𝖝𝖛. 𝖑𝖆𝖘 𝖕𝖆𝖗𝖊𝖉𝖊𝖘 𝖛𝖎𝖔𝖑𝖊𝖙𝖆𝖘

102 7 0
                                        

Tía, ¿cómo vas? 

Gina, 09:10. 17/12/2020. 

Deshecha. 

Ni siquiera me siento capaz de mentir, ni de prestar atención.  

Marlena, 09:10. 17/12/2020.

¿Estás en clase?

Gina, 09:11. 17/12/2020. 

¿Dónde si no, un jueves a las nueve de la mañana?

Lo estoy, pero preferiría no estarlo. 

Ni aquí, ni en ningún otro sitio. 

Quiero menguar, hacerme pequeñita y, con un poco de suerte, desaparecer. 

Mi abuela se está muriendo, Gina. 

¿Cómo voy a estar, a ser, a existir después de esto? 

Nunca pensé que habría vida después de su muerte. 

Está a punto de pasar y, a pesar de la hospitalidad de Carmen, tú, mis amigas de la universidad, no me siento más acompañada. Estoy terriblemente sola. 

Marlena, 09:36. 17/12/2020. 

Creo que puedo entenderlo. 

Aunque, reconozco, me cuesta, porque yo nunca tuve tan buena relación con ninguna de mis abuelas como tú con la tuya. 

Vosotras dos érais todo un caso, el veros juntas. 

Pero tú nunca, nunca vas a estar sola. 

Estamos todas aquí, inclusive Ethan. 

Gina, 09:46. 17/12/2020. 

Nunca se está lista para ver partir a quien se ama.

Y saca a Ethan de este esquema tan bizarro, por favor.  

Marlena, 09:47, 17/12/2020.

No me digas que os habéis peleado. 

Gina, 09:48. 17/12/2020. 

Apenas he podido hablar con él estos días, Gina. 

Tengo conversaciones tan absurdas, nimias y ridículas con él que me cuesta creer que sea la misma persona que me estrechó hasta que dejé de llorar, aquel lejano sábado de hace dos semanas. Empiezo a creer que ni siquiera le caigo bien, tía. 

Marlena, 10:00. 17/12/2020. 

Yo creo que te equivocas.

Gina, 10:01. 17/12/2020. 

A cada día que pasa, estoy más furiosa. 

Ni siquiera me llama por teléfono o inicia una puñetera conversación por el WhatsApp si yo no le he dicho nada antes. 

Es desesperante, Gina. 

No ha pasado un día, ni uno sólo sin que yo le haya dado los buenos días, las buenas noches o le haya dejado algún mensajito a mitad del día, como la estúpida que soy, para desearle que su día vaya, como mínimo, decente. 

phone numberDonde viven las historias. Descúbrelo ahora