Capítulo 19

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Se dio mil vueltas en la cama, lloró un poco, dormitó, despertó asustado y lloró un poco más. Las palabras que quería decirle a Ten y a Johnny no querían pasar por su boca, estaban atascadas en su cabeza.

En algún punto de la noche, mientras dormitaba, la puerta se abrió con un ruido tétrico que le erizó la piel. Se quedó quieto, en alerta, escuchando como el intruso caminaba hasta su cama y se acomodaba entre sus mantas, su mente confundida pensó en Sungchan por un momento, hasta que la persona habló.

—Sé que estás despierto, Hendery —Haechan sonaba muy molesto, lo comprobó cuando el menor encendió la lámpara y pudo apreciar su expresión.

—¿Qué ocurre? —Inquirió, no muy seguro de qué hacer.

—¿Qué ocurre contigo? ¿Qué está mal contigo? —Escupió—. Escuché a nuestros padres hablar, ¿por qué demonios ibas a querer irte?

—No lo entiendes —suspiró cansado.

—¡Por supuesto que no entiendo! Ten te adora, ¿por qué eres tan malo? ¿por qué no lo quieres?

El tono del rubio había cambiado radicalmente, había pasado de casi gruñirle a un murmullo ahogado, como si tuviese lágrimas atrapadas.

—Tú no tienes idea, Hendery. ¿Crees que yo quería un hermano? Ni siquiera me gusta Mark como hermano —Continuó—. Ten se veía tan feliz hablando de ti, nunca lo había visto así, ¿sabes? Así que fui a ese maldito lugar incluso cuando quería vomitar y estaba teniendo una crisis de pánico solo para conocerte con la intención de convencerte de rechazarlos, pero tú... Mierda, eres perfecto, el hijo ideal que Ten siempre quiso y no pudo tener en mí porque crecí para ser un desastre andante que no se parece en nada a él. Ten te amó tan fácilmente, mucho más de lo que me ama a mí, ¿aun así quieres irte?

Haechan estaba llorando, tomando respiraciones para controlar el temblor en su voz, de modo que se entendiera lo que trataba de expresar.

—Tú... ¿de verdad no te das cuenta de lo lindo que es cuando estamos los cuatro? Mierda, Hendery, no quiero que te vayas, ellos tampoco quieren que te vayas, pero van a dejarte ir si creen que eso te hace feliz, ¿cómo estar lejos de nosotros podría hacerte feliz?

El castaño comenzó a llorar con la cabeza hundida en sus piernas. ¿Por qué Haechan estaba siendo tan cruel? ¡Por supuesto que quería quedarse! ¡Por supuesto que estaba feliz de ser amado por Ten, por Johnny y por Haechan! ¿No era obvio? Quería decírselo, quería que lo supiera, pero para cuando se calmó, era el único en el lugar.

Se durmió con un punzante dolor de cabeza, al despertar aun le dolía y supuso sin ver la hora que era muy tarde, alguien había dejado desayuno sobre su escritorio, la casa estaba silenciosa, pero no se atrevió a revisar si estaba solo.

Cuando su cerebro se calmó y dejó de doler pensó en lo que le había dicho Haechan, lo mucho que lo había sorprendido que pensara que no era amado por Ten, lo mucho que el niño amaba a Ten, lo mucho que Ten amaba a Haechan, la forma que ellos pensaban que amaban sin ser amados cuando para él era tan obvio que se amaban mucho, muchísimo.

Se dio cuenta de que ellos se sentían como él, como si cualquier cosa pudiera significar que dejarían de ser amados, ¿Ten dejaría de amar a Haechan si no hacía lo que le decía? Pensaba con seguridad que no. ¿Haechan era sincero cuando decía que odiaba a Ten? Ahora sabía con certeza que no. ¿Ellos lo amaban tanto como decían que lo hacían, sin condiciones, solo porque existía? Tal vez él se había equivocado y la respuesta era sí.

Quizá se había equivocado en otras cosas, como cuando pensó que la familia Suh era como el sol y él un girasol siguiéndolos en busca de calor, podía ver ahora que, en realidad, eran todos girasoles que se habían encontrado y se daban la calidez que habían soñado con hallar.

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¡FELIZ NAVIDAD! 🎄

Sunflower | NCT/WAYVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora