Un verdadero amor 6a parte.

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Capítulo 1017

"¿Por qué te has levantado tan temprano hoy? Ahora, ponte algo de ropa o de lo contrario, te resfriarás".
Dijo KyuJong preocupado. Levantó la cabeza, siendo recibido por la mirada somnolienta de HongKi, y supo inmediatamente que necesitaba dormir más. Después de todo, no estaba acostumbrado a despertarse tan temprano en la Ciudad S.

"¿No saliste a hacer ejercicio hoy?"
Preguntó confundido mientras permanecía quieto en lugar de abrigarse. Y lo que era más, ¡incluso estaba descalzo!

"No, prefiero tomarme un día libre hoy, ya que anoche, bebí demasiado. Ve a calzarte, el piso está frío".
KyuJong se levantó y lo miró. La habitación en la que estaban no era tan lujosa como la del Grand Apartmenty no tenían su gruesa alfombra de lana.

"De acuerdo".
Respondió HongKi, que se puso sus zapatillas acolchadas de algodón y un abrigo grueso. Estaba a punto de girarse cuando un par de fuertes brazos lo agarraron por detrás.

"¿Por qué no has aprendido a cuidar de ti mismo?"
Preguntó KyuJong en un tono acusador mientras no pudo evitar fruncir el ceño al sentir lo frío que estaba el pequeño cuerpo de su esposo.

"No tengo frío".
Dijo con una voz que le salió suave cuando su corazón se disparó. El nerviosismo y el deseo que se apoderaron de él eran similares a los que tuvieron cuando experimentaron su primer amor.

"No me mientas, tus manos están heladas. Ya que estás despierto, ¿por qué no te lavas y te vistes? Más tarde, te llevaré a un lugar divertido".
Dijo KyuJong, empujándolo hasta el baño. Como tomaba pocos días libres, había decidido disfrutar de un poco de diversión con su esposo.

"¿Saldremos de nuevo?"
Preguntó confundido, ya que sintió que era incómodo vivir con su familia, especialmente con sus frecuentes salidas. Se sentía obligado a comportarse bien así como ser un buen esposo y yerno.

"Sí. Nos casamos incluso antes de tener la oportunidadde tener citas, por lo que será mejor que pasemos un buen rato hoy y aprovechemos la oportunidad. Vamos, solo estamos nosotros dos".
KyuJong le acarició el pelo, se sintió afortunado de haberlo conocido aquella noche de lo contrario, no tendría un esposo tan encantador.

"¿Me comprarás rosas? ¿Me llevarás a una cena romántica a la luz de las velas?"
Preguntó HongKi, inclinando la cabeza expectante e incapaz de dejar de pensar en lo que tendría planeado. No era frecuente que pudiera dedicar unas horas con él.

"Trataré de complacerte en todo".
Fue la afectuosa respuesta del hombre. La ternura en su voz era tan evidente y real que casi podía saborearla en el aire.

"¡Oye! Deja de decir 'complacerme'".
Respondió HongKi tímidamente y se apresuró a girarse, en un intento de ocultar su vergüenza, porque nunca admitiría delante de él que le hacía sentír deseo.

"Cariño, nunca deberías volver a acusarme de ser un desvergonzado, ya que creo que a veces, tú también eres un poco mal pensado".
Se burló KyuJong que en lugar de alejarse, se apoyó contra la puerta.

"Déjame en paz, voy a lavarme los dientes".
HongKi se había sonrojado con lo que había dicho su esposo, al que fulminó con la mirada, pensando que sus palabras eran muy ambiguas.

"Perfecto, lávatelos. Nadie te lo impide". Respondió KyuJong, que se quedó donde estaba, ya que no tenía intención de dejarlo tranquilo.

"De acuerdo, tú ganas. Si no quieres irte, da lo mismo, voy".
Dijo HongKi que cerró la puerta del baño de golpe lo más rápido que pudo.

KyuJong se quedó sin palabras y conmocionado al verlo responder de esa manera, ya que nunca se había portado mal con él. ¿Por qué había vuelto a poner todas sus precauciones contra él?

Ya eran las nueve cuando terminaron de prepararse y el día se había vuelto cálido y soleado.

"Buenos días, Mayor General, Kikí. ¿Van a salir?"
Preguntó Lee apresuradamente, porque si hubiera acertado, estaría en un serio aprieto.

"¡Sí! Vamos a dar un paseo. Puedes tomarte el día libre, Lee, disfrútalo con tus amigos".
Respondió KyuJong en un tono amistoso, ya que tenía un carácter amable y no se permitía hablar como un burócrata.

"KyuJin me dijo que no usarían el auto hoy, por lo que se lo llevó".
Dijo Lee mientras se veía nervioso y avergonzado. También dio un paso atrás por si KyuJong se enfurecía y le daba una patada.

"¿Cómo? ¡Yo nunca dije eso! ¡Ese chico horrible! Se está volviendo cada vez más audaz".
Gritó KyuJong apretando los dientes. En esa situación, podría tener que pedirle prestado el vehículo militar a su padre y lo malo era que se apuntaría a un montón de problemas, ya que se suponía que no podían usarse en absoluto para fines personales.

"¿Hay algún auto disponible en casa?"
Preguntó HongKi, que también estaba molesto, ya que temía que su cita con KyuJong se arruinara.

"Me temo que ninguno".
Respondió Lee, aunque en realidad, no estaba absolutamente seguro, puesto que no había ido al garaje para comprobarlo. Sin embargo, Shannon también había salido manejando, así que era muy poco probable que la casa todavía tuviera otro automóvil disponible para la pareja.

"¿Qué pasa con el auto de KyuJin? ¿Por qué no lo utiliza?"
Preguntó KyuJong, aunque sabía que Lee probablemente no tendría la respuesta.

"Le hice la misma pregunta y dijo que se lo había prestado a un amigo".
Contestó inclinando la cabeza. Si hubiera sabido que KyuJong podría culparlo por su mala gestión, jamás le habría entregado la llave a KyuJin. De lo contrario, no estaría parado allí sufriendo por los nervios.

"¿Qué quieres decir con eso? Le prestó su auto a un amigo y luego salió manejando el nuestro, ¿lo he entendido bien?"
Preguntó el Mayor General con los ojos ardiendo de furia. Sacó su celular, a punto de llamar a su hermano y ordenarle que se lo devolviera de inmediato.