Nuestro Mejor Error <Bughead>

TREINTA Y CINCO •EXTRA•

Después de la boda, Betty y Jughead fueron más felices que nunca dedicándose a su hija y esperando a su segundo bebé con mucho amor. Pasaron los meses, Sol cumplió tres años y poco después nació el segundo bebé. Fue varón y lo llamaron Ethan Jones Cooper. Al principio fue difícil cuidar de los dos niños a la vez y la pequeña Sol se puso algo celosa, pero la niña aprendió a querer y a cuidar a su hermanito y Betty y Jughead estaban más que felices con sus dos pequeños, a los que aman con locura.

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Actualmente, Sol tiene tres años y el pequeño Ethan tiene sólo seis meses de edad. Ahora Betty y Jughead están en Miami con Archie y Verónica, quienes ahora esperan un segundo bebé y el hijo mayor de éstos dos, Diego Andrews Lodge. Éstos rentaron una cabaña cerca de la playa para pasarla bien con sus hijos lejos de Riverdale por unos días.

Ahora están caminando a orillas de la playa. Betty al lado de Jughead con Ethan en sus brazos, Archie y Verónica detrás de ellos, y Sol y Diego iban adelante entre risas traviesas.

—¡Castillo de arena!— Exclamó Sol sentándose a orillas de la playa con una pala y una pequeña cubeta en mano.

—Castillo— Le siguió Diego sentándose a su lado para ayudarla con el castillo de arena.

—Estaremos vigilándolos— Advirtió Jughead sentándose en una tumbona al lado de Betty y el bebé.

—No se alejen mucho— Dijo Archie sentándose en una tumbona con Verónica en su regazo. —¿Te divertiste cambiando pañales amigo?— Le preguntó a Jughead, divertido.

—Puede que Diego ya sepa ir al baño solo. Pero vas a tener que cambiar más pañales cuando nazca tu segundo hijo. ¿No es así, Verónica?— Preguntó Jughead.

Verónica asintió mirando a Archie. —Definitivamente lo harás— Aseguró.

—Crecen tan rápido...— Admitió Betty mientras miraba a los niños jugar y le pasaba el bebé a su esposo. —Ayer eran unos bebés y ahora mírenlos—

—Eso si es verdad amor. Por eso hay que disfrutarlos cuando están así. Mira a Sol. Estoy tan orgulloso— Expresó Jughead mirando a su hija y luego al bebé en sus brazos. —También tú me enorgulleces Ethan—

—¡Queremos jugar en el agua!— Pidieron Sol y Diego al unísono acercándose a sus padres.

—Okey... eso dio miedo— Admitió Archie.

—Seguramente planearon decirlo juntos. Ni que fueran gemelos— Bromeó Jughead.

—Dejen la charla y háganle caso a sus hijos. B, vamos a entrar al agua— Propuso Verónica poniéndose de pie.

Betty asintió y se puso de pie, y acompañó a Verónica hasta entrar al agua con los niños. Luego Archie se metió al agua y Jughead hizo lo mismo con el bebé en brazos.

Jughead metió los pequeños pies de su bebé al agua mientras que Betty sostenía a Sol. El bebé amenazó con llorar en cuanto tocó el agua. —Hijo... veo que no quieres entrar—

—Saca a mi bebé del agua—Exigió Betty.

—Al bebé no le gusta bañarse— Habló Sol riendo levemente y sus padres repitieron esta acción.

—Es muy chiquito todavía mi amor— Le recordó Betty.

Se pasaron casi toda la tarde en el agua jugando con los más pequeños. Mojándose y bromeando entre ellos, viéndose en la obligación de jugar como niños pequeños para complacer a sus hijos, pero valía totalmente la pena. Definitivamente son felices con la vida que tienen ahora y aunque pudieran, no cambiarían nada.