Calypso ՞๑ kookmin; omegaverse

XXVI

Recuerda que la noche se la pasó llorando, sus chillidos silenciados tras la mordaza siendo acompañado por el sonido del mar azotando contra el barco, las gotas de lluvia saltando por la proa, acallando su sufrimiento en aquella habitación. Se durmió con dolor en su pecho, en sus labios y en sus muñecas, deseando a que su nuevo cautiverio solo haya sido una muy mala pesadilla, solo le pedía eso a la luna mientras caía rendido en los brazos de Morfeo. Pero cuando abrió los ojos, cayó en su cruenta realidad, en donde estaba maniatado siendo llevado en un barco desconocido hacia su nuevo cautiverio. Como hacían con las aves exóticas del Caribe, arrebatándolas para vendérselas a los cerdos aristócratas; así su mansión llena de oro se vería aún más cara. Solo para llenar el ego de alguien más.

A este punto se quería rendir, dejar todo, dejarse llevar con la corriente. Pero seria faltarse a él mismo el respeto, pues nada habría valido si se rindiera ahora. El haberse enfrentado contra las imposiciones de su familia, haber jugado con el destino de su apellido y el haberse arriesgado en su viaje por abrirse un camino muy lejos de su familia, nada de eso valdría si se rendía ahora.

A pesar que las cosas se habían presentado de una forma más complicada y confusa, se emprendió en que saldría de esta, sea como sea, lo haría.

Por eso con la poca fuerza que tenía en sus piernas se levantó, siendo cuidadoso en no hacer mucho ruido, buscando algo que le sirva para deshacerse del nudo que le tenía prisionero. Camino por la habitación, topándose con cajas y muchas cajas, una mesa empinada con ellas, esta mesa era el único objeto que podría ayudarle, aunque sea a deshilar la soga, así que se sentó frente a una de sus patas y pego sus muñecas atadas al filo de la pata, comenzando a mover hacia arriba y hacia abajo, obviamente lastimándose, pero su arduo trabajo le ayudaría a deshilarla de alguna forma.

No podía rendirse, lucharía hasta con su último suspiro.

Nadie le arrebataría sus sueños.

Ni siquiera su destino. Pelearía contra él.

Mientras Jimin lograba que sus muñecas se tornaran de color rojo por la presión que ejercía entre la soga y la madera, lastimando poco a poco la piel blanquecina, Jungkook continuaba al timón viendo desde un telescopio el como el barco prisionero de Jimin se iba desplazando cada vez más, el cómo la distancia entre los dos barcos se iba acortando. Si el clima y el viento les favorecía durante la noche, podrían asaltar el barco a medio día o por la tarde, todo seria dependiendo a como la luna actúe a favor de Jimin, quien era quien menos se merecía sufrir.

Jungkook guardó el telescopio y se puso a pensar en el omega, deseando a las estrellas que lo protegieran de cualquier inconveniente, que lo mantengan en su manto protegido. Culpándose del secuestro del rubio, que si hubiese vigilado mejor la zona jamás lo hubiese dejado en aquel puerto impestado de piratas y guardias reales, jamás lo hubiese puesto en tanto peligro. Se atormentaba por ello.

Y se atormentaría aún más si algo le llegara a pasar a Jimin.

Sería un nuevo peso a su espalda encorvada del dolor, un peso más a su mente atormentada por la soledad y la culpa.

Soltó un suspiro para mantenerse firme y cuerdo, esperando que en la mañana estén lo suficientemente cerca para rescatar a Jimin.

La luna daba a sus pómulos mientras mantenía su mirada en la oscura noche, oyendo el sonido de la llovizna chocar contra el piso y las velas, escuchando como las velas eran apagadas por las pequeñas gotas, el mismo sonido haciendo eco en los oídos de Jimin; quien observaba como la luces eran escasas fuera de su habitación. Sin importarle aquello, pues estaba más enfocado en deshilar aún más la soga.

Lo estaba logrando, sentía sus muñecas más liberadas y sus heridas más prominentes, pero ya podía moverlas tanto que se liberó de ellas. Ahora solo tenía que planear sus siguientes movimientos pues si ahora mismo le daba la locura de salir tal como estaba era muy probable que lo volvieran a encerrar, así que espero hasta que fuese un nuevo día.

El saldría de ahí, costara lo que le tenga que costar.

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feliz noche buena! :3