Capítulo 5

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23 de Diciembre. (Parte 2)

Cuando se va, vuelvo a mi silla perdiendo la postura rígida. Y suelto un gran suspiro. Es tan irrespetuoso el modo en que su presencia me intimida. Irrespetuoso.

Stiles está de espaldas cuando vuelve a la recepción, concentrado en su portátil. Hablando con Cora, me doy cuenta de que nació en Beacon Hills, pero se mudó aquí con su familia cuando tenía doce años. En realidad, no la recuerdo para nada, pero cuando le pregunto cuál era su apellido, lo reconozco

— Hale — me dice.

— Una vez conocí a dos Hale

Cora me miró y sus ojos se curvaron con auténtica sorpresa. — ¿De verdad? ¿A quiénes?

— A un chico llamado Derek y a su tío... cuyo nombre no recuerdo bien, pero una vez me dio un caramelo

Cora dejó caer su mano sobre el mostrador y el fuerte sonido casi me hizo saltar. — ¿Oíste eso, Stiles? — se volvió hacia él y le sacudió el hombro. — ¡Conoció a Derek!

Stiles se aparta de la mano de Cora — Sí, Cora, lo escuché. Estoy ocupado

Cora pone los ojos en blanco y me mira de nuevo. — ¡Ese es mi hermano! El otro sería mi tío Peter, ¡que pequeño es el mundo!

— Beacon Hills es un pueblo pequeño, casi todo el mundo se conoce. Sólo dame cuatro nombres, y apuesto a que conozco al menos uno

— ¡De acuerdo! — al instante adaptó una cara pensante — Uhm, veamos los que conocí en la escuela. Erica, Graham... Jackson— se giró hacia Stiles, pero mi respiración se detuvo en el último — ¿Recuerdas a alguien?

Sus ojos parpadearon hacia mí; notó la mirada de sorpresa en mi rostro justo antes de volver a mirar a Cora. — A mi me educaron en casa.

— Cierto... lo había olvidado.

— Conozco dos de esos nombres — interrumpo, llamando su atención. — Erica Reyes y Jackson Whittemore. No te recomiendo al último.

— Oh, realmente no recuerdo mucho de ellos... pero sí recuerdo a ese chico porque era ridículamente rico

— Eso es cierto. También se mudó aquí, de hecho. Como tú. Sigue siendo rico, conduce un porshe muy caro pero yo le rompí las ventanas. Puede conseguir unas nuevas, así que está bien. Se lo merecía.

La cara de Cora se transforma en una expresión de comprensión, captando al instante lo que estaba diciendo. Stiles se limita a desviar la mirada hacia su portátil.

— Mierda, que idiota. Lo siento-

Me encojo de hombros con una carcajada — No pasa nada

— Que conste que siempre me pareció un poco imbécil

— Puedes confirmarlo ahora

Ella también se ríe, sus ojos casi reflejan un suspiro de alivio. Cambia de tema, lo que agradezco. Le cuento la historia de cómo la tía de Allison salió con Derek durante un tiempo, y cómo conocí a Peter cuando salía con la madre de Scott. A Cora le parece incómodo que los haya conocido porque salieron con alguien, pero no pierde la oportunidad de hacer bromas al respecto.

— No puedo creer lo mucho que puedo averiguar sobre mi familia a través de una desconocida. Veo que vivieron su vida en Beacons Hills como perros

— Se veían muy amables

Cora le da un golpecito en el hombro a Stiles, que no parece nada interesado en el tema de conversación. — ¿Qué tal, eh? No sabía que ustedes tuvieran tanto en común.

Motel California - StydiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora