Breathing the nightsky all alone
On through the darksome desert I roam
Last of the hidden steps of life –
Trembling I cross it – what will I find...?"Estorbos inútiles", fue lo primero que pensó Hua Cheng al ver a Ojo del Cielo y sus compinches en la capital. Esos bastardos idiotas no hacían nada más que hacerles perder el tiempo a él y Su Alteza, y en este momento lo que menos tenían era tiempo.
La capital imperial estaba rodeada por el aura de los templos emplazados en la ciudad creando una barrera protectora natural que impedía el paso de los espíritus resentidos de WuYong, pero eso no sería suficiente, por lo que el dios y el rey fantasma pensaron en una forma de reforzar la protección natural.
— San Lang, tengo una idea para reforzar la barrera— dijo Su Alteza—. Pero... necesito gente.
— ¿Cuántos?— preguntó Hua Cheng.
— Muchos. Al menos 500.
— ¿Vivos o muertos?
— Vivos. Necesito tomar prestada su aura yang para para ahuyentar a esos espíritus.
Lo cual quería decir que también necesitaban que fueran voluntarios. Ambos recorrieron la ciudad en busca de voluntarios pero solo se encontraron con esos cultivadores idiotas que no hacían más que ponerles trabas en su objetivo.
Como si no hubieran visto de lo que soy capaz. Idiotas
— Gege, deja de malgastar tu aliento con ellos— dijo Hua Cheng—. Vamos.
El príncipe asintió y se retiraron para seguir buscando. Hua Cheng notó que el grupo los seguía tratando de no ser notados y rió para sus adentros mientras seguía a Su Alteza. En ese momento se le ocurrió un sitio para buscar.
— ¿Por qué no vamos a los barrios bajos?— sugirió—. Debería haber muchos audaces que no temen a la muerte, nuestra búsqueda podría ser más fructífera allí.
Después de todo, la mayoría de los soldados de Xian Le que había conocido antes de ser echado fuera eran otros vagabundos que había visto y que entraron al ejército en un afán de luchar libremente sin importarles morir. Con eso en mente, ambos se dirigieron a los barrios bajos, entrando a un templo donde un numeroso grupo de vagabundos dormía. Hua Cheng lamentó por un momento el tener que interrumpir su sueño, aún recordaba lo difícil que le había sido encontrar un buen sitio para dormir; pero ese lamento duró solo un momento, había cosas de las cuales ocuparse.
— ¿Pueden todos echarme una mano?— gritó Su Alteza.
— ¡Pídele a tu madre una mano!— gritó alguien—. ¡Vamos a dormir, sal de aquí!
— Es algo muy urgente.
Como esperaba, el grupo de vagabundos no paró de quejarse hasta que uno de ellos gritó haciéndose oír entre las constantes quejas y maldiciones:
— ¡Todos, escúchenme! ¡Dejen de hacer ruido! ¡Escuchemos lo que tiene que decir primero!
Hua Cheng prestó especial atención a este vagabundo. Su aspecto no podía notarse claramente, pero había algo en él que le era extrañamente familiar, y no le quitó la vista de encima mientras Su Alteza explicaba lo que necesitaban hacer. El rey fantasma no se sorprendió cuando, una a una, las personas en el interior del templo se negaron a participar, lo cual bien analizado era bastante comprensible: la capital real no hacía nada por esta gente, ¿por qué ellos tendrían que hacer algo por la capital? ¡Y sin compensación! Si iba a pasar algo tan grave como una epidemia simplemente podían levantarse y largarse lo más lejos de allí a buscar otros lugares donde vivir.
![](https://img.wattpad.com/cover/282317981-288-k539782.jpg)
ESTÁS LEYENDO
La lluvia que alcanzó a la flor
FanficDespués de 800 años, la reunión que Hua Cheng había estado esperando se llevó a cabo por fin. De la mano de Su Alteza comenzará a descubrir los secretos ocultos por los dioses, conociendo el origen de la maldición que lo condenó a una vida desgracia...