Capítulo 25

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Quin Shi Huang recordó conocerla por medio de una presentación, ella era una sirvienta común pero llamó su atención al hablar fluidamente sobre un tema en concreto.

"¿Una guerra es nesesaria? Sólo los ignorantes dirían eso."

Esa fue la única frase que se le quedó en su memoria por mucho tiempo, después de tal osadía y palabras dichas en voz alta estando él presente reveló que era una adivina que hablaba con reyes pasados y que si le permitía, podría apoyarlo en su camino a la cima.

Muchos le dijeron que representaba un mal augurio, que llevaría todo en lo que había trabajado a la ruina o que era una espía para asesinarlo. Sea como fuera, terminó por aceptarla dentro de su harem, movido por el completo capricho y curiosidad.

Después de todo él era el primer emperador, el inicio de todo y un soberano en toda regla. Cualquier cosa o decisión que tomará sería correcta y adsoluta.

Ella nunca hacía nada si no era estrictamente necesario, la llamó ciertas veces para una opinión sobre sus acciones, sumando las "visiones". No sabía lo que tenía pero era entretenido escucharla, su voz tranquilizaba bastante debía admitirlo, pero sólo llegaba hasta ahí.

Hasta que paso ese día de primavera, en época de florecimiento.

──Mi señor, puedo hacer que vuelva su vista.

Eso tomó por desprevenido al emperador.

──¿En... ¿Enserio?.

──Claro.

Sabía por el tono de su voz que estaba sonriendo mientras lo decía, lo cual indicaba que era en serio.

──Sólo debe confiar en mí.

Eso le hizo reír, ya sea por su pasado o no tenía muy pocas esperanzas así que sólo le siguió la corriente.

──Está bien.

Ella le guió por los pasillos hasta llegar a los jardines, lo sabía por el canto de los pájaros y la brisa que portaba el polen, se dejó llevar siendo acostado en el pasto fresco teniendo su cabeza descansando en el regazo de la contraria.

──¿Y ahora que?.

──Debe relajarse, me encargaré de todo.

Y eso hizo, cerrando sus ojos bajo la venda que los ocultaban, sin embargo, por un momento sintió que la tela era retirada así que curioso volvió a abrirlos.

Vio tantos colores sobre todo el cielo despejado junto con la caída de hojas verdes.

Pero se fijo más en esos ojos violeta, tan profundos y brillantes como si de el mismo mar se tratara solo que aún más hermoso, era irreal creer que un ser así fuera un humano o que hubiera pisado el mundo terrenal.

Parecía... No, ella era una deidad.

──Ja. ──el bello ser reía.── le dije que volvería a ver, ¿No me creyó?.

──Te creo... ──susurro llevado por la fascinación que le impulsaba a decir una afirmación positiva a todo lo que dijera.── te creo.

La fémina sonrió aún más, los rayos del sol se asentaban sobre ella de una forma hermosa.

──Me alegra oírle decir eso.

El contrario llevo una mano suya hacia la mejilla de la mujer, rozando un poco su dedo contra esa suave piel temiendo romperla.

──¡Su majestad!.

๑​𝐓𝐇𝐄 𝐖𝐈𝐓𝐂𝐇🪻๑'-╰─── •  ⁽ ˢʰᵘᵘᵐᵃᵗˢᵘ ⁿᵒ ᵛᵃˡᵏʸʳⁱᵉ ⁾ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora