Capítulo 4: ¡Progresando a buen ritmo!

27 7 0
                                    

Dos meses pasaron nuevamente. Light siguió progresando y también fue creciendo poco a poco. Ya podía moverse muy bien a la hora de esquivar ataques de su padre, Light ya se iba adaptando a su pequeño cuerpo y fue mejorando con la espada.

El combate cuerpo a cuerpo era progresivo, Albert le creó un pequeño muñeco de practica para que Light entrenara con él. Eso lo ayudaba mucho, puesto que su padre era grande y a la hora de un combate, no podía llegarle del todo.

En cuanto al progreso de la formación de su núcleo de mana, las cosas iban muy bien. Light ya podía ver un pequeño hilo de mana que formaba un circulo. Eso significaba que el núcleo iba tomando forma lentamente.

El buen progreso llenaba de felicidad al pequeño, además de que lo motivaba a seguir adelante.

Light no solo se enfocó en la lucha y la formación de su núcleo de mana, si no que también indagó más sobre el continente. Tener un gran conocimiento a una temprana edad era bueno para él. Además de que su memoria era tan buena que podía recordar todo a pesar del tiempo.

Light descubrió que el reino humano era grande, allí albergan seis grandes ciudades, 6 ciudades medianas y muchos pueblos y villas. Además de poseer la ciudad central donde vivía el rey. La ciudad era como dos ciudades grandes.

Cada ciudad es cuidada por personas aristócratas y varios nobles. Los pueblos eran propiedades de esos aristócratas, pero habían algunos como el pueblo Nion que eran ignorados debido a su localidad y progreso.

Otra cosa que notó Light mientras leía era que, el interés estaba muy presente en este continente. Si no eras de gran beneficio para el reino o las ciudades, no eres digno de mención.

Lo mismo pasaba con las personas, si no eras talentoso o por lo menos tenías un buen aspecto que podía mejorar el futuro del reino, no eras nada mas que un mero ser inferior. La capacidad de Light de entender esas cosas no eran tan altas.

Light pasó sus tres años recibiendo muchos afectos y en el pueblo siempre lo trataban bien, además de que el pueblo en si era tranquilo y agradable. Es por eso que entender ese tipo de trato aun se le era algo difícil, Light tampoco quiso enrollarse tanto en eso, por lo que lo ignoró.

De igual forma, Light tenía un sentimiento en su pecho por eso, era como lo que sentía cuando vió al topo ser comido por el Alcón, lástima.

En una mañana donde Light practicaba con su padre, no pudo evitar buscar algo de respuesta en su padre. Al ser mayor que el y el haber vivido mas, a lo mejor el sabría algo. Pensó Light.

Light se encontraba golpeando el muñeco de practica cuando se detuvo a preguntarle a su padre.

—Padre, ¿el mundo es injusto?

Ante tal pregunta, Albert no pudo evitar abrir los ojos.

Que su hijo preguntase eso, ya excedía la capacidad de pensar de un niño. Albert recordó el momento donde estuvo a punto de perder lo que más amaba. Recordó cuando su amada y su pequeño Light casi fallecían.

No pudo evitar sentir una injusticia, ellos que tan bien se habían portado en la vida, no tenían el porque pasar por algo tan trágico. Pero después pensó en la suerte que tuvo después de la aparición de la Diosa. Por lo que Albert respondió.

—El mundo y la vida de vez en cuando suelen ser injustas, Light, pero también de vez en cuando tiene sus cosas buenas. Aun eres pequeño, por lo que no lo entiendes del todo, pero mediante crezcas, te darás cuenta —dijo el padre mientras le frotaba el cabello a su hijo—, Pero, aprovecha esta edad para aprender y saber que, este mundo se maneja por la fuerza, el fuerte siempre le gana al débil. ¿Por lo menos entiendes eso, hijo?

La Unión De Los ReinosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora