Nuestro encuentro

Capitulo 56: la nueva reina (final)

En la villa...

Débora: así que nuestra amiga será la próxima reina de Egipto

Nadab: ya era de esperarse, era obvio que iba a caer en los encantos de Ramsés

Inés: alguien aquí está celoso

Nadab: ¿Y como no estarlo? Ustedes bien saben los sentimientos que tengo hacia ella

Débora: temo que nuestra amiga se olvide de nosotros

Inés: tenemos el mismo miedo

Nadab: lo bueno es que ahora seremos librea

Inés: pero el resto del pueblo no

Débora: mi familia y yo no aceptamos, hay miles de personas sufriendo para que nosotros nos quedemos de brazos cruzados sin hacer nada mientras otros nos ven con ojos de envidia y odio

Inés: no lo había pensado. Mi suegra tampoco quería aceptar esa oferta, sabía que traería graves problemas con el resto del pueblo. Pero Aaron insistió que finalmente lo aceptamos.

Nadab: Sara está muy ciega

Débora: lo que más me preocupa es que se convierta en una persona mala y frívola

Inés: el poder puede llenarte la cabeza al punto de convertirte en una persona que jamás hubieses imaginado ser, si es que no la controlas

Débora: espero que ella no sea una de ellas

Nadab: solo eso nos faltaría, que Sara nos termine odiando como toda reina arrogante y soberbia

Inés: ella no haria eso

Débora: ojalá nuestra amiga sepa marcar la diferencia llevando al pueblo egipcio a la prosperidad sin un esclavo atrás de todo eso

Nadab: que así sea

Días después, 1 día antes de la boda...

Sara: hoy es un dia estupendo para salir a tomar un baño ¿No lo crees Alira?

Alira: estoy de acuerdo con usted señora

Sara: ay no me digas así Alira, aún no me acostumbro a eso, por ahora puedes llamarme por mi nombre sin formalidades

Alira asiente y dice: ya tengo el vestido preparado para su cita con el rey

Sara; bien, déjalo ahí ( señala con su dedo) ya hiciste mucho por hoy, sabes que no quiero que quedes atareada, puedo hacer las cosas por mi misma

Alira: señora, digo, Sara, sabes que para mí es un honor servir a la futura reina de Egipto, no hay nada que me de mas alegria que eso

Sara sonríe, toma su mano y dice: lo sé, y agradezco tu disposición pero tú sabes bien que no estoy acostumbrada a ello, siempre hice las cosas por mi misma, siempre fui de servir a los demás y eso tú lo sabes bien. Aún no me adaptó a la idea de ser la futura reina de Egipto. Pero estoy haciendo todo lo posible para asimilar la situación

Alira: le tendré más paciencia señora, es decir,  Sara

Sara: bien, acompáñame al jardín, quiero mojarme un poco

En el jardín...

Sara: ¿No te meterás Alira?

Alira: no Sara, yo me quedaré aquí cuidandola

Sara: como tú quieras, toma esto ( le da su vestido)

Sara se sumerge hacia la piscina y dice: ay Alira está hermosa el agua, ven ¿Porque no entras?