sin hablar, sin siquiera mirarse por un rato y aun así se sentían felices por alguna extraña razón.

-¿Qué hacías en el pasillo a esta hora?- pregunto finalmente james.

-mandándole una carta a mi padre.

-oh.

Ella asintió.

-¿todo bien con tu padre?

-no tienes que hacer eso.

-¿hacer qué?

-como si te interesara mi familia.

-¿Cómo está tu padre, Cass?- volvió a preguntar.

-Metido en su propio mundo de fantasía- de pronto su voz sonaba triste- a veces solo desearía que pasara de la muerte de mi madre, todos sufrimos, pero supimos superarlo- ella vio a James- solo deseo que mi padre se dé cuenta que tiene dos hijos, ni siquiera habla con Scor, solo le interesa encontrar esa estúpida cura.

-¿no es bueno?- Cass lo miro- ¿no te serviría?

-me serviría más tener un padre, uno de verdad, no uno que se esconda detrás de sus opciones.

Cassie se paró de golpe y le extendió la mano a James para que hiciera lo mismo.

-buenas noches, Potter.

-Cass- ella lo miro- deberías decírselo.

-pregúntale a tu hermano porque jamás puede hablar con tu padre, Potter. Entenderás que algunos de nosotros no podemos solo hacer lo que queremos ni necesitamos, algunos de nosotros no podemos hablar con nuestros padres como deseamos.

Y sin decir nada más se levantó y camino hacia las mazmorras. James la vio irse, tan tranquila como la vio llegar.

Se maldijo internamente, eran las cuatro de la mañana que, hacia él en aquel pasillo en ese horario, solo sabía que cuando se levantó de golpe debía levantarse de su cama y caminar, y cuando lo vio, lo supo, no podía ser una coincidencia, encontrarla allí a esa hora de la madrugada. 

¡POTTERRRRR! (James Sirius Potter)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora