–¡Dios! Esto es más incómodo de lo que creí-se quejó Rosé desaciéndose de sus tacones lanzándolos a una esquina de la sala e intentando llegar al cierra del vestido sin ningún éxito–¿Me ayudas?-le preguntó a Lisa con un puchero mirando hacia atrás para conectar sus ojos con los de su chica, esta asintió y se acercó bajando el zipper con cuidado luego de acomodarle el cabello a un costado. La castaña deslizó las pequeñas mangas por sus brazos provocando que las prendas cayeran a sus pies dejándola solo en una diminuta braga rosa con corazones, se giró para encarar a la ojimarrón dejando ante su vista lo que para la otra era un cuerpo perfecto «aunque está muy lejos de serlo», rodeó el cuello de la más alta con sus brazos apretando sus pechos contra los de su contraria–Hazme el amor Lisa, no puedo soportar reprimir lo que siento por más tiempo-musitó cerca de sus labios tentándola a romper sus barreras, nadie llegaría a la casa hasta pasada la media noche y eran a penas las seis de la tarde, había suficiente tiempo ¿no? La tailandesa levantó a la menor sacándola por completo del atuendo en el suelo y haciendo que enredara las piernas en su cintura.
–Te haré el amor hasta que con solo mirarnos el mundo sepa que nos pertenecemos, hasta que el amor salga de nuestros ojos inundando la Tierra-capturó sus labios de forma desesperada comenzando a caminar hasta la habitación y dejándola suavemente sobre el colchón, se pisicionó sobre ella entre sus piernas recargando parte de su peso en sus brazos para no aplastarla, bajó los besos a su cuello y la avertura entre sus senos enviando descargas eléctricas a su centro «se podría decir que la pequeña Park es bastante sencible en esas zonas», delineó su abdomen con la lengua y dedos haciéndolo contraerse bajo su toque.
–Detente y date la vuelta-demandó Rosé entre jadeos, la pelinegra obedeció quedando de espaldas a ella, su amante bajó el cierre de su vestido de época rozando la punta de su dedo con la piel que iba quedando desnuda, descubrió sus hobros dejando besos húmedos en cada uno de ellos, intentó bajar más la tela pidiéndole silenciosamente que se desiciera de esta, la mayor de las Manoban levantó su trasero sacando por completo la prenda y regresando a la misma posición de antes sintió las cálidas manos de su amante jugar con el broche de su sujetador para quitarlo luego dejando besos ahí también, fue subiendo a lo largo de su columna vertebral hasta llegar a la nuca y desviarse hasta su cuello proporcionándole suaves succiones y mordidas arrancándole gemido tras gemido a la pelinegra.
–Rosie-gimió Lisa girando y volviéndo a poner a su chica contra la cama–Déjame a mi-pidió con una sonrisa recibiendo una apenada de regreso–quiero complacerte-besó y acarició sus pechos acelerándole aún más la respiración–hacerte explotar de placer-ronroneó bajando sus labios hasta el vientre de la castaña después de haber terminado con sus rehenes anteriores. Los gemidos comenzaron a escaparse de la boca de la pequeña de forma involuntaria por más que intentó reprimirlos, incluso tapó su boca para no ser escuchada–No hagas eso-pidió la mayor retirando la mano que cubría la mitad de su cara y dejando un beso en el dorso de esta–quiero escucharte, no me prives de saber lo que en ti provoco-habló subiendo y besando sus labios para luego volver a su labor en la parte inferior del cuerpo de la chica bajo ella, le sacó la ropa interior comenzando otra vez el recorrido pero esta vez por sus piernas, terminando con una y pasando a la otra, deleitándose con los sonidos obcenos provenientes de su sobrina, su lengua delineó sus pliegues al llegar a su centro, estaba muy húmeda y lista para recibirla, gritaba a los cuatro vientos la necesidad de sentir a su novia y se lo hizo saber cuando empujó la cabeza de la mayor contra su intimidad, pero no fue suficiente pues empezó a mover sus caderas al compás de la boca de su compañera hasta que explotó de placer extaciando a Lisa con su sabor, provocando que llegara al climax también. Subió y se colocó en la primera posición en la que estuvieron devorando sus labios y haciéndola probarse a si misma, su mano se dirigió a su sexo acariciándolo con una suavidad casi tortuosa.
–¡Lisa, Dios, hazlo ya!-exigió en un fuerte gemido por los dedos intrusos en su interior, bombeaban fuerte causándole estremecimiento en cada uno de sus músculos, su abdómen volvió a contraerse anunciando el final pero con su mano derecha logró detener la de la tailandesa, quien la miró sorprendida y con curiosidad, invirtió las posiciones quedando ahora ella arriba–Quiero que lleguemos juntas-contó comenzando a moverse rozando sus intimidades dejando olvidado cualquier indicio de una discusión, los gemidos volvieron a llenar la habitación, las manos de la pelinegra se aferraron a las caderas de la adolescente marcando un ritmo de puro frenesí, las gotas de sudor corrían entre los pechos de Rosé dándole una imagen erótica inigualable ante los ojos de su tía, sus uñas razgaron la fina piel del abdomen su chica haciéndola jadear y mover a su novia con más rapidez aún, fue cuestión de un par de minutos para que explotaran por completo, el éxtasis se extendió por sus cuerpos dejándolas agotadas. La pequeña Rosie cayó sobre el pecho de la ojimarrón refugiándose entre sus brazos.
–¿Estás muy cansada princesa?-inquirió cuando la vio cerrar sus ojos, esta asintió con pereza acomodándose un poco más «¿puede alguien ser tan cómodo?» se preguntaba escondiendo el rostro en la curvatura de su cuello–Entonces duerme cariño, hoy fue un día muy agotador-besó su frente empezando a trazar pequeños círculos en su espalda baja.
–¿Y si alguien entra?-preguntó somnolienta sin intenciones realmente de renunciar a su descanso.
–Cerré la puerta de la habitación con seguro, nadie entrará-se estiró a su lado izquierdo coguiendo una sábana y tapándolas a ambas–así que duerme mi amor-la castaña se entregó a los brazos de Morfeo siéndo seguida por la tailandesa unos minutos después.
Holis🙋.
Bueno aún no soy buena escribiendo lemon, aunque el primero me salió peor, al menos esta vez no me sonrojé o reí escribiéndolo. Solo quería pedir su opinión sobre el capítulo y la historia en general, me ayudaría mucho. Los amo😍😘.Byebye🙋.
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Entre sombras y sombras me faltas tú (Chaelisa)
RomanceLa vida es muy incierta, sobre todo en el amor. Nunca sabremos con exactitud cómo, cuándo o dónde encontraremos a la persona que estará junto a nosotros hasta la eternidad, como tampoco sabemos su edad, aspecto físico, si es hombre o mujer, y mucho...