Capítulo 20

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(Leer la nota al final.
Es importante)


Paige Kiptniz.

— Me estoy arrepintiendo de esto —admito.

— Creo que ya es muy tarde para eso, conejita —Andy camina detrás de mi con sus manos en mis hombros dirigiéndome al auto.

En dicho auto ya se encontraba Zoe en el asiento del conductor y Luna en el del copiloto, Estef se despedía de Marco con un tierno beso en los labios antes de subir al asiento trasero. Si, ¡ya habían formalizado! Estef daba saltitos al contarme y yo estaba muy feliz por ella. Marco, luego del fin de semana en la cabaña se le declaró y mi amiga estallaba de felicidad a pesar de que no se lo creía al principio.

En fin, Marnia era oficial. Si, no tengo mucha creatividad para eso de juntar nombres.

Cuando estoy frente a la puerta del auto, me giro para ver a Andy.

— ¿Y por qué no vienes con nosotras? —le pregunto frunciendo el ceño.

— Porque es día de chicas, no se permiten chicos —responde Zoe quien había escuchado mi pregunta.

— Exactamente —Andy sonrie—. Además yo iré con Marco para comprar nuestros trajes y asi será sorpresa cuando te vea en tu vestido. Anda —abre la puerta para mi—, sube y pásalo bien —acerca su rostro al mío para besar mis labios y luego de unos segundos se separa.

Le sonrió. Subo al auto y cierra la puerta. Se despide con su mano y Zoe arranca.

Ya había pasado un par de días desde el fin de semana, estábamos ya a nada de cerrar el ciclo escolar. Admito que este año dio un giro de sorpresa para mi, una sorpresa muy agradable de hecho.

A pesar de tanta cosa, terminaría la escuela y entraría a la universidad.

Estos días el profesor Turner se había acercado a mi para darme ciertos tips para que no se me complicará el estudio el próximo año, había sido de bastante ayuda, la verdad.

Ahora nos dirigimos rumbo al centro comercial a comprar mi dichoso vestido. Estef también compraría el suyo, sería una bonita experiencia. Luna estaba bastante ilusionada. Tal como dijo, pidió el día libre para poder venir también.

La graduación estaba ya a nada de llegar, con ello el baile, que por cierto, sería en un salón cerca del centro y como lo había dicho, ayude a Estef en la organización y decoración. Todo el comité quedó bastante satisfecho con el resultado.

Referente a la escuela, las cosas estaban tranquilas. Me sorprendió mucho que los rumores disminuyeron, al menos ya no pegaban hojas con insultos en mi casillero. Evitaba chocar con Trevor en algún pasillo, lo sucedido con él si me había dado algo de temor y mientras menos me lo cruzara mejor. Era muy seguro que Meghan estaría en el baile, no se lo perdería por nada y yo solo intentaría pasar una buena noche con mis amigos.

Zoe estaciona su auto en el estacionamiento del centro comercial y las cuatro bajamos. Estef se engancha al brazo de Luna para entrar al gran lugar, mi hermana de verdad estaba muy emocionada. Zoe a mi lado me hecha una ojeada.

— ¿Todo bien? —pregunta en voz baja para que las dos que van adelante no escuchen.

— Si, bueno... es extraño. Si me gusta la idea de venir a comprar el vestido para el baile de graduación y eso, pero tengo esa espinita de inquietud por el dinero.

Ya había convivido con Zoe y me daba tanta confianza que no me molestaba en mentir o excusarme.

— Intenta hacer eso a un lado, a tu hermana la acendieron de puesto y eso ayudará. Por un momento deja todas tus inquietudes aquí afuera del centro comercial y solo déjate llevar por las emociones de esta experiencia.

Al final de la noche Donde viven las historias. Descúbrelo ahora