TRES

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—Nena... me encantas...— Confesó el chico mientras seguía besando su cuello.

—Jughead... quiero que me folles— Confesó entre algunos jadeos.

—Que directa, preciosa. ¿Que me dijiste?— Le preguntó sacándole la remera.

—Que quiero que me folles— Repitió empezando a desabotonar la camisa del ojiazul.

Jughead sonrió maliciosamente y la ayudó con la camisa. Luego retiró el sostén de la rubia y volvió a besar su cuello, empezando a bajar hasta sus pechos y llevándose uno a la boca. Empezó a jugar con sus pechos mientras ella tiraba la cabeza hacia atrás y se aferraba al cabello del chico.

Él se detuvo para mirarla fijamente de arriba a abajo. —¿Por qué nunca me animé a hablarte, Betty Cooper? Eres jodidamente sexy— Confesó para llevarse otro de sus pechos a la boca.

Ella sonrió mientras aún se aferraba a él, el cual estaba distraído con sus pechos. Y al mismo tiempo, Jughead empezó a bajar su mano hasta los pequeños shorts de la rubia y los desabrochó, para luego meter su mano entre sus bragas e introducir dos de sus dedos en su feminidad, haciéndola soltar un gemido y arquear la espalda.

—Tan mojada y aún no te he hecho nada...— Murmuró Jughead contra su oído, mordiendo levemente mientras empezaba a mover sus dedos dentro de ella.

—Jug...— Gimió agarrándose del cabello del chico y abriendo un poco más sus piernas.

—¿Te gusta?— Le preguntó acelerando el movimiento de sus dedos dentro de ella. —¿Esto te gusta... nena?—

—Si... —Respondió casi sin aire.

El continuó moviendo sus dedos dentro de ella mientras empezaba a besar su cuello y a dejar posibles chupetones. Verdaderamente su piel le había encantado y no quería parar de saborearla. Volvió a bajar hasta sus pechos desnudos e incluso los mordió cuidadosamente hasta que la sintió correrse.

Sonrió con superioridad y sacó sus dedos de ella, deteniéndose a mirarla. —¿Eso te gusto? ¿Quieres más?—

Betty no le respondió y sólo lo tiró a la cama y lo dejó debajo de ella, sorprendiéndolo a él con esta acción.

—¿Que estás haciendo?— Preguntó Jughead soltando una pequeña risa.

—Shhh...— Lo calló poniendo un dedo sobre sus labios. —Me toca— Avisó besando sus labios.

Lo besó y empezó a bajar sus besos al cuello del chico y a dejar pequeñas mordidas mientras sentía aquel enorme bulto entre los pantalones del ojiazul y él la agarraba de las caderas. Ella empezó a bajar sus besos hasta el abdomen de Jughead y se detuvo en sus pantalones. Se separó para mirarlo con una sonrisa traviesa y empezó a desabrochar su pantalón.

—Eres una maldita pervertida Cooper— Reprochó Jughead, divertido, al ver cómo la rubia sacaba su miembro erecto.

—Tu te callas — Le exigió bajándose los shorts y las bragas para sentarse sobre su miembro, haciendo que él entrara en ella.

Ambos soltaron un gemido y ella empezó a saltar sobre el, subiendo y bajando sobre su miembro mientras el chico la sujetaba fuertemente de las caderas, cerrando los ojos con fuerza. Ella no se detuvo hasta que se corrió sintiendo como él se vaciaba dentro de ella, ambos mezclando sus gemidos.

—Eres una puta, Elizabeth. Pero yo te enseñaré a ser una verdadera puta— Aseguró Jughead girándose en la cama y haciendo que ella quede debajo de él.

Se miraron directamente a los ojos y ahí ambos supieron que querían lo mismo. Querían repetirlo. Querían volver a tener otra ronda de sexo.

—¿Ah si? ¿Y cómo harás eso?— Preguntó la ojiverde, mordiéndose el labio.

—Traviesa. Te quiero en cuatro— Exigió Jughead.

—¿Y qué pasa si no lo hago?— Preguntó la rubia, divertida.

—Ponte en cuatro Elizabeth— Repitió dejando un azote en su muslo. —Ahora—

—Demandante. Eso me gusta—Confesó poniéndose en la posición que dijo el chico.

—Eso es Betty. Buena chica— La felicitó apretando su trasero para luego enterrarse en ella sin ningún aviso, llenándola de golpe.

—Jug...— Gimió la ojiverde empezando a sentir sus suaves embestidas. —Más...—

—¿Que dijiste?— Le preguntó soltando una nalgada en su trasero. —No escuché —

—Más...— Repitió entre gemidos.

—¿Como se dice?— Preguntó quedándose quieto dentro de ella.

—Más... por favor...— Le pidió.

—Eso es— La felicitó empezando a embestirla fuertemente mientras apretaba su trasero. —Nena...— Gruñó.

—Jug... más rápido...— Suplicó mientras gemía.

—¿Quieres más?— Preguntó el ojiazul con voz ronca enterrándose más en ella.

Betty apretó las sábanas y cerraba los ojos con fuerza mientras el chico la embestía cada vez más fuerte. Los gemidos de los dos haciendo eco en la habitación. Ella estaba tan excitada que sentía que iba a explotar en cualquier momento, y el seguía enterrándose en su caliente y estrecha entrada, sintiendo que iba a correrse en cualquier momento, sintiendo como las paredes de la rubia lo apretaban.

Se corrieron juntos sintiendo una oleada de placer golpearlos a ambos y sintieron lo que probablemente podría ser el mejor orgasmo de sus vidas. Los dos cayeron en la cama intentando adueñarse de sus sentidos nuevamente.

De repente los dos empezaron a reír sin ningún motivo en específico. Después de todo, aún estaban bajo los efectos del alcohol.

—¿Que acabamos de hacer?— Preguntó Betty sin parar de reír, mirándolo a él.

—No lo sé— Contestó Jughead riendo con ella. —Pero me gustó—

—¿Y aún te quedan energías?—

—No te cansas. ¿Verdad?— Le preguntó Jughead poniéndose sobre ella.

—¿Tú si te cansaste?— Preguntó la ojiverde, divertida.

Jughead sonrió con picardía y besó los labios de Betty. Ella correspondió y otra vez sus lenguas se encontraron y jugaron por un rato. No pararon de besarse hasta que la falta de aire los obligó a separarse.

—¿Que piensas hacer?— Le preguntó Betty al chico.

—Demostrarte que no me cansé — Aseguró Jughead guiñándole un ojo para besar su cuello.

Betty sonrió, satisfecha, y Jughead siguió besando su cuello y continuó bajando sus besos hasta sus pechos y luego a su abdomen. Ahí se detuvo y abrió más las piernas de la chica para volver a hundirse en ella de golpe, haciéndola gemir con el. Empezó a entrar y a salir de ella nuevamente mientras ella se aferraba a su espalda y él se escondía en su hombro mientras la embestía. Llegaron otra vez juntos a su orgasmo, pero ésta vez sí que estaban realmente cansados y ebrios, por lo que cayeron profundamente dormidos bajo las sábanas.



¿Fue muy Hot? Si

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¿Fue muy Hot? Si... lo fue 😏 no se hagan... yo sé que les gusta 😈

¿Que les está pareciendo la novela?


Samy ❤️

Nuestro Mejor Error <Bughead> Donde viven las historias. Descúbrelo ahora