Reencuentro y ¿?

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Especial Feliz Año Nuevo (5/5)

Capítulo dedicado a: Armando415416 porque quiero y porque puedo

-Jeon en serio, no te molestaría si no lo necesitara- suplicó por enésima vez

-¿Por qué eres tan inoportuno rubio?, pídeselo a alguien más-

-Sabes que nuestros compañeros son demasiado idiotas, él único responsable que me cae bien eres tú- mientras me hablaba zarandeaba mi brazo de un lado a otro buscando convencerme

-Yo no te mandé a faltar a clases-

-Estaba enfermo genio, además qué te cuesta? llegas me das tus apuntes y yo me desaparezco más rápido que el rayo McQueen-

-Te detesto- dije finalmente aceptando

-Yo más-

Con la batalla perdida caminé apresuradamente para llegar a casa, sabía que Tae estaría esperándome y moría de ansias por verlo.

Al llegar ingresé la contraseña y me adentré a mi hogar, pude divisar a mi amor de pie en la sala, sus brazos estaban abiertos y me sonreía, aunque su sonrisa claramente desapareció al notar a Hyoshin a mis espaldas, la presencia de mi rubio amigo no impidió que corriera a sus brazos y que lo besara como hace mucho quería hacer.

-Te extrañé tanto mi amor- dije aferrándome a su torso

-Y yo a ti mi vida- su abrazo se hizo más fuerte en mi cintura y me permití embriagarme un poco de su delicioso perfume.

Un carraspeo ya conocido para mis oídos me hizo girar.

-Muy romántico para mi gusto Jeon-

-Tú te callas rubio, voy por mis apuntes- dirigiéndome a Tae le di un último beso -Ahorita vuelvo contigo amor-

Ya en mi habitación tiré mi mochila en algún lugar, busqué el cuaderno que necesitaba y volví corriendo a donde mi novio y mi amigo esperaban.

-Aquí tienes, ahora puedes irte-

-Eres un grosero Jeon, no piensas presentarme?-

-No eres digno, adiós- entre risas y empujones logré sacarlo de mi departamento.

Dejé salir un suspiro y con una sonrisa más grande que la del gato Ceshire de Alicia en el país de las maravillas, volteé en dirección a mi novio, corrí a su encuentro y logré tumbarlo sobre el sofá.

Me subí sobre él y comencé a besarlo como tanto había anhelado, no habían segundas intenciones, solo eran besos demostrando la mucha falta que me había hecho.

Luego de unos cuantos besos, abrazos, palabras bonitas y sonrisas furtivas; el rugido de mi estómago nos interrumpió, Taetae tomó mi mano y me pidió cerrar los ojos porque me tenía una sorpresa.

Él logra hacerme sentir como un tonto enamorado, mis emociones siempre están a flor de piel y cada célula de mi cuerpo grita a viva voz lo mucho que ama a ese peligris.

-No abras tus ojos deja que yo te guíe-

Hice tal cual me dijo y caminé lentamente siendo direccionado por él.

-Siéntate aquí- me tomó de los hombros y me ubicó en un asiento -ahora puedes abrir los ojos-

Así lo hice y me encontré con una bella vista, había un ramo de hermosos lirios sobre la mesa, me acerqué a olerlos y quedé fascinado con tan exquisita esencia, mis ojos no ignoraron la presencia de mi comida favorita y de una botella de vino, al ver tan apetitosa imagen mi estómago volvió a rugir a lo que pude oír la risa de Tae.

Aunque no te des cuentaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora