Un verdadero amor 6a parte.

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Capítulo 1170

HongKi había estado sonriendo desde que salieron de la oficina de PolPruk. Era reconfortante que KyuJin siguiera siendo amigable con él, y dejara que lo tomara por el brazo sin ninguna objeción. Quizás no era un gran cambio, pero definitivamente era un buen inicio para su relación incipiente.

"HongKi, ¿cómo es que tus amigos son tan sobresalientes?"
Soltó KyuJin de repente, sin poder ocultar la curiosidad. ¡Dios mío! ¿Por qué todos los amigos eran personas influyentes? Primero, Hyun y JungMin, quienes pertenecían a FX Internacional y ahora, PolPruk, ¡el dueño de un hospital!

"¡Jajaja! Créeme, no te parecerán tan increíbles una vez que los conozcas".
Le dijo, echándose a reír jocosamente. Él se había criado junto a esos hombres tan importantes, y los conocía a todos como la palma de su mano. Quizás ellos podrían parecer magnánimos e intimidantes, pero para él eran sus hermanos mayores. Ni siquiera podía ver alguna diferencia en ellos en comparación con los demás hombres.

"¿En serio? ¿Me estás tomando el pelo?"
Le preguntó KyuJin, con expresión dudosa y frunciendo el ceño. Inconforme con su respuesta, miró a HongKi con ojos inquisitivos, esperando encontrar la verdad.

"Claro que sí, esa es la verdad. ¿Por qué te mentiría?"
Una sonrisa honesta se dibujó en sus labios y KyuJin terminó por entrecerrar los ojos examinando a su cuñado.

'Bueno, esa sonrisa se ve sincera; no creo que me esté mintiendo', pensó.

Ya que la sonrisa que HongKi había puesto casi lo deslumbra.

Hasta entonces, KyuJong permanecía callado, escuchándolos tranquilamente; sintiéndose feliz al ver cómo su esposo y su hermano se llevaban tan bien. Estuvo de muy buen humor en su camino de regreso a Grand Apartment.

Afuera soplaba suavemente la brisa, añadiéndole paz a la noche de invierno. A pesar del frío que hacía, a KyuJong no le afectaba pues estaba refugiado dentro de la acogedora y cálida habitación.

En el interior, HongKi yacía boca abajo sobre la cama. Su pijama estaba hasta el cuello, por lo que se podían apreciar su espalda desnuda y sus deliciosas curvas. Justo acababa de darse un baño de espuma y ahora esperaba que KyuJong le aplicara sus medicinas en la herida.

"Kikí, quizás te duela un poco, ¿de acuerdo? Trata de aguantar, pero si te duele mucho, no dudes en gritar; eso te aliviará".
Le dijo KyuJong, con la voz un tanto temblorosa. Hasta ese momento, no había tenido la oportunidad de ver cuán grave era la herida; por lo que se sorprendió al verla por primera vez. ¡Era terrible! Se sintió embargado por un profundo dolor al encontrarse con el violento moretón en medio de su piel tan suave. ¡Lo que le había hecho a ese chico no era suficiente para hacerlo pagar por eso! ¡Tenía que haberlo molido a golpes!

"Ehm... Lo sé".
Respondió HongKi con un hilo de voz. Fue esa obediencia y sensibilidad que lo hizo mantener la calma durante el incidente. Pues no había querido que KyuJong se preocupara. Aun así, no pudo evitar encogerse un poco cuando sus manos empezaron a untarle la pomada en la espalda.

"¿Te duele?"
Al ver la reacción de su esposo, su corazón se acongojó; hubiera preferido mil veces que el moretón estuviese en su espalda y no en la de él. Pero eso no impidió que masajeara con fuerza la herida para que así el ungüento hiciera mayor efecto; lo único que deseaba era que se recuperara lo antes posible.

"Si te digo que sí, ¿te detendrás?"
Le preguntó HongKi con los ojos llorosos mientras se volvía hacia él. Su hermosa cara se había puesto roja y era obvio que no estaba a gusto.

"No es probable que eso pase, pero puedo presionar un poco más suave".
Dijo KyuJong inmediatamente, forzando una sonrisa. No quería verlo pues temía que su expresión de dolor lo hiciera desistir de aplicarle el medicamento. Sabía que no era demasiado resistente ante el dolor, y estar consciente de ello lo hacía querer desistir. Pero continuó; soltó un suspiro, inclinó la cabeza y continuó masajeándole con delicadeza.

"¡Bueno, ya me queda claro! ¡Obviamente no me aprecias en absoluto!"
Se quejó HongKi, haciendo un puchero. Realmente había querido decir algo para distraerse del dolor, pero no pudo controlar lo que salió de su boca; involuntariamente, sus palabras habían hecho que KyuJong se pasmara. Súbitamente, él se detuvo y se lo quedó viendo con la boca entre abierta.

"Lo siento".
Fue lo que logró murmurar luego de un largo silencio. Seguidamente, se dio la vuelta, tomó otra pomada y continuó aplicándosela en la espalda.

"Ehm... Lo lamento, no estoy culpándote, no fue eso lo que quise decir".
Respondió HongKi con frustración. En realidad lo había dicho sarcásticamente, no era como si significara algo, en absoluto.

"No te preocupes, tiene sentido que me culpes. En primer lugar, no estuve allí para protegerte; si hubiese llegado a tiempo, no estarías pasando por esto. Lo siento mucho, Kikí ".
Le dijo, retirando sus manos y relajando su aliento. Era un alivio para él terminar de aplicarle la crema, pues no tendría que seguir con los nervios de punta.

HongKi no se imaginaba cuánto le dolía a su esposo cada vez que él apretaba el puño, se acongojaba y gritaba; su dolor era incluso peor que el dolor físico de él.

"Kyu, ¿estás enojado conmigo?"
Sintiéndose arrepentido por lo que había dicho, volvió a girar la cabeza y lo miró. Mientras tanto, él permanecía encogido sobre su estómago, ya que KyuJong no le avisó que ya había terminado.

"No, no estoy enojado contigo; es conmigo mismo con quien lo estoy. Pero bueno, ya he terminado con esto, ya puedes darte la vuelta:.
Sin más rodeos, le bajó el pijama y luego se fue al baño para lavarse las manos. Mientras tanto, HongKi se incorporó, viendo a su esposo desaparecer tras la puerta del baño. Estaba realmente confundido. A pesar de tanto tiempo junto a KyuJong, aún no se había topado con su lado gélido, y tampoco quería enfrentarse a él.