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¿Qué tan difícil es aceptar que no somos tan fuertes como aparentamos? ¿Qué detrás de cada sonrisa, grosería o grito se oculta una persona asustada que no sabe como pedir ayuda? ¿al final del día es orgullo o terror? ¿realmente nadie te ama o tu no eres capaz de verlo? Podemos pasar horas buscando argumentos, pero sin importar cuanto hablemos con nuestro reflejo la respuesta no llegará porque no queremos verla.

—Es un tema privado, no puedo llenarte de preguntas cuando acabas de despertar—

Yuri odiaba la forma tan directa y estricta de hablar que usaba Otabek cuando estaba serio, lo hacia sentirse como un niño. Todo indefenso y tonto, como si necesitara que le explicaran las cosas sin manzanas acarameladas — Si fuera privado me hubieras dejado donde estaba, no tenias porque ayudarme — su lengua filosa siempre estaba lista para atacar, no le importaban las consecuencias.

—Somos amigos, claro que tenia que ayudarte. Tu hubieras echo lo mismo por mi — Otabek era sincero, pero sus palabras solo ocasionaron una risa algo burlesca en Yuri ¿Cómo tenía energías para pelear? En ocasiones se preguntaba si el rubio era muy terco o simplemente muy tonto. Nadie en su sano juicio estaría discutiendo un rescate, hizo lo que cualquier amigo debía hacer. Le tenía cariño a Yuri, mucho mas que un cariño de amigos, pero no era el momento de discutir sentimientos profundos.

—¿yo? ¿a ti? Mr.Perfect JAMAS estaría en una situación tan complicada. Tu eres el ciudadano perfecto, con perfecta vida, perfecta familia, perfectos amigos y perfecto todo. La gente como tu le gusta ayudar a la gente como yo porque se sienten poderoso. No lo haces porque somos amigos, lo haces porque me tienes lastima... — un dolor pulsante en el pecho hizo que dejara de hablar, pero aun tenia muchas ganas de continuar — tu y yo no somos lo mismo, puedo tener los recuerdos borroso, pero sé que estabas feliz en una fiesta donde yo puedo ser invisible. Donde si desaparezco tendrías a mil personas mejores para hacerte reír y después de escoger a una irías donde mi abuelo a ofrecerte a ser un perfecto nieto ¡Te odio! —

Quizás, solo quizás se había pasado y las palabras salieron de golpe. Solía ocurrirle, no se controlaba y odiaba los hospitales, odiaba el hecho de estar allí. No existía nada peor que enfrentar la realidad cuando habías intentado alejarte de ella. No odiaba a Otabek, odiaba verlo allí todo preocupado por sus estupideces. Solo quería desaparecer y aún no había visto a su abuelo ¿Cómo podía causarle tantos disgustos? ¿Cómo podía ser tan egoísta?

—Yo te amo, te amo lo suficiente para los dos. También tu abuelo te ama mucho, por lo tanto, tu odio no puede contra nuestro amor — Otabek conocía los ataques de ira del ruso, sabia que estaba asustada y quería alejar a todos para sentirse miserable a solas — Mira a tu alrededor — el lugar estaba lleno de peluches de gato y flores — Tu abuelo y yo lo decoramos, sabíamos que despertarías pronto y nadie más sabe lo ocurrido. Todo va a salir bien, los demás creen que estas de vacaciones. Tu salud mental no es un tema público, un juego o algo de que avergonzarte. Nadie es tan perfecto como crees, todos tenemos nuestras grietas —

Otabek no estaba seguro como animar a Yuri, pero había leído ciertas cosas mientras su querido rubio dormía. Lo mejor eran las acciones, por lo tanto, el rubio regresaría a una habitación completamente limpia y organizada. También tendría muchas mantas suaves, peluches que abrazar y su comida favorita esperándolo. Él y su abuelo se encargarían de demostrarle lo especial que es, lo mucho que lo amaban y cuanto lo extrañaron. Podía verse complicado, pero esperaba que Yuri entendiera que pedir ayuda era de valiente y no de cobardes.

—Eres muy agotador —

Se quejó completamente avergonzado, de nuevo se sentía como un tonto. Uno muy débil, su enojo le estaba cobrando factura y aunque quería seguir reclamando su cuerpo decidió apagarse. Estaba agotado, pero de cierta forma sentía algo cálido en su pecho. Música suave de Tchaikovsky sonaba de fondo y no volvió a soñar con mujeres rubias llorando, dragones heridos, lobos aullando y arboles malvados que lo atrapan entre sus ramas. Esta vez no sonaba nada en específico, solo se dejaba ir por el agotamiento metal que le ocasionaba Otabek.

Era muy complicado saber que lucia tan vulnerable frente a quien le gustaba tanto, pero al final del día no podía evitarlo. Otabek a pesar de ser tan odiosamente perfecto, lo hacia sentirse protegido. Era un sentimiento familiar, su abuelo le causaba lo mismo. Ambos ocultaban una personalidad amable tras la cara seria que siempre usaban con el mundo. Quizás Otabek tenía razón y ellos podían entenderlo más fácilmente de lo que creía. A veces la decisión correcta era la mas dolorosa y complicada. Aunque existía la probabilidad que todo sea doloroso en la vida y nada tenga sentido, sin embargo, no quería pensar en ello. Solo deseaba volver a su cuarto, a su casa con su abuelo y quedarse allí encerrado con su gata.



Hola a tod@s! Como ven estoy cumpliendo mi palabra y estoy publicando cada semana, también tengo planeado iniciar una historia de romance y fantasía con Yuri y Otabek. Seria algo nuevo, pero tengo una historia de fantasía que inicie que combina bien con algo que tengo en mente...peroooo nada es seguro. Solo quería comentarles.

Luego quiero darles las gracias por seguir aquí conmigo, enserio no se imaginan lo mucho que significa para mí. Espero tengan un hermoso día.

Bad Reputation (OtaYuri)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora