Los galgos corrían persiguiendo la zorra que habían liberado por el campo, sobre su corcel estaba Marvolo Casterhill y a su lado su hijo mayor Haytham. Marvolo levantó el fusil y disparó el tiro golpeó el tronco del árbol a escasos metros de la zorra, y se fue a esconder en la arboleda, los perros fueron tras ella.
—Maldición. —Respondió Lord Marvolo.
—Padre, la edad te está traicionando. —Dijo el joven Haytham, burlonamente. —Deberías hacerte a un lado y dejar que yo me encargue a partir de ahora en adelante. El contragolpe de la culata puede que sea mucho para tus huesos.
Cicerón sabía que la condescendencia de Haytham con su padre era bien recibida, Marvolo era un bastardo que trataba como basura a todos los que no fueran él, era capaz de ser hiriente no con los puños como el padre de Cicerón se lo mostró cuando era un niño, sino con la palabra. Sus insultos llameantes junto con una helada mirada sin sentimiento, eran capaces de forjar a dos muy jodidos hombres.
—Sir Barkley, por favor deme el otro mosquete. —Ordenó lord Marvolo, Cicerón le pasó el mosquete al su señor. Mientras el hombre volvía a apuntar. Haytham se reía entre dientes. Marvolo volvió a disparar, pero volvió a fallar. Los dos casterhill entraron en las faldas del bosque tratando de buscar a la zorra.
Cicerón volvió a tomar el mosquete y pasarle el otro que había recargado a su señor.
—Padre hay algo que quiero decirte.
—¿No puede esperar? Que ahorita estoy ocupado. —Respondió Lord Marvolo, su tono era frio y seco, casi irascible.
—Padre me han llegado algunos informes un poco inquietantes sobre nuestras inversiones en las colonias. —Dijo Haytham.
—¿Ah sí? ¿Y que podría estarte inquietando?
—Los franceses, podrían intentar un ataque a los colonos en Boston, ¿No es en Boston donde tenemos nuestras inversiones mineras?
Marvolo ignoró a su hijo y continuó buscando a la zorra. Entonces se escuchó un sonido entre unos arbustos, Marvolo entonces apuntó...
—¡Padre! —Exclamó Haytham. Marvolo se asustó y disparó el tiro impacto en el arbusto, inmediatamente uno de los perros de caza salió corriendo asustado. Marvolo indignado bajó el mosquete y dio una larga respiración, Cicerón sabía que Lord Marvolo no podía perder el temperamento.
—Escucha Haytham, si siempre te preocupas por aquello que es insignificante y dejas de lado lo importante, entonces nunca podrás ser un buen empresario. —Respondió Lord Marvolo. —Las inversiones en Boston, son un chiste, la razón por la que abrí una línea de suministros en las colonias es por el simple hecho de que esos mal nacidos que huyeron de la persecución, es para que recuerden de donde vienen, y quien es quien controla ese lugar. Cuando el rey Jacobo fue a la guerra, confeccionamos, los uniformes de sus tropas en nuestras sastrerías, les exportamos vino de nuestros viñedos y mosquetes de nuestras forjas. Y cuando Jacobo escapó a Irlanda, lo cambiamos por el rey Guillermo. Si los franceses ganan en las colonias en ese pedazo de lodo al otro lado del mar, entonces haremos nuestros negocios en francés.
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Dignidad y Destierro
Historical FictionEl sueño de Genever Denan simpre ha sido conseguir la mano de Lady Lyanne Merrybound. Y ahora que regresa a Yarmouth como veterano de la guerra en Irlanda cumplirá con su sueño de una u otra forma. Cuando Lyanne Merrybound recibe las noticias sobre...