49. 𝙻𝙰 𝙿𝙴𝙻𝙴𝙰 𝙵𝙸𝙽𝙰𝙻

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—En quince minutos llegaremos —Tony informó

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—En quince minutos llegaremos —Tony informó.

Steve intentaba mantenerse calmado, aunque por dentro sentía mucha furia, iba a acabar con Ben, él sabía que ese tipo estaba detrás de todo lo que le hubiese ocurrido a Phoenix, lo haría pagar, si era necesario buscaría la forma de revivirlo para volverlo a asesinar, cada vez usaría un método diferente.

Steve intentaba mantenerse calmado, aunque por dentro sentía mucha furia, iba a acabar con Ben, él sabía que ese tipo estaba detrás de todo lo que le hubiese ocurrido a Phoenix, lo haría pagar, si era necesario buscaría la forma de revivirlo para ...

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Al estar ahí, Steve entró, justo cuando estaba en el jardín, le pareció ver a alguien muy parecida a Phoenix, per a la vez había mucha diferencia, estaba a punto de atacarla cuando ella volteó.

—¿Steve? —Phoenix preguntó, luego frotó sus ojos, necesitaba comprobar que no era una alucinación.

—¿Pho-Phoenix? —Steve dudó, se veía muy diferente a su amada esposa.

—Eres tú, ¿verdad? ¿Cómo me encontraste? —Phoenix se acercó a Steve y lo besó, Steve de inmediato reconoció los labios de su amada, nadie podría imitarlos.

—Recuerda que trabajé para ellos durante mucho tiempo —Steve contestó después de romper el beso. La tomó de la mano, simplemente tendrían que salir y se irían, regresarían a casa, Steve le hacía algunas preguntas.

Una risa atrás de ellos interrumpió la plática de la pareja, Ben apareció, luego aplaudió.

—Es mejor que te rindas Ben —Steve levantó un poco su escudo dispuesto a atacar si era necesario.

—Phoenix, él no te conviene, acaso no te das cuenta de que es un asesino.

—Tú e HYDRA son los culpables de lo que me convertí, yo solo quería pelear por mi país —Steve se defendió.

—Te equivocas, yo fui la primera víctima de Steve, ni siquiera le importó que yo lo cuidara y protegiera antes de que le inyectaran el suero...

—Tú no sabes que es lo que esos malditos me hicieron, me aseguraron que eras un espía enviado por el enemigo —Steve lo interrumpió.

—Claro, que no puedo negar que eso fue de ayuda, se suponía que me iban a inyectar el mismo suero para revivirme, pero optaron por mejorarme, definitivamente la juventud eterna es muchísimo mejor que ser más fuerte —Ben continuó con su retórica.

Ꮯꭺꮲꮖꭲꭺ́ɴ ᎻᎽᎠᎡᎪDonde viven las historias. Descúbrelo ahora