DIECISIETE

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Cuatro meses después...

Betty tenía ya nueve meses de embarazo. Su relación con Jughead se había fortalecido y pasaban casi todo el día juntos, y éste se volvió más atento y cuidadoso con ella ya que se aproximaba el parto, algo que los tenía muy ansiosos a los dos. ¿Que eran? Ni ellos lo sabían. No tenían ninguna relación formal además de la amistad, aunque no era eso lo que sentían el uno por el otro. Lo que sí era cierto es que ambos esperaban a su hija con ansias.

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Hoy en la tarde, ambos estaban en Pop's hablando sobre nombres para su pequeña mientras comían papas fritas y nuggets de pollo acompañados de unas malteadas.

—¿Que te parece... Emily? No... ¿Emma? ¿Sofia? ¡No me decido!— Se quejó la rubia llevándose una papa frita a la boca. —No te quedes callado. Dame nombres—

—Es que a mí tampoco se me ocurre nada— Respondió Jughead mientras tomaba de su malteada. —No se mucho sobre estas cosas—

—Pero también es tu hija. Ya podría nacer en cualquier momento y no tenemos un nombre—

—Relájate preciosa. Ya se nos ocurrirá un buen nombre— Aseguró Jughead poniendo su mano sobre el vientre de Betty y sonriéndole. —¿Ya nos vamos?—

—No. Quiero un helado de vainilla — Respondió la ojiverde.

Jughead rodó los ojos y se puso de pie. —Yo iré por tu helado nena— Se ofreció dirigiéndose al mostrador . —Un helado de vainilla por favor—

—Enseguida — Respondió un mozo dando la vuelta para ir por el helado.

—¡Hermanito!— Chilló Jellybean corriendo hacia Jughead y abrazándolo por detrás.

—JB, no me dijiste que seguías aquí— Dijo Jughead mirándola y sonriéndole para luego agarrar el helado de la rubia.

—Estás muy perdido. ¿Donde te metes?— Preguntó Jellybean.

—Acompáñame y tú pregunta será respondida— Aseguró Jughead dirigiéndose a la mesa en donde estaba Betty.

Jellybean siguió a Jughead, extrañada, y cuando vio a Betty sonrió, ya que su hermano le había hablado de ella. —Hey, tú debes ser Betty. Jughead me ha hablado sobre ti. Soy Jellybean, su hermana — Se presentó con una sonrisa sentándose frente a ella.

—Oh, hola Jellybean. Jughead también me había hablado sobre ti. Es un gusto conocerte al fin — Respondió Betty sonriéndole.

—Aquí tienes nena— Habló Jughead dejando el helado de la rubia frente a ella.

—Oigan... falta poco para que nazca mi sobrina. ¿Tienen algún nombre?— Preguntó Jellybean.

—De eso estábamos discutiendo— Dijo Betty.

—Y no tenemos nada aún. Pero ya se nos ocurrirá algo— Aseguró Jughead sentándose al lado de Betty y rodeándola con su brazo.

—¡Que emoción! Ya quiero conocer a la bebé. Papá se lo pierde por idiota— Dijo Jellybean cruzando los brazos.

—¿Que?— Preguntó Betty mirando a JB y luego a Jughead. —No entiendo —

Jughead suspiró y miró mal a su hermana, y ahí fue cuando ésta se dio cuenta de que habló de más.

—Lo siento. Se me salió pero no fue mi...

—Está bien, Jellybean. Ahora Jughead tiene que hablar— Exigió Betty mirando al pelinegro.

Nuestro Mejor Error &lt;Bughead&gt; Donde viven las historias. Descúbrelo ahora