One shots || Stray Kids

Treinta y siete || MinSung

La limpieza de primavera fastidiaba demasiado a Minho. Sabía que, si quería evitar problemas con Yeji, su esposa, era algo que debía hacer.

El único punto a favor era que tenía excusa para vender algunas cosas que ya no usaran en una venta de garaje puesto que nunca le había gustado acumular cosas.

—Daehwi, Soojin, acompáñenme al sótano, debemos ver qué cosas sacar— pidió el castaño mientras empezaba a bajar las escaleras del lugar antes mencionado.

—Si papá— dijo la pelinegra mientras seguía a su mayor.

—Pues ya que— se quejó Daehwi mientras seguía a sus familiares.

El sótano no era un lugar muy agradable para los pequeños. Los niños preferían pasar su fin de semana jugando videojuegos o perdiendo el tiempo en internet, pero al menos una vez al año debían ayudar a su padre en eso.

La limpieza consistía en ver todas las cosas guardadas en cajas. Si no las habían usado desde el año pasado o ni siquiera las recordaban, iban directo a la venta.

Pasó un tiempo en el que los tres se rodearon de cajas, polvo y algunos aparatos que no servían del todo.

Llevaban un ritmo constante de trabajo, hasta que la menor encontró una caja con lo que ella pensaba eran libros viejos.

—Papá ¿Qué son estos libros?— preguntó curiosa la menor mientras intentaba sacar un poco de polvo en la caratula de uno de estos.

El castaño dejó lo que estaba haciendo y se dirigió hacia donde su hija.

Viendo por encima de la caja no era difícil descifrar el contenido de ésta.

—Oh cariño, esos no son libros, son álbumes de fotografías— explicó el mayor mientras sonreía de ternura ante la confusión de Soojin.

—Wow ¿realmente esas cosas existían?— preguntó el pelinegro, dejando la caja que estaba revisando.

—Daewhi, por favor, me haces sentir un anciano— dijo Minho riéndose levemente.

—Papá— Soojin tomó la caja con algo de dificultad puesto que era muy pesada para ella —¿crees que podamos tomar un pequeñito descanso para ver los álbumes?

—Si papá, por favor— secundó Daehwi.

—Está bien niños que buscan evadir sus responsabilidades— el mayor tomó la pesada caja de las manos de su hija —vayamos arriba, aquí está bastante oscuro.

Juntos los tres fueron a la sala. Minho se sentó en el medio del sillón para que ambos niños pudieran ver correctamente aquellos álbumes.

—Vamos a verlos hasta que su madre llegue porque si no van a regañarnos a los tres ¿de acuerdo?

Ambos chicos asintieron solamente con sus cabezas. Eso era mejor a nada de descanso.

Minho tomó el álbum que estaba hasta arriba de la caja, lo abrió y la primera foto que había era una de él sonriendo ante la cámara.

—Wow papá, no has cambiado nada— dijo sorprendido el mayor de sus hijos.

—Amor, no es como que hayan pasado 20 años de esta foto— dijo el Lee mayor riendo.

Minho dio vuelta a la página, ahora eran distintos paisajes los que podían encontrar.

—¿Esas fotos las tomaste tu?— preguntó Soojin.

—Algunas si, algunas no.

Las siguientes paginas eran de Minho en distintos paisajes. El castaño decidió contarles a sus hijos las historias detrás de esas fotos.