Señor Arrogancia

Treinta y cuatro

Termino mi maquillaje y peinado. Había optado por unas ondas en el cabello y un smokey eye acompañándolo con un labial nude perfecto para la ocasión.

-Anda Chalamet. Ayúdame a elegir el vestido.

Compartía una videollamada con Andrew.

-Creí que tenías todo preparado, cariño.

-Mamá me mandó dos vestidos para la ocasión. Está muy emocionada por la galería.

-¿Qué color son?

-Verde y marrón.

-Verde.-veo cómo sigue acomodando algunos postres.

-Ni siquiera me pones atención. ¿Qué haces?

-Estoy afinando los últimos detalles, señorita.-enfoca la cámara en la gran mesa de la cocina.

-Wow, todo se ve delicioso.

-Tu bello hombre musculoso también se ve delicioso.-sonríe coquetamente.

-¿De qué hablas?.-frunce el ceño.

-Henry Cavill se cae de bueno.

-¡Oye!.-suelto una gran carcajada.-¿Ya lo encuentras atractivo?

-Siempre lo fue, querida. Aún sigue siendo un idiota pero debo decir que se ve bastante bien.

Sonrío como una boba. ¿A qué se refería Chalamet?

-Optaré por el vestido verde aunque es un tanto revelador. Mamá se superó en tratar de adivinar mi forma de vestir.

-Te verás preciosa, bonita. Bueno, te dejo porque los invitados ya están llegando.
Ciao, bella.-termina la videollamada.

Luego de unos minutos de caos tratando de ponerme el vestido al fin termino y llamo a un taxi.

Henry

-¿Todo bien mamá?.-beso su mejilla

-De maravilla, cariño.

-¿Ha comenzado el evento para regalar dinero a los pobres?

-Liam.-mi madre lo reprende con la mirada.