𝕄𝕚 𝕡𝕖𝕝𝕚𝕣𝕣𝕠𝕛𝕠 - 𝔽𝕣𝕖𝕕 𝕎𝕖𝕒𝕤𝕝𝕖𝕪

Cap 58

-¿Entonces esto es un...?- le dije a Fred con lágrimas en los ojos - ¿Terminamos?

Me desperté en el sofá de la sala común. No recuerdo haber llegado ahí anoche.

-Al fin despiertas - dijo una voz. Draco - Te encontré dormida en uno de los pasillos, supuse que te había pasado algo y te traje aquí.

-Gracias, Draco

Talle mis ojos mientras mi vista se terminaba de enfocar del todo; aún estaba en shock con lo que había "soñado". ¿Yo terminaba con Fred? Un montón de preguntas invadieron mi cabeza en cuestión de segundos, pero se disiparon todas cuando Draco chasqueó los dedos en frente mía.

-Eh, te estoy hablando - dijo -

-Si, perdón, ya te escucho

-Digo que que te pasó ayer - me preguntó -

-Eh... Discutí con Fred porque... quiere que le cuente quien me hizo esto - señalé mi cara - Pero por más que le digo que no puedo decírselo, el solo insiste.

-No te preocupes, pequeña - dijo el rubio acariciando mi mejilla delicadamente - No tienes que contarlo si no quieres

-Ya, la cosa es... que si quiero contarlo - solté rápidamente, captando toda la atención del Malfoy - Pero no a él

-Entonces dilo - Draco se sentó en el sillón en frente mía, haciendo un profundo contacto visual -

-Fue Carolina Stinkwood - solté rápidamente. Draco abrió los ojos como platos, muy sorprendido -

-¿La hija de Albert Stinkwood? - cuestionó -

Albert Stinkwood es un muy conocido funcionario en el ministerio, o era hasta que mi padre lo mató.

-Entonces... ¿la chica callada de Ravenclaw fue la que te ha hecho esto? - preguntó Draco. Yo asentí y el rubio apretó los puños con todas sus fuerzas - ¿Y porque me lo dices a mi y no a tu novio?

-Porque tú me puedes ayudar sin cuestionarme ni juzgarme, y él no - le explique calmada -

-¿Ayudarte a que?

-A vengarme

Draco frunció el ceño, pero no dijo nada. Sonreí al saber que él no cuestionaría, dudaría o me juzgaría por esto; de hecho, él también tenía pensado vengarse de la persona que me hizo esto en cuanto supiese quien es.

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Ande apresuradamente hacia la sala común de Gryffindor, y corrí cuando vi que alguien se iba a adentrar a ella.

-¡Neville! - grité, y al instante el Gryffindor se paró - Déjame entrar, por favor

-T/N... me podrían castigar - me dijo avergonzado -

-No se va a enterar nadie, te lo juro - El me miró dubitativo, pero asintió - Si! Gracias, Neville, te debo una

Corrí dentro del cuadro de la dama gorda y frené cuando vi a Fred y a George sentados en uno de los sillones de su sala común, hablando animadamente. George se levantó a saludarme al verme, y después de pedirle que me dejara hablar con Fred a solas ( porque no había nadie más en la sala común ) salió de ahí sin rechistar.

-Hola - musité casi inaudible -

-¿Que quieres? - preguntó secamente -

Lentamente me senté su lado, y como él no se movió ni dijo nada, empecé a hablar:

-Quería... quería disculparme - dije, jugando con nerviosismo con mis manos - Estoy... un poco alterada, bueno, demasiado alterada con todo lo que me ha pasado estos días, y... como no me siento preparada para decir el nombre de quien me hizo esto, te conteste mal... Lo siento muchísimo