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Los meses pasaron y la muy enojada rosalin empezó a notar cambios en su cuerpo se hallaba muy cansada vomitaba mucho y su cuerpo empezaba a cambiar no solo sus caderas se ampliaron sino que sus senos empezaban a crecer.

Al principio sintió miedo después quiso ocultarlo.

Pero como se podía ocultar a una mujer que vomitaba a mitad del almuerzo la comida.

La primera en preocuparte fueron sus doncella luego fue lisa quien sospecho que le sucedía a su señora.

Rosalin gruño molesta antes de voltear el plato no soportaba el olor del pescado, sintió nuevamente como la comida subía por su garganta.

Tapo su nariz antes de girarse y correr hacia su cuarto pero a mitad de camino se canso.

- ah - se quejo ante esto su cuerpo se había vuelto tan torpe ahora.

Se dijo a ella misma tendría que hacer más ejercicio.

Miro a sus doncellas que la seguían tratando de detenerla ellas también sospechaban pero no querían decirle nada a su señora.

- señora por favor no corra - dijo An acercándose a ella

Hizo una mueca antes de permitir que la doncella la ayudará tomo su mano y se recostó un poco en ella para ayudarla a seguir hacia el cuarto donde se sorprendió al ver al ama de llaves.

Lisa dulsemente al ver a rosalin.

- señora - dijo ella saludándola - eh traído algo que nos Ara averiguar que tiene - entrego un aparato muy raro a rosalin quien lo tomo en sus manos.

Se trataba de algo largo y liviana de un color pálido y plano.

- ¿Que es esto?- pregunto rosalin confundida.

- señorita no sabe?- dijo una doncella sorprendida

Rosalin negó con su cabeza aún más confundida

- su madre nunca se lo enseño ?- pregunto marina

Rosalin hizo una mueca, su madre había muerto al nacer ella así que no tenía madre.

- señorita estienda su mano- rosalin no dudo en hacerlo.

Estendionsu mano hacia el ama de llaves quien sacó una aguja y la enterró en su dedo, se quejo ante esto pero no dijo nada al ver cómo la gota de sangre caía sobre el cristal.

Este empezó a ponerme de colores como un arcoiris, sintió como las mujeres a su lado dejaban de respirar antes de ver cómo este tomaba un tono rojo.

El ama de llaves jadeo mientras tapaba sus boca y esbosaba una sonrisa con sus ojos.

Las doncellas a su lado chillaron mientras saltaban contentas de lado a lado y la única ignorante era rosalin quien empezaba a irritarse al verlas.

- señorita usted...usted ¡Esta embarazada!- grito marina.

El rostro de rosalin palidecio ¿ Embarazada?

Sintió su cuerpo débil, sus piernas fallaron y si no fuera por sus doncellas que la atraparon luego de soltar un grito había caído al suelo.

- lleve la a la cama debe estar en shock - dijo el ama de llaves.- señorita debe tranquilizarse- rosalin trato de respirar.

Pero sentía como su pecho se oorimia y mil preguntas empezaban a invadir su cabeza

¿El estaría feliz? ¿Los amaría? O tal vez no por no provenir de la protagonista.

Quiso llorar y lo hizo sus ojos se empañaron antes de soltar gruesas lágrimas por sus mejillas.

Las mujeres que la rodea an no sabían que hacer para consolarla se sentían a ayudas ante todo esto.

Sabain las preocupaciones de su señora pero no podían tranquilizarla el único que podía era el duque y este no daba señorales de vida.

Hacia meses que no volvía a la mansión nadie sabía donde se encontraba.

- tranquila señorita rosalin debe calmarce ahora usted es responsable de la vida que está creciendo en su vientre - dijo el ama de llaves con cariño mientras tomaba sus manos entre las suyas.

Rosalin hipo al tratar de calmarce al oír las palabras de la mujer ella sonrió antes de asentir, lisa tenía razón ella era responsable de la vida que crecía en su vientre.

Tocó su abdomen que todavía no crecía para luego donarlo.

Bebé mamá te cuidara, se dijo a si misma.

Los siguientes meses transcurrieron en cuidados y molestias.

Rosalin sabía cómo sobrellevar el embarazo este la sobrellevar a ella al sesto mes vio lo grande que se encontraba su barriga se sintió asustada al verla era tan extraño su cuerpo nunca había estado en este estado.

No solo por lo abultado de su abdomen sino por la inchadon en sus pies y dolor de espalda.

Sus doncellas la masajeaban todos los días para calmar un poco el malestar.

Sus vestidos antes agustados se habían convertido en olgados que la hacían ver tierna con la barrida agrandada.

Rosalin ronrio feliz al verse en el espejo.

Para luego voltear y caminar hacia el patio había contratado a un pintor quería tener está imagen en su cuarto para siempre recordarla.

Se acomodo en una silla de medio lado mientras miraba al pintor.

Quién sonreí al ver está imagen de cuento de hadas.

La chica con rostro joven sonreía dulcemente mientras posaba una de sus manos en su abultado abdomen mientras las flores y mariposas la rodeaban su cabello rubio caía como cascada por su espalda y un pequeño meschon sobre su hombro.

Está fue la imagen que quedó plasmada en la pintura.

Rosalin sonrió feliz al verla sus ojos brillaban más que en la pintura al verla pago al artista antes de pedir a sus doncellas que la colgarán.

Al final decidieron ponerla en todo el centro del cuarto donde su señora pintaba ya que esto la inspiraria.

Rosalin se volvió un tanto torpe en el octavo mes también se hallaba muy cansada dormía casi todo el día y se quejaba al sentir dolor abdominal.

La última semana fue la peor ya que el parto se adelantó los gritos se oían en toda la mansión la mujer no podía aguantar el dolor sentía como se partía a la mitad su cuerpo quería morir.

Lloro ante esto.

El ama de llaves limpiaba su frente sudorosa mientras apretaba sus dientes al sentir como la muchacha apretaba fuertemente su mano.

No pido evitar ver de reojo al doctor y palidecer al ver la gran cantidad de sangre que manchaba las sábanas blancas.

KILIGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora