-Introducción-

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El quería proteger a toda su familia, quería proteger a sus amigos de infancia, quería proteger a sus compañeros de otros gremios pero en especial, a quien quería proteger más, era a ella.

Su primera prioridad era ella, siempre lo sería. Ese era el gran impacto que causo Lucy en él.

Pero para eso tuvo que escaparse sin siquiera avisarle donde estaría, tuvo que irse sin que ella se enterase y solo dejando una carta atrás, quizá como un confort de que en algún momento, regresaría a su hogar una vez que se hiciera más fuerte y pudiera proteger a todos. Quería que ella fuera con él, antes de marcharse, varias veces miro a sus espaldas con la opción de regresar a ella pero solo volvía a negarse aquello que tanto le pedía su corazón. Sabía que si lo hacia las cosas probablemente resultarían de otra manera y no podría concentrarse en entrenar, no podría si alguien más viera aquella debilidad que mostraba con sus lagrimas como con aquel temblor en su cuerpo cada vez que recuerda aquello.

Pensó que al dejarla los demás la cuidarían como todo ese tiempo han hecho desde que llego al gremio, le otorgarían aquel cariño de familia que a la chica le falto y no estaría enojada en el momento de su regreso pero nunca se imagino que el gremio se disolvería y todo terminara mal.

Nunca se llego a imaginar que ella estuviera sola en todo ese año que se fue a entrenar para poder protegerlos, para poder protegerla. Estuvo llorando sin siquiera tener un hombro en quien recargarse, sintiendo como su corazón se rompía porque ahora le tocaba caminar sola a lugares completamente desconocidos y entrenando para que nadie le vuelva a decir que es alguien débil, no lo era, para Natsu nunca lo fue.

Y ahora que regreso y descubrió aquella horrible realidad.

Entendió que tenía que hacer algo más por ella, la debía de cuidar y consentir más para hacerle olvidar aquel horrible momento, para hacerla entender que ahora que regreso, nunca más se iría de su lado, no solamente se lo juraría a ella, se lo juraría a su corazón.

Pero.

¿Realmente todo sería tan sencillo como se piensa?

Para su desgracia, fue cuando empezaron todos los problemas.

En su viaje de un año, él descubrió una terrible verdad, una mentira que todo ese tiempo se había mantenido oculta y que ahora la descubrió, entendió que debían proteger a Lucy de él.

¿Por qué estaba pensando de esa manera?

Al darse cuenta de la verdad de su origen, la verdad de su vida misma, no pudo tomar otra decisión más que ocultarlo tras aquellas vendas que cubrirían a la perfección su brazo derecho y rogando porque nadie más se enterase de ello.

-Aun no es el momento adecuado para decir la verdad -Murmuro.- Aun puedo mantenerlo oculto por un tiempo más

Porque en el momento que vio aquello, ya sabía lo que realmente era, pudo comprender todo, incluso el dolor de su pecho. Sabía cuál era su misión pero él no quería que todos aquellos a los que ama resulten heridos. Era lo que menos quería.

Decidió ocultar aquella dolorosa verdad y cuando llegara el momento, estaría listo para todo.

-Deberán destruirme antes de que pase algo peor

Porque él no quería lastimarlos, no quería volver a ver sangre en sus manos, no quería lastimar a su compañera de equipo, a su amada y preciada Lucy.

Ese había sido el verdadero motivo de Igneel pidiendo que lo destruyeran y que no pudiera cumplir porque lo amaba demasiado. En algún momento, todo tendría que terminar y tendría que ser eliminado para poder cumplir con la petición de su padre.

-Muy pronto nos volveremos a ver Zeref -Tocaba su brazo vendado.- Y esta vez te derrotare, no dejare inconclusa la misión que me asignaste hace años

Porque sabía que él era el demonio más fuerte que Zeref se encargo de crear, porque era lo que aquel mago oscuro una vez amo y que ahora, sería el mismo que se encargaría de destruirlo.

-E.N.D -Hablo con voz grave, mientras alzaba la vista y sus ojos se pintaban de color rojo.- Mejor dicho Etherious Natsu Dragneel

Él sabía lo que significaba esas siglas y el destino final que le seguiría, sabia muchas cosas que aun no quería mencionar y que preferiría mantener en secreto hasta que llegue aquel horrible momento. Quería olvidar el pasado y solo enfocarse en su presente como en el futuro que le dejara a todos.

Porque desde ahora en adelante pasarían tanto cosas buenas como cosas malas. Todas las decisiones que tomaría, serían las que decidirían el rumbo de esta historia.

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