Capítulo 39.

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Me desperté y lo primero que ví fue a Melissa y a su padre sentados en los pequeños sillones grises de la habitación. Allá, a mi derecha.
-¡Daniel! -gritó de alegría Melissa, llegando hasta mí para abrazarme.
Me sorprendí y, alejándome de ella, dije:
-¿Qué pasó? ¿Y Akron?
-¿No lo recuerdas? Lixion te ayudó a escapar del inframundo, pero salió terriblemente herido.
-...Y tú, ileso -continuó su padre, levantándose del sillón mientras comía galletas-. ¿Quieres?
-No, gracias -dije-. Y..., ¿herido? ¿Qué tiene? ¿Qué le sucedió?
-Lixion contó que el Zixu había usado su última energía para protegerte. Por otra parte, Lixion derrotó a Akron, aunque lamentablemente perdimos a muchos de nuestra manada -dijo Melissa.
Miré mis manos.
-Lo...lamento.
Melissa y Andrew se dieron una mirada rápida para después llegar hasta mí.
-No es tu culpa, así que no tienes porqué lamentarlo -dijo Andrew, dándome suaves golpes en el hombro.
Hice unos segundos de silencio antes de continuar con mis preguntas.
-¿Y Byux?
-Aquí estoy.
-Oh, ¡cuánto me alegra poder escucharte, Byux! -reí-. ¿Estás bien?
-Sí, aunque deberías de agradecerme: te salvé la vida.
-Gracias.
-Dios, todavía no puedo acostumbrarme a tus agradecimientos.
Reí fuertemente.
-¿De qué hablan? -preguntó Melissa, agarrando una galleta de las que tenía Andrew.
-No es nada -dije y miré al techo-. ¿Y? ¿Cuánto tiempo llevo aquí?
-1 mes -dijo Andrew.
-¿¡Qué!? -di un enorme brinco en la cama, levantándome.
-¡O...oye, no te levantes! -gritó Andrew, preocupado.
-¿Cómo de que no? ¡Llevo 1 maldito mes aquí dormido! ¿Y mi familia?
Abrí la puerta, topándome con Lixion.
-¡Voy a...!
Pum pum.
Miré hacia arriba, donde estaban los ojos de Lixion.
-¿Vas a qué? -preguntó él.
-N...nada, solo...iba al baño -sonreí nerviosamente, dejándolo pasar a la habitación.
Y entonces le susurré a Melissa y Andrew:
-¿Que no estaba gravemente herido?
-Ya pasó 1 mes, ¿qué esperabas? -susurró Melissa.
Rodeé los ojos.
-El baño está allá -señaló una puerta detrás de mí.
-Ah, gracias.
Y fui hacia allá.
Cerré la puerta y le dije a Byux:
-¿Por qué...me siento de esta forma? ¿Qué sucede?
-Tranquilo, es normal. Apenas despiertas y no sabes nada -dijo Byux.
-¿Y no me lo contarás? -me miré al espejo, viendo cómo Byux, en forma de niño, se asomaba por detrás de mi hombro.
-¿Qué quieres que te diga? Es simple: Lixion y yo te salvamos, pero te desmayaste de camino aquí y hasta ahora despiertas.
Se alejó de mí para caminar de un lado a otro por toda la habitación.
-¿Cómo es que puedes hacer eso?
-¿Uh? ¿Esto? -se señaló-. Ya te había mostrado esta forma.
Rodeé los ojos.
-Como sea...-abrí la llave del lavabo y me mojé el rostro.
Y cuando volví a mirar al espejo, Byux estaba de nuevo a mi lado, lo cual me asustó.
-Dios, no hagas eso -dije, molesto.
Él rio fuertemente.
-Me siento más en confianza contigo para hacer bromas.
-Aun así, no lo hagas. Odio las bromas.
Súbitamente, Melissa tocó la puerta.
-¿Daniel? ¿Estás bien?
-Ah, s...sí, ¿por?
-La comida ya está lista. Toda la familia estará presente y quieren verte.
-Está bien, pero me daré una ducha primero.
-Bien, pero apresúrate.
Y se fue.
-¿Una ducha?
-¿Qué hay de malo con ello? -me quité parte de la ropa y me metí a la regadera-. Estar fresco después de una larga siesta es lo mejor.
Byux no dijo nada y se puso a mi lado.
-¿Podrías mirar hacia otro lado? Estoy tratando de quitarme completamente la ropa.
-¿Qué tiene de malo? Ya he visto tu cuerpo desnudo miles de veces.
-¿Q...?
-Vivo dentro de tí, tonto -rio.
-Sí...-lancé mis boxers al piso y abrí la llave.
Byux entró a la regadera después.
-¿También te vas a bañar? -sonreí.
-Ajá.
-Oye -dije, viendo a Byux, quien estaba al lado del shampoo.
-¿Qué pasa?
-¿Ahora sí puedes pasarme el shampoo?

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Había un traje de negro encima de la cama con una nota:

The Legend Of The Spirit Wolf.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora