capítulo veintisiete.

3.3K 104 91
                                    

akiraconti vía Instagram story.

akiraconti vía Instagram story

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

°

4 horas antes.

Akira.

—La rompiste, chiquito. —felicité con los ojos cristalinos a mi novio en cuanto volvió a meterse por detrás del escenario apenas terminó de cantar su canción en conjunto a Nicole.

Me sentía una madre orgullosa de sus hijos, pero es que en serio es admirable lo que hace arriba del escenario.

—Gracias, amor. —murmuró con una tierna sonrisa, para luego acunar mi rostro y plantar un beso en mis labios—Quedan un par de canciones todavía, ¿vemos el show juntos? —propuso tomándome de la mano y yo no dudé en aceptar su propuesta. Aunque no podíamos estar entre la gente, nos sentamos en el piso, al costado del escenario, mientras veíamos a aquélla morocha haciendo cantar a todo el público que había ido a verla.

El teatro estaba lleno, y aunque no me sabía sus canciones, disfrutaba bastante escucharla en vivo.

—Es buena, ¿no? —opiné mientras él, sentado como indiecito, soportaba mi cuerpo encima de sus piernas.

Su mano se pasaba alrededor de mi panza y así estábamos bastante cómodos con la hermosa vista que teníamos; el escenario.

—La rompe, mal. —contestó con una sonrisa de oreja a oreja mientras que, en un murmuro, cantaba la letra de la canción que se oía.

Y mientras la veía tan inalcanzable y como una de las estrellas más brillantes del teatro, me hacía sentir chiquita en cuanto recordé su mensaje enviado el día anterior.

Yo obviamente le contesté, le hablé a Mateo enseguida contándole lo sucedido y aunque a él también le parecía raro, me dijo que aceptara sin problema, entonces eso hice.

Habíamos quedado en hablar en cuanto ella baje del escenario, Mateo me esperaría algunos minutos más para irnos que sería el tiempo que yo tardaría en hablar con ella.

¿De qué íbamos a hablar? No sé, no me dijo, y aquéllo me mataba de intriga.

—¿No te parece raro que quiera hablar conmigo? —pregunté girando hacia atrás mi cabeza para mirarlo a la cara, él frunció su ceño y alzó sus hombros indiferente.

—Capaz quiere pegar onda con vos, amor, no te maquines. —contestó aunque sin darme tanta atención, ya que estaba concentradísimo en el show.

Yo exhalé profundo y dejé caer mi cabeza en su pecho, mientras ambos continuábamos viendo lo que quedaba de la función, y yo no podía parar de llenarme de preguntas por tanto interés en la morocha por hablar conmigo.

Algo malo presentía.

—Rompiste, wacha, me cebaste una locura. —soltó contento el morocho en cuanto la vimos correr hacia detrás del escenario una vez que su show había finalizado.

destino; trueno.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora