Capitulo 4

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El día del sacrificio había llegado todos estaban tensos, terminando de preparar todo para el sacrificio. Freya les asintió a Klaus y Elijah diciéndoles que ya era hora.

Ellos se comenzaron a despedir de sus hermanos e hija, sobrina.

—Ocupo que me den su mano—Ambos hermanos lo hicieron dando inicio.

Mientras Freya murmura palabras en latín Olenka al escuchar una parte supo que era su momento. A pasos lentos se acercó al círculo para poner su mano en el hombre de la bruja.

Cuando avanzó el hechizo al estar absorbiendo el poder de la Ángel, las luces comenzaron a apagarse y prenderse. Y una fuerte lluvia comenzó.

—Algo no está bien—Dijo una rubia preocupada por sus hermanos.

Alarmados sin importar que pusieron toda su atención al frente, en su hermana, en el sacrificio.

Por la parte de la Ángel sentía cómo consumían su poder poco a poco, de pronto sintió dolor, mucho dolor. Sabía las consecuencias de lo que estaba haciendo sin embargo no se arrepiente.

Una de las consecuencias era volver al cielo. Lo que significaba no ver a los Originales, no poder ver a Hope.

Los hermanos Mikaelson en un punto salieron volando, siendo empujados hacia las paredes. Freya al ver que ya no están ahí elevo la voz para dar por finalizado el sacrificio, cuando estaba por acabar alado de ella se miró una silueta que se desvanecía y otra vez se alcanzaba a ver.

No pasando desapercibida por la pequeña Mikaelson, su Ángel, así la había apodado.La mujer que la cuidada y jugaba con ella desde que tenía uso de razón. Hubo un tiempo donde no la vio más pero nunca perdió la esperanza de que la volviera a ver. Estaba alado de su tía ayudando a su Familia. Ella emocionada y con una sonrisa quiso acercarse pero fue detenida por su Tío Kol.

La Ángel al sentir que ya se iba acabar todo dirigió su mirada a Hope, dándole una sonrisa triste pero llena de aprecio.
Una sonrisa prometedora.

—¡Que diablos es lo que sucedió y porque no sucedió!—Niklaus se estaba por acercar a su hermana mayor.

—Ya no hay necesidad de hacer el sacrificio ya todo acabo—Susurro asombrada de que si haya funcionado. Miro a la mujer a su lado y le dio una sonrisa agradecida.

—Cuida de la pequeña mientras no estoy, brujita—Son sus últimas palabras para desaparecer, por lo que dejo de llover repentinamente.

—Tienes muchas cosas que explicarnos Freya—Elijah se para como si nada para acomodarse elegantemente su traje.

—Niklaus! Elijah!—Exclamo una mujer aún sorprendida.


1 semana antes

Me estás diciendo que eres un Ángel y que cuidas de mi sobrina—Sin poder creerlo vuelve a repetir las palabras.

—Así es! Soy su Ángel Guardián, no tengo que mostrarme ante nadie de la Tierra pero en realidad los quiero ayudar. No quiero verla sufrir—Baja la mirada nerviosa.

¿Y que tienes planeado hacer? Que quieres a cambio de ayudarnos?.

Sacrificarme yo, eso pienso hacer. Porque les cuesta tanto aceptar que alguien los quiere ayudar sinceramente sin nada a cambio?.

Lo hemos aprendido con la vida. ¿Y volverás como si nada? No sufrirás alguna consecuencia o algo así?—Pregunta preocupada por la Ángel.

—Tú no te preocupes por eso, tu familia estará bien—Le sonríe feliz.

—¿Puedo saber un poco de ti?—Pregunta con curiosidad.

—Bueno, un día normal en el cielo estaba entrenando a mis guerreros cuando me hablo el superior. Me dijo que tenía que cuidar de una niña especial que yo era apta para eso, confundida asentí ya que yo no me encargo de cuidar personas, yo soy la que lidera a los guerreros—Sonríe orgullosa—Al decirme que era especial nunca pensé que sería una trihíbrida. Rompí reglas al llegar, en realidad me encariñe de ella y una que otra persona.

—Eras tú, siempre fuiste tú—Habla al recordar varios sucesos—Siempre la cuidaste, por eso siempre lloraba sin ninguna razón.

—Le gustaba que tuviera toda mi atención en ella—Ríe tranquilamente—Quería que siempre estuviera en su cuarto, junto a ella.

—Volverás?.

—No lo se—se a sincera—No se que vaya a pasar después del sacrificio. Te pido que no les cuentes de mi a tus hermanos, no ahora. Antes de irme tengo que resolver un asunto por lo que no tendré tiempo ni poder para quedarme un poco más aquí. Gracias por confiar en mi, en mi palabra.

—Apenas te conozco y siento que ya te voy a extrañar—Suspira extrañamente triste.

La Ángel sin pedir permiso se lanzó a los brazos de la Mikaelson dándole un reconfortante abrazo brindándole lo que hace años no sentía; Calidez, Amor, Felicidad y Esperanza. Le dio una sonrisa para alejarse un poco y desaparecer de ahí.







¿Quien creen que sea la mujer misteriosa? 👀

Mi pequeña protegida Donde viven las historias. Descúbrelo ahora