Capítulo 8

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Los domingos eran para Yoongi, desde hacía mucho tiempo, el peor día de la semana.

Cuando aún vivía en Daegu, los domingos eran su día familiar. Siempre iban a comer a casa de sus padres o de Hoseok, e incluso cuando ya vivía en Seúl, a veces su chico lo visitaba y paseaban juntos por algún lugar bonito.

Después de la ruptura, Namjoon y Jin trataron de mantener la tradición, pero poco a poco todo se fue, como siempre, desmoronando.

Se giró en su cama y cogió el teléfono de la mesita de noche, borró todas las notificaciones sin mirarlas y se fijó en la hora: eran casi las doce de la tarde y no tenía ningunas ganas de levantarse de la cama.

Así que soltó de nuevo el teléfono y volvió a girarse, con suerte Jin se habría ido a pasar el día con Taehyung y no lo despertaría.

Pero no era así.

- ¡Yoongi! - escuchó a su hyung decir tras la puerta mientras la golpeaba con suavidad.

- ¿Qué quieres? - le preguntó, y al instante escuchó la puerta abrirse.

- ¿Estás dormido? - el pelimenta sonrió bajo las sábanas y abrió los ojos para mirar a su amigo.

- ¿Cómo podría estar dormido si te he respondido? - Jin soltó una carcajada y se encogió de hombros. - ¿Qué querías?

- Vístete, nos vamos. - una mueca de desagrado y sorpresa surgió en la cara de Yoongi.

- ¿Cómo que nos vamos?

- Tú, Namjoon y yo. - el pelimenta se quedó callado, esa información lo confundía aún más.

- ¿A dónde? Y sobre todo, ¿por qué? - el mayor rodó los ojos y se sentó a su lado.

- De excursión.

- ¿De excursión? - Jin asintió con la cabeza, cansado de sus preguntas.

- Nam y yo pensamos que es buena idea que te entretengas y pasemos tiempo los tres juntos como solíamos hacer y...

- ¿Soy vuestro puto hijo ahora? - le preguntó con un tono de diversión, pero con cierta molestia.

- Si te hace ilusión verlo así... - respondió el mayor, levantándose de la cama. - Vístete, Nam llegará en media hora.

- ¿Estáis divorciados papá y tú? - le preguntó el pelimenta, fingiendo la voz de un niño pequeño, lo que provocó una risa molesta en su amigo.

- Déjate de tonterías, Yoon.

- Tengo que confesarte algo... - continuó diciendo con la misma vocecita. - Papá te es infiel, ¡con una chica!

La risa de Jin cesó y en su lugar apareció una media sonrisa a su parecer, algo macabra.

- Vístete, anda. - le volvió a repetir justo antes de dejarlo solo en la habitación.

Yoongi se quedó en silencio, observando la puerta por la que su amigo se había esfumado, y frunció el ceño.

- ¿Qué ha sido eso?

...

- ¿A montar en bicicleta? ¡Esto debe ser una jodida broma! - protestó el pelimenta al bajar del coche y ver donde sus amigos lo habían llevado

- Oh, venga ya... - le respondió Namjoon pasando el brazo por su hombro. - Lo pasaremos bien pedaleando, el paisaje es bonito y al final del sendero hay un sitio con mesas donde comer.

- ¿Y qué se supone que vamos a comer? - preguntó, aún molesto. Pero Jin, al oírlo, levantó su mochila rápidamente.

- He cocinado algunas cosas antes de despertarte. - le explicó con una sonrisa.

Vaivén [SOPE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora