diecisiete

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Eddie fue el primero en despertarse. Pero realmente no fue por elección propia, sino porque Sonia había tratado de irrumpir en su habitación.

Rápidamente escuchó los reclamos de su madre detrás de su puerta. Por suerte, esta se encontraba cerrada con llaves.

—Eddie, cariño. ¿Estás despierto?.—preguntó, dulcemente. Aún no había notado que su puerta estaba cerrada totalmente con las llaves..

—Buen día, mamá.—gritó, tratando de sonar lo más calmado posible.—Acabo de despertarme, estoy leyendo un poco....

Rápidamente Eddie se arrepintió de comentar eso. Su madre siempre quería ver lo que él leía, sólo para comprobar que fuera apto para su hijo.

Casi al instante de pronunciar aquello. Sonia trató de entrar en la habitación, lo cuál fue imposible. Eddie pudo escuchar a su madre quejarse al corroborar que se encontraba encerrado en su habitación. Ella odiaba eso.

—Edward....—habló con un severo tono de enojo y pizca de regaño en su voz.—Ya hemos hablado sobre lo que pienso de las puertas cerradas en la casa. ¿Lo olviste?

—Oh no, claro que no, Madre.—dijo, casi suplicando en su mente para que no buscara las llaves y abriera ahora mismo.

Observó a Richie, aún acostado en su cama. Estaba completamente dormido, pudo también ver como un hilo de saliva caía desde la boca de su amigo en dirección a su almohada....

—¡Oh, diablos! ¡Que asquerosidad!—Se quejó, casi olvidando la presencia de su madre en las afueras de su habitación.

—¿Que dijiste, Eddie?—preguntó

—Nada, madre....

—Sabés muy bien que detesto las puertas cerradas en el hogar. ¿Y si te sucede algo a media noche? ¿Que tal sí te lastimas o si te da algún ataque de asma?—preguntó, Eddie no respondió y ella volvió a hablar.—¿Quien podría ayudarte sí algo así sucede? ¿Quien más aparte de mí?

Ella volvió a atacar con sus preguntas. Y en la mente del castaño sólo se encontraba: Richie.

Sí, él podría ayudarlo. Una y mil veces como ya lo había hecho en todos y cada uno de sus ataques de asma.

Aunque no se animó a responder aquello, esos pensamientos se mantuvieron en su mente, cada recuerdo de todas las veces que Richie fue a su auxilio.

Si Sonia pudiera leer su mente, estaría más que molestaba al saber que aquel chico, el cual consideraba una mala influencia para su pequeño, lo había ayudado demasiado a superarse a sí mismo.

—Eddie, respóndeme...—lo regañó otra vez y el castaño se vió obligado a hacerlo.

—Sé que es peligroso, lo siento—se disculpó.—Será la última vez, lo prometo.

Sonia suspiró pesadamente y Eddie pudo escucharlo desde el otro lado de la habitación. Supuso que había algo de resignación en ese suspiro, y que su madre dejaría la conversación y se retiraría

—Está bien, cariño. ¿Vas a desayunar?

De repente, Richie decidió responder.

Mierda, realmente Eddie había olvidado que inoportunamente hablaba dormido.

—¡Sí! ¡desayuno!—dijo, entre sueños y luego se dió media vuelta, enterrando su cara en la almohada.

—Tal vez en un rato, mamá.—dijo rápidamente, tapando la voz de Richie y luego agregó—Ahora estoy leyendo y escuchando un poco de música. Muchos científicos lo recomiendan, dicen que hace que nuestro cerebro funcione mejor¿?...

—Excelente, cariño. Me agrada que leas tanto...—dijo, con voz dulce y Eddie sintió cierto alivio—Nos vemos luego, cualquier cosa estaré viendo uno de mis programas favoritos.

—Bueno, adiós mamá....

Se despidieron y pudo escuchar los pasos de Sonia, alejándose de su habitación y bajando así las escaleras para ir a ver su programa en la sala

Eddie se acostó a un lado de Richie y dijo para sí mismo.

—Ufff, eso estuvo muy cerca....

Richie se volteó y observó con sus ojos entrecerrados a Eddie, luego dijo entre bostezos.

—Oh, buenos días, querido Eds.

—Buenos días, Richie—dijo, sonriendo sin mostrar sus dientes. Richie se acercó y le dió un corto abrazo. Al separarse ambos se miraron fijamente.

—¿Que hora es?

—Mmmn, probablemente las 9, mi madre ya se ha despertado.

—Oh no...—bufó con cansancio y dijo—Debo irme.

—¿Por qué? ¿Tienes algo que hacer?

—No realmente, pero debo confesar que aún estoy castigado por lo que sucedió con el profesor de química.

—Ya veo. ¿Estarás en problemas por estar aquí?

—Probablemente, sí es que me descubren.

Ambos se levantaron de la cama, y al observar hasta el cuarto de Richie. Pudieron cruzar sus miradas con otro individuo.

Al instante notaron de quien de trataba. Era Whent Tozier, el padre de Richie.

—¿Estamos en problemas?—preguntó Eddie en un susurro.

—Definitivamente, estamos en graves problemas.

—¡Richard Tozier!—gritó When desde la ventana y ambos no pudieron evitar reir.

—Hola señor Tozier—dijo Eddie, sacudiéndo su mano en forma de saludo y mostrando una sonrisa nerviosa.

El padre de Richie sólo devolvió el saludo, aun manteniendo su semblante serio y le dirigió una mirada asesina a su hijo.

Sí probablemente Richie estaba consciente que eso sucedería sí era descubierto pero también estaba consciente de lo mucho que extrañaba pasar tiempo con Eddie. Así que simplemente decidió arriesgarse.

Arriesgar todo por Eddie...

Sin importar que el plazo de su castigo ya estaba a punto de cumplirse. Sin importar sobre las advertencias de sus padres sobre cómo empeoraría la situación sí el escapaba de su casa. Claramente no importaba absolutamente nada de lo que habían dicho sus padres durante su largo castigo.

Nada importaba....

Sólo Eddie.

Y ahí estaba él, arriesgando su buen comportamiento por estar con Eddie...

Como siempre lo hacía desde que eran pequeños. Dar todo por Eddie, arriesgar cada cosa por Eddie sin importar lo que podría suceder. Sin importar sí su castaño amigo hacía lo mismo o no.

Y tal vez de eso se trataba el amor para Richie, de hacer cosas tontas sin esperar que él otro haga lo mismo. Y aunque el de gafas en ese momento no lo supiera. Toda su vida había pasando haciendo aquello, aquel acto de amor sin tener la menor idea de que era.... 

Por Eddie....

Probablemente Richie no era consciente en ese momento de lo que significaba el amor para él y mucho menos de hacia quien sentía aquello.

Mientras Eddie, tal vez comenzaba a notarlo. Tal vez, sólo tal vez Eddie había comprendido mucho más temprano su significado del amor....

You love me? - ReddieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora