¡POTTERRRRR! (James Sirius Potter)

28- que bonitas palabras, deberías escribirlas y venderlas

28- que bonitas palabras deberías escribirlas y venderlas

Cassie estaba sentada en el sillón de la sala común, admirando el creciente fuego, movía su cabeza para donde la llama más grande crecía. Era un día fresco para ser primavera o quizás ella solo buscaba la excusa de prender un fuego que la reconfortara de aquellas semanas de su vida.

No quería estar allí, prefería estar en la mansión junto a su padre, pero sabía que jamás la dejaría ir a casa. No es como si odiara el colegio, solo no era el lugar que más feliz la hacía y mucho menos en aquel momento. Quizás el haber estado con Lorcan era algo que jamás debió haber pasado, quizás tratar de empezar una amistad con Potter no era su destino. Ella solo quería volver a su habitación y compartir sala común con sus mejores amigos, quería salir con Cornelia durante las tardes.

James paso de largo al verla la primera vez, pero ya la segunda vez se acercó. Ninguno hablo, no hacían falta palabras para llenar aquel silencio, no hacía falta decir nada para saber lo que ambos iban a decir.

-aguamenti- susurro la rubia mientras apuntaba al fuego haciendo que un chorro de agua saliera de su varita para finalmente apagarlo.

Se levantó del lugar y fue directo a su habitación, donde busco un pergamino, una pluma y un saco antes de encaminarse de regreso. Esta vez fue ella quien paso de largo, dejándolo solo al joven Potter. Paso a través de la sala común y salió de aquel lugar.

Se encamino hacia la torre de astronomía, la cual estaba siempre abierta, y sentándose en uno de los ventanales empezó a escribirle una carta a su padre.

"querido papá:

He pensado mucho en esto últimamente y quizás deberíamos pensar el implementar que estudie en casa, tu eres un gran mago y estoy segura de que podremos afrontar unos profesores particulares. Es que aquí no he logrado sentirme como en casa, y las cosas no han sido mejores.

Sin agregar que me he preocupado por ti últimamente, eres un viejo solitario un poco cascarrabias, la compañía de tu hija no te haría ningún mal o quizás deba pagarle a un muggle para que intente ser tu amigo.

(tranquilo, todavía no lo he hecho, pero lo considero seriamente)

Por favor, en cuanto recibas esta carta envíame otra de vuelta, lo estaré esperando.

Cassie."

Doblo en papel en dos y contemplo al cielo, era entre muchas cosas, una carta bastante honesta para lo que ellos solían hablar. Casi miro al cielo, buscando un milagro, creyendo que algo mágico pasaría, era una bruja ¿no es cierto? Entonces cosas magnificas y sin sentido alguno con la realidad deberían pasarle. Pero no era así y ella lo sabía, era una bruja de un cuento de terror no de un cuento de hadas, aquellas cosas no pasaban en su mundo.

-malfoy.

Ella cerro los ojos tratando de no llorar.

-Potter- dijo con la voz casi quebrada. No quería lidiar con él en aquel momento.

-lo siento

- ¿Por qué lo sientes? ¿Por gustar de mi o porque mi novio haya cortado conmigo por tu culpa? - dijo aun sin mirarlo.

-ambos.

-sí, yo también.

Y el silencio los fundió por un triste y corto momento.

-en realidad no siento el que me gustes.

Pero ella no contesto.

-malfoy, te he odiado durante años, eres una malfoy y yo un Potter y tan solo...- no había palabras suficientes para explicar lo que quería decir.

-entonces nadie puede amarme por eso, solo por mi apellido. Grandioso Potter, así conquistas a alguien- dijo sacándose algunas lágrimas que espero que james jamás viera.

Y él no las vio y jamás las vería.

-NO- dijo apresuradamente- no es eso. Malfoy- dijo llamándola, esperando que ella lo viera. - lo que quiero decir es, te amo, a pesar de que seamos lo opuesto. Todos dicen que debes buscar un alma gemela, pero yo no quiero un alga gemela, te quiero a ti. Tú me complementas, no me adoras como todos por ser el hijo de alguien, tú me haces reír sin querer hacerlo, me dices las cosas como son y no como quiero que sean y eres honesta como nadie lo ha sido.

James termino con su voz casi cortándose por la falta de aire de lo rápido que había hablado.

-bonitas palabras, ¿te las escribió tu mami?

Una suave carcajada salió de los labios de james.

-mi madre ha amado a mi padre desde el momento que tiene memoria, Malfoy, créeme, estas son mis palabras.

-pues- dijo ella- bonitas palabras, deberías escribirlas y vendérselas a honeydukes.

-eso hare- afirmo el chico

El clima había pasado a ser cálido entre ellos dos.

-¿cass?

-¿si?

-lamente que Lorcan haya roto contigo.

-sí, yo también.

-aunque no lo lamento tanto.

-te detesto, Potter.

-y yo te amo malfoy.

Poco a poco él se fue acercando más y más a ella hasta ambos quedar sentados en el mismo lugar a solo unos centímetros de distancia.

-si llegas a romperte el corazón, voy a romperte la cara

El sonrió y tomo la cara de ella con sus manos para finalmente besarla. Y en aquel momento james sintió como fuegos artificiales salían de su pecho, sintió la verdadera felicidad por un único momento donde pensó que podía conquistar un planeta entero.

Estaba enamorado.

O eso creía.

Pero no hay nada más bonito que un adolescente enamorado por primera vez.