La mujer empezó a hablar, pero yo sinceramente no estaba escuchándola, estaba pensando en la pulsera que me había regalado mi padre. Mi padre debería estar en la cárcel, y de repente aparece en el sótano de Honeydukes para verme. Me da una pulsera y de repente una voz aparece en mi cabeza, diciendome lo que tengo que hacer.
-¿Que significa eso? - preguntó Harry, mirándome a mí atentamente -
-¿Eh? - dije desconcertada, y luego, después de darme cuenta de la situación, me giré hacia Hermione - Eso, Mione, ¿que significa eso?
-Significa que el ministerio está interfiriendo en Hogwarts - dijo ella, después de suspirar -
A la hora de dormir, me dirigí a la sala común de Gryffindor junto con Harry, pues era una tradición que el primer día de curso yo me quedara a dormir a su sala común. En la sala había un montón de voces, pero en cuanto pasamos por ahí, todo el mundo se quedó mirándonos y en silencio. Yo fruncí el ceño cuando vi que ni Fred, ni George ni Ginny se habían acercado a saludar.
-¿Dean? ¿Seamos? - les saludo Harry - Que tal las vacaciones?
-Muy bien - contesto Dean seco - Mejores que las de Seamos, desde luego.
De la nada, Seamos se levantó de su sitio, dejando el periódico en la mesa de un golpe, y se puso en frente nuestra amenazante.
-Mi madre no quería que volviera este curso - dijo de repente -
-¿Porque no? - le pregunto Harry -
-Dejame pensar, eh... Por vosotros - nos acusó - El profeta ha publicado muchas cosas sobre vosotros, y sobre tu padre, T/N. Y de Dumbledore también.
-¿Y tu madre se lo cree? - preguntó Harry -
-Bueno, nadie más estuvo allí la noche que murió Cedric - dijo -
Ese fue mi colmo. Empuje a Harry hacia atrás por el pecho con mi mano y me acerque a Seamos andando firme y sería todo lo posible para intimidarlo. Cuando él se echó unos pasos atrás, entonces grite:
-Lee también el profeta como tú estúpida madre y luego cuando lo sepas todo hablas - le dije enfadada a más no poder -
-¡No te atrevas a hablar así de mi madre! - me gritó ahora el -
-¡No vuelvas a nombrar a Cedric! - contrataaque -
-Me meteré con cualquiera que nos llame mentirosos - dijo ahora Harry -
-¿Que pasa? - dijo Ron entrando -
-¡Que están como una cabra! ¡Eso es lo que pasa! ¿Además que hace una serpiente en la casa de los leones? - preguntó enfadado -
-¿Y que hace un cobarde como tú en la casa de los valientes? - le pregunté -
Fred se levantó de su sitio donde había estado viéndolo todo y se acercó a mí, dispuesto a decir algo, pero en cuanto estuvo cerca mía, le aparte poniendo un brazo entre nosotros, haciendo que se volviera a sentar confundido y algo serio.
-¿Tu te crees toda esa basura que cuentan sobre quién tú sabes, Ron? - le volvió a preguntar Seamos -
-Si, me la creo - dijo Ron serio. Luego miro a toda la gente de la sala común - ¿Alguien más tiene problemas con Harry o con T/N?
Como todos se quedaron callados, Harry, Ron y yo subimos las escaleras, y yo, sin decir nada, me adentre en la habitación de Hermione sin siquiera despedirme.
Al día siguiente me desperté y vi a Hermione eligiendo sus libros para el día de hoy.
-Buenos días, T/N - me dijo con una sonrisa mi amiga -
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𝕄𝕚 𝕡𝕖𝕝𝕚𝕣𝕣𝕠𝕛𝕠 - 𝔽𝕣𝕖𝕕 𝕎𝕖𝕒𝕤𝕝𝕖𝕪
Romance-M-Me perdonas?... -pregunté con vergüenza evitando su mirada- Él se rió tiernamente y sé acercó a mi besándome cortamente en los labios. -Creo que ya sabes la respuesta -respondió con una sonrisa, esa que me causaba tanto en tan poco La historia d...