Después de un largo día decidió volver a la casa de los Originales. Al llegar vio a los más temidos Mikaelson con vestidos y sentados en el piso con una tasa de té en sus manos. Y en frente una pequeña pelirroja con una gran sonrisa pero la borro cuando miró a su tío e hizo una mueca.
—¡Tío Kol así no se hace! Tienes que hacerlo lentamente—Regaño a su tío.
—Yo no sirvo para esto—Se cruzo de brazos—En estos momentos yo estaría...
Los demás le dieron una mirada seria que lo hizo callar y bufar, derrotado le dio una sonrisa a su sobrina para hacer lo que le dijo correctamente.
—Ya es tarde—Hizo un bostezo falso—Y si mejor seguimos jugando mañana?.
—Pero si apenas acabamos de comenzar a jugar—Miro mal a su papá que él rápidamente siguió jugando.
Siguió mirándolos por un rato, era una escena graciosa. Por un lado estaba un papá mal maquillado, parecía payaso sin contar el labial hasta la barbilla. Elijah que tenía un delantal rosita con corazones y ojos pintados. Y Kol que tenía pequeñas trenzas con la cara maquillada toda de rosa con unos brillitos. A cada cosa que decía asentían rápidamente y se miraban entre ellos mal pero en cuanto les daba una mirada Hope sonreían.
Las rubias de la familia iban bajando las escaleras para buscar a sus hermanos que raramente no había ninguno.
—Oh princesa me hace el honor de bailar con usted?—Hizo una exagerada reverencia.
—Por supuesto...
—Sería un placer que bailara conmigo su majestad—Empujó a su hermano haciendo que se cayera, sonrió satisfecho.
—Estaría más....
—Lamentó decirle que me concedió esta pieza a mi, así que con su permiso—Jalo a su hermano, quedando los dos hermanos atrás con brazos cruzados indignados.
—¿Saben que? Mejor ya no quiero jugar—Se cruzo de brazos—Con ustedes no se puede jugar.
Las rubias al escuchar a su sobrina se comenzaron a reír, mientras los Mikaelson trataron de convencerla de seguir jugando pero fue demasiado tarde porque la pequeña se acercó a sus tías para hablar con ellas.
—Vaya, eso fue... una tragedia—Volteó a ver a todos y les sonrió—¡Hola a todos!.
Hope se acercó a la peli negra para abrazarla. Mientras los demás la saludaron amablemente y un cierto Mikaelson con una mirada coqueta.
—Tengo que decir que no les quedan nada mal—Les guiño un ojo—Lindos vestidos.
—Con todo nos vemos genial, amor—Le dio una mirada extraña—Aunque unos más que otros.
—Por fin voy a saber quien es esta bella mujer misteriosa?.
—Mi nombre es Olenka...
Después de la presentación comenzaron a hablar de diversos temas, congeniaban muy bien y hablaban como si no fuera la primera vez, raramente Kol le regalaba una sonrisa, pero no como lo hacía constantemente. Todos los miraban sorprendidos pues hablaban como si no estuvieran allí los demás. Cada uno comenzó a retomar lo que estaban haciendo. Uno en específico no paraba de verlos mientras poco a poco iba cerrando su puño enojado.
Ya era noche por lo tanto cada quien se fue a su habitación. Olenka al no poder dormir decidió salir a despejar su mente un rato al pateo. Minutos fue lo que duró su tranquilidad porque escuchó un ruido, guió su cabeza hacia donde se escuchó el ruido.
—¿Tampoco puedes dormir? Creí que ya todos estaban dormidos—Tímidamente alzó la mirada.
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Mi pequeña protegida
RandomEn la Familia Mikaelson se espera la llegada de la menor, Hope Mikaelson. Ellos aterrados por no saber cómo cuidar a su hija y sobrina de sus enemigos piensan en una alternativa para mantenerla a salvo... Pero lo que ellos no saben es que muy lejos...