"𝖯𝗈𝗋𝗊𝗎𝖾 𝗇𝗈 𝗌𝗈𝗒 𝗌𝗎𝖿𝗂𝖼𝗂𝖾𝗇𝗍𝖾 𝗉𝖺𝗋𝖺 𝖾𝗅𝗅𝖺, 𝗃𝗈𝖽𝖾𝗋, 𝖾𝗌𝗍𝖺 𝗍𝗈𝗍𝖺𝗅𝗆𝖾𝗇𝗍𝖾 𝖿𝗎𝖾𝗋𝖺 𝖽𝖾 𝗆𝗂 𝖺𝗅𝖼𝖺𝗇𝖼𝖾"
-𝖩𝖩 Maybank.
Kat Routledge y JJ Maybank siempre habían tenido un vínculo especial. La chica siempre ha...
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chapter one hurricane agatha
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Narra Kat:
Me desperté en mi habitación del Château por la luz del sol. Cogí mi móvil dispuesta a estar un rato con él cuándo me dí cuenta de que no había cobertura.
Probé a ver si había luz y nada.
—Genial—dije para mí misma.
Salí de la habitación y me encontré a JJ durmiendo en el sofá.
—Buenos días, J.
El abrió un poco los ojos y me sonrió.
—Buenos días, Kitty-Kat—me dió otra sonrisa mientras volvía a cerrar los ojos.
Me paré enfrente de la ventana de Château viendo como mi hermano movía unas ramas fuera del HMS Pogue.
—¿John B ya está despierto?—le pregunté sorprendida al rubio.
Me giré hacia JJ, que ya se estaba levantando para quedar sentado en el sofá cama.
—Sí... Se levantó hace 5 minutos o así—asentí y me giré para coger un vaso de agua de la cocina, en la cual estaba apoyada, cuándo sentí su mirada en mi nuca.
Me giré hacia él y le pillé mirándome el cuerpo fijamente.
—¿Qué pasa?—pregunté algo confundida.
—No, nada... Yo... Tengo que ir al baño—dijo para inmediatamente salir corriendo al baño.
Yo me miré a mi misma a ver si me había manchado o algo cuándo ví que solo llevaba puesto un top de pijama bastante apretado y unas bragas de lencería negras.
Oh, mierda.
Me ruboricé al instante y, después de ponerme un pantalón corto, abrí la puerta del Château para ir con mi hermano.
—Buenos días, payaso—le saludé.
—Buenos días, pesadilla.
—Oh, venga ya—dijo mirando a su arbol favorito. Ahora destrozado.
—Agatha se ha lucido, ¿eh?—una voz muy conocida sonó a nuestras espaldas. Yo no pude evitar ruborizarme otra vez al pensar en la situación de hace menos de dos minutos.
—Pues sí—respondió mi hermano quitando las ramas del HMS Pogue.
—¿En que piensas?—le pregunté yo.
—En que la tormenta ha traído cangrejos hasta las Marismas. Los peces irán a por ellos.
—¿Y lo de protección de menores?¿No era hoy?—preguntó el rubio a mi lado.
