CAPÍTULO XXV

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Pov General:

Habían pasado un par de semanas, Callie seguía con su terapia que al parecer mostraba resultados, cosa contraria con su divorcio. Arizona no cedía y ella no quería llegar a un juicio. Sin embargo seguía enfocada en su hija y en su nueva casa, aunque ella quería un departamento Sofia la había convencido de que sería mejor una casa. Por otro lado su relación con Addison había sido algo distante por su parte. Aunque la pelirroja insistía en ayudarla y acompañarla, Callie solo respondía "no gracias" cosa que no era nada agradable para Addison y que tampoco lograba comprender el porque de su comportamiento. Mark se moría por hablar con ella pero sabía que le había prometido a su mejor amiga no decir nada. Y no podía fallarle, no ahora que ella lo necesitaba.

Pov Callie:

Salia de mi nueva casa y recordé que necesitaba unos folders que había dejado semanas atrás en casa de Addison. No quería ir hasta allá, no después de tratar de evitarla tanto pero debía hacerlo. Me subí a mi camioneta y tome camino hacia su casa. Minutos después estaba ahí, no quería siquiera  bajarme. Acomode mi cabello... ¿acomode mi cabello? ¿Para qué?.
Cuando fui a golpear un hombre abrio la puerta y Addison estaba detrás. Nunca lo había visto.

-Am hola... -intente sonar lo mas natural posible.

-Hola... -sonrió.

-Callie que milagro. -sonrió.

-Siento molestarte, es que el otro día deje aquí unos folders y los necesito. ¿Los viste?

-Claro. De hecho los llevaba aquí en mi bolso, ten.

-Gracias, te veo en...

-Espera... te presento a Jon, es un amigo de Los Angeles. Y Jon ella es Callie Torres, mi amiga.

"Mi amiga"

-Mucho gusto. -ofrecí mi mano, en mis terapias había comenzado a perder el temor al contacto.

-Mucho gusto. A decir verdad somos muy buenos amigos. -guiño su ojo y yo entendí eso, Addison me miro seriamente.

-Bueno los dejo. Adiós.

Guarde mis folders y camine hacia mi camioneta. Había sido una idiota, debí llamarla antes de ir. ¿Por qué sentía celos? Me había dolido que Addison me dejara de lado por lo que me paso, no la juzgaba pero eso no evitaba que mi autoestima estuviera por el suelo, porque si ella siendo mujer no logro entenderlo menos lo haría un hombre. En fin, debía llegar al hospital para poder irme temprano, todavía quedaban cosas por acomodar en mi nueva casa. Eso ayudaba a tener mi mente ocupada, con tantas cosas y yo queriendo fastidiar con "amorios".

Llegue al hospital y camine hacia mi oficina. Deje mis cosas y fui hasta la pizarra. Revise mi cirugía y estaba en 20 minutos. Decidí ir a cambiarme. El hospital parecía estar solo. No había visto a nada más que a una o dos enfermeras. Cuando estaba por ingresar a quirofanos oí la voz de Mark hablando con Lexie. Sonreí, quería saludarlo pero me detuve cuando lo oí más de cerca...

-Estoy cansado... no se si pueda seguir soportandola.

-Tranquilo cariño. Es cuestión de tiempo, ella se dará cuenta.

-No quiero seguir en esto, debería darse cuenta. ¿Cuanto tiempo paso y aún no lo supera? Me tiene harto y no se hasta cuando podre seguir quedándome callado.

¿A caso Mark hablaba de mi? Sentí como si me hubieran clavado un puñal en el corazón, yo sabía que esto tarde o temprano iba a pasar. Pero oírlo de él hizo que me doliera más. Maldito momento para querer llorar, comenzaba a faltarme el aire y el corazón amenazaba con salirse de mi pecho, no podía entrar así. Gire y me encamine hacia la sala de suministros.

CAER EN LA TENTACIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora