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Los días pasaron y rosalin antes conocida como la duquesa ahora era más como la secretaria de su esposo aún que su relación no hubiera mejorado mucho tampoco era tan mala o por lo menos podían tolerarse el uno al otro.

El duque organismo un manojo de papeles que había ya revisado y puesto su sello antes de girarse dispuesto a entregar los papeles al mayordomo.

Pero en vez de Erick a su lado se encontraba una joven de cabello rubio recogido en una coleta organizando varios documentos que estaban esparcidos mientras se sentaba en el suelo a solo dos pasos de el.

Parpadeo al ver esto se permitió sentarse en su silla y contemplar está escena tan conmovedora y hermosa su vestido algo pomposo se esparcía por el suelo dándole un toque tierno.

Sintió un cosquilleo en sus dedos quería tocar su suave piel tomar entre sus manos su cabello rosado rubio.

- listo - dijo ella sonriendo, esto hizo que el corazón del duque saltará en su pecho.

Tocó está sona sintiendo como si corazón parecía querer salir volando, su sonrisa podría llegar a ser un arma mortal para su corazón.

- duque - dijo ella al ver su ceño fruncido mientras posaba su mano en el pecho acaso ¿le dolía algo?

- rosalin gracias - dijo saliendo de su estupor y poniéndose en pie.

Tomo los papeles en sus manos nuevamente para caminar hacia ella.

- Erick nuevamente se volvió a fugar - pregunto

Ella asintió antes de ponerse en pie y sacudir el polvo pegado a su vestido azul cielo.

- si me pidió el favor de acomodar estos documentos antes de irse con su esposa - dijo ella rascando su mejilla.

Desgraciado mayordomo está era su tarea no el de ella, porque rayos debía estar haciendo su trabajo.

Se sintió engañada ante el acto de la semana pasada que débil, ¡Que viejo!.

Estaba en buenas condiciones cuando lo vio correr hacia su esposa está mañana.

- lo siento me aseguraré de castigarlo - dijo el tomando los papeles en la mano de su esposa.

- gracias - dijo ella mientras movía sus dedos adoloridos de cargar ese montos de papeles.- si no es más me retiro - dijo ella mientras caminaba hacia un lado dirigiéndose hacia la puerta

- espera podrías hacerme un último favor - dijo el mirando a su esposa.

- claro - respondió sin dudarlo.

El duque la mando a buscar a lina la hija de el mayordomo.

Rosalin bajo las escaleras y miro a cada lado casi siempre la veía en la puerta principal ordenando a varias de las criadas de la mancion como si fuera la dueña, lo le caía muy bien y al parecer este sentimiento era mutuo.

Suspiro al sentir un frío recorrer su espalda supo de quien venía era mirada que la ponía tensa, se giro antes de caminar hacia ella.

- señora - dijo luna inclinándose un poco mientras una sonrisa un tanto retorcida surcaba un lado de sus labios.

- el duque te encargo algo - dijo rosalin mientras estiraba su mano - vengo a buscarlo

La mujer sonrió antes de sacar una caja de color negro cubierto de terciopelo de su delantal.

- es muy hermoso - dijo entregándose lo a rosalin - escuché que la joya de Venus - rosalin tocó la caja con curiosidad al escuchar su nombre

- se le llama así por la diosa del amor claro, se dice que cuando la persona toca la joya está refleja el color de los ojos de la persona que uno ama- ella sonrió al decir esto - te pides imaginar que color tomo está joya cuando el duque la tocó - se detuvo por un momento mientras miraba a rosalin de reojo al girarse.

- no quiero saberlo - dijo ella ya cansada de sus juegos se giro y estaba a punto de empezar a subir las escaleras cuando escucho el resultado

- era verde - los pasos de rosalin se están Aron antes de girar y mirar a la chica nuevamente - me preguntó de quién serán esos ojos - dijo colocando una mano en su rostro mientras parpadeaba varias veces resaltando el color verde de sus ojos.

Rosalin chasqueo su lengua antes de seguir su camino

Se quiso burlar de esta mujer acaso pensaba que era ella, ja si el color era verde no había otra señorita sino esmeralda que podía llenar el corazón de lion.

Pero esto no hizo feliz a rosalin.

Al llegar al despacho no quiso ni mirar al duque así que agachó su cabeza un poco y entró mirando la caja de terciopelo en sus manos pero un grito llamo su atención haciendo que su rostro gacho se levantara y mirara hacia el ruido.

Lo que vio la desconcertó para después apulalar su pecho aún más.

Dolía, dolía mucho.

Una joven de cabello rubio cuan oro se encontraba en el regazo del duque sentado, este abría sus ojos asombrados mientras miraba a la chica y a la vez a su esposa.

- yo.. - rosalin no supo que decir

- rosalin no es lo que piensas - fue lo primero que dijo el duque antes de ayudar a la joven que estaba casi en sima suyo a ponerme en pie nuevamente.

Rosalin sintió su corazón oorimirse ante está escena, si era solo una ilucion entonces porque el hablaba con la chica y la consolaba a ella en vez de hacercarse a su esposa y aclarar todo rápidamente.

No soporto ver esto y tampoco pudo contener las lágrimas que resbalaban por sus mejillas antes de girar y correr sin importarle soltar la caja de terciopelo que se abrió revelando un collar con un pequeño dije en forma de rosa que al caer al suelo se desquebrajo un poco.

Lion miro a su esposa correr mientras el trataba de calmar a la agitada chica que se había caído sobre el, suspiro antes de alejarse y caminar hacia afuera siguiendo a su desesperada esposa.

Rosalin no se detuvo asta llegar a su cuarto cerró la puerta con candado y permitió que sus piernas se dieran callendo al suelo al pie de la cama mientras gruesas lágrimas corrían por su rostro.

Por qué dolía tanto, quiso goloear su pecho cuando lo había llegado a apreciar tanto, sintió su voz ahogada entre sollosos.

Lion recostó su frente junto a la puerta escuchando los sollosos de rosalin podía sentir su pecho arder al oír esto pero no tuvo el coraje de tocar no tuvo el valor para abrirla y abrazarla atraerla en sus brazos y consolarla.

Cómo podía hacer eso el, alguien tan sucio y contaminado tocar a alguien tan puro cómo ella.

Apretó sus dientes antes de darse la vuelta y alejarse sin poder cumplir alguno de sus deseos.

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