"𝖯𝗈𝗋𝗊𝗎𝖾 𝗇𝗈 𝗌𝗈𝗒 𝗌𝗎𝖿𝗂𝖼𝗂𝖾𝗇𝗍𝖾 𝗉𝖺𝗋𝖺 𝖾𝗅𝗅𝖺, 𝗃𝗈𝖽𝖾𝗋, 𝖾𝗌𝗍𝖺 𝗍𝗈𝗍𝖺𝗅𝗆𝖾𝗇𝗍𝖾 𝖿𝗎𝖾𝗋𝖺 𝖽𝖾 𝗆𝗂 𝖺𝗅𝖼𝖺𝗇𝖼𝖾"
-𝖩𝖩 Maybank.
Kat Routledge y JJ Maybank siempre habían tenido un vínculo especial. La chica siempre ha...
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chapter four pogues on charleston
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Narra Kat:
—JJ, venga, levanta...—tiraba de él—Vamos, tenemos que ir a clase.
—Cinco minutos más—suplicaba con los ojos cerrados, tumbado de cualquier manera en su cama.
—No, JJ, tenemos un examen por la mañana, no podemos llegar tarde.
Él gruñó, abriendo levemente los ojos.
—Ayer por la noche estabas más simpática.
Me sonrojé levemente recordando la noche de ayer, incluidos los gemidos y suspiros provenientes de la habitación en la que estaba ahora.
—JJ, va enserio—me puse seria—Si no te levantas ahora mismo me voy sin ti.
—Pues vete.
Le miré con las cejas alzadas, pero él ni se inmutó, queriendo dormir de nuevo.
—Pues vale—dije ofendida.
Salí de su habitación pegando un portazo y me dirigí hacia el sofá, donde reposaba mi mochila. Empecé a llenarla de mis cosas para clase, a punto de irme, cuando un JJ apurado apareció del pasillo.
—Kat, Kat—dijo con la respiración algo agitada, mientras se ponía una camiseta—Ya estoy, ¿Nos vamos?
—Mhmm—asentí.
Entramos en el Twinkie, yo iba conduciendo, seria.
—Kat, lo de antes era broma, ¿Lo sabes, no?
—¿El qué?—pregunté cortante.
—Que no quería que te fueras sin mí.
—Ah, ya.
—Kat, estoy hablando enserio.
—Sí, yo también.
Él suspiró frustrado.
—Venga, Kat...—puso su mano en mi muslo, debilitándome un poco—Sabes que lo dije porque estaba dormido—dio un apretón.
No le contesté, intentando no caer.
—¿Ayer dormiste bien?—susurró en mi oído.
Se me aceleró la respiración mientras intentaba no mirarle y centrar mi vista en la carretera.
—Perfectamente—dije seca—Escuché que tu también.
Su sonrisa victoriosa se podía escuchar desde el otro lado de la isla, cuando se encogió de hombros.
—Habría dormido mejor contigo.
Esta vez fui yo la que me encogí de hombros.
—Entonces es una pena que quisieras que me fuera de casa sin ti hace unos cinco minutos.
