𝕌𝕟𝕒 𝕟𝕠𝕧𝕚𝕒 𝕡𝕒𝕣𝕒 𝔻𝕠𝕤 [Hermanos Kawata x Tú]

Capítulo 11:

Resumen de este capítulo ✨Cachos✨

(O cuernos, como le digan en su país)

Reeditado: 20/05/2023.

_____________

Esto es extraño.

Sus labios son bastante suaves a pesar de estar algo lastimados por las múltiples peleas en la que generalmente termina involucrado. Es raro, pero este beso tiene un ligero sabor a durazno lo cual no es precisamente desagradable, no genera una sensación incómoda y eso está bien. El ambiente se siente cálido, su calor corporal me invita a acercarme y estoy tan extrañada por la calma y satisfacción que me trae estar de esta forma con él. Nuestro mundo no comprende que el tiempo sigue avanzando, todo parece haberse detenido, no existe nadie en este momento. Solo estamos nosotros, atrapados en una burbuja de incertidumbre pero aún así deseando continuar, y es que necesito sacarme su amor de debajo de la piel, amerito quitarme este deseo para más nunca volver a sentirlo. En serio pensé que sería más difícil debido a que Nahoya siempre ha sido mi mejor amigo pero esto no es muy diferente a lo que tenía antes, es como besar a Souya.

Me gusta.

Y soy una cobarde, porque no quiero que este beso se convierta en algo más que un mero roce, no puedo. Es cuestión de miedo, no me atrevo a pasar de este nivel que es totalmente manejable, me niego a cruzar la fina línea que yo misma he trazado, si lo hago sería lo mismo que admitir que no me olvidado de él. Si me dejo guiar por los instintos terminaré pérdida en su boca y la profundidad despertará un millón de sentimientos apresados durante años. No habría vuelta atrás, me arrastraría a confesar tantas cosas que todavía no he esclarecido porque estás emociones que me invaden solo por estar cerca de Nahoya aún siguen tan confusas para mí.

¡Espera!

Una mano traviesa se posó sin cuidado en mi cintura sin previo aviso y una demandante petición me hizo gemir de la sorpresa sobre su boca. Enterré mis uñas en su uniforme al entender sus intenciones, con su lengua intentó afianzar nuestra unión y eso me alarmó los nervios. Bastante alterada me negué a su idea, él no pareció contento con ese claro rechazo pero no hizo nada para obligarme, simplemente me dió una descarada lamida en el labio inferior a modo de castigo.

Me retracto, ya no quiero.

Esto no funcionó, me siento incluso peor que hace un rato, y lo que me afecta es que tengo ganas de escapar y desaparecer por razones tan diferentes en mi cabeza. Estoy arrepentida, la situación no puede ser más desalentadora, es tan condenadamente triste y no me ayuda para nada que me siga dañando de esta forma sobre sus labios. Abrí con fuerza los ojos sintiéndome fatal y casi me quiebro en llanto, no puedo fijarme en el chico al que estoy besando sino al que debería desear besar, y se siente tan caótico. Esto se volvió ridículamente catastrófico, me parte el alma que Souya me mire de esa forma tan lastimera, tan devastado. Duele, me quema por dentro que no me vea con molestia o repulsión, solo con esa venenosa mezcla de indiferencia y decepción.

¿Cómo puedo estar besando al hermano de mi novio?

Soy de lo peor.

Con algo de rudeza empujé lejos a Nahoya alejándome del calor que me producía su cuerpo dejándolo a unos cuantos centímetros de mí, me miró con desconcierto pero luego sonrió al ser aplaudido por sus compañeros. Con la vergüenza más grande que he sentido latiendo fuerte dentro de mis venas terminé arrastrando mi pobre presencia hasta mi antiguo lugar. Nahoya con una cuántas reverencias y siguiéndoles el juego a la gran masa de espectadores volvió a su puesto, justo al lado de su gemelo.

⎯ ¡Vaya espectáculo que te montaste Smiley!⎯ gritó con descaro Baji. Su cabello despeinado le daba un toque bastante atractivo y salvaje mientras sonreía con sus ojos bañados en un chispazo de emoción.