Un verdadero amor 6a parte.

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Capítulo 1147

Cuando KyuJong entró a la oficina del Comandante, comenzó a explicarle sobre los cambios positivos que había observado en KimBum. Ese chico había mejorado su comportamiento y actitud dentro de la base militar, y continuaba esforzándose para corregir sus errores. Por lo tanto, sugirió darle otra oportunidad de ser promovido.

Creía que KimBum podría ser un buen soldado para su país. Lamentablemente, la sugerencia no recibió respuesta del Comandante.

En cambio, le dijo a KyuJong que necesitaría algo de tiempo para considerar su caso, pues los antecedentes de KimBum eran un desastre. Aquella respuesta decepcionó a KyuJong. Ni siquiera le había pedido al Comandante que aceptara su sugerencia sin más, pero al menos quería una respuesta clara.

El resultado de su reunión lo inquietó hasta que regresó a su oficina. Unos minutos después, seguía meditando las cosas, mientras permanecía sentado en su escritorio.

La actitud de KyuJin hacia HongKi lo tenía preocupando, pues no tenía idea de si su hermano habría cambiado de opinión por completo. Estar fuera de casa sería más fácil para él si esos dos se llevaran bien. Pensaba que quizá KyuJin aprovecharía esta oportunidad para intimidar a HongKi de nuevo, pues pronto tendría que participar en el programa de capacitación.

¿Por qué no podía simplemente ser amable? ¿Le esperarían más conflictos, ya que no podría vigilarlos? ¡Por Dios, deberían saber que ellos dos eran los hombres más importantes de su vida! HongKi era su esposo, y KyuJin era su hermano. Los adoraba tanto a los dos, y tenía la esperanza de que pudieran llevarse bien incluso si él no estuviera cerca.

Se esforzó para concentrarse en su trabajo. Sacudió la cabeza, tratando de despejar su mente y olvidarse de todos estos pensamientos. Tomó los archivos de su escritorio y comenzó a leerlos cuidadosamente. Le tomó un tiempo recuperar su concentración. Cuando ya casi lo lograba, un fuerte tono de llamada vició repentinamente su oficina, igual que su mente. Alguien le estaba llamando.

"¡Hola! Kikí, ¿qué pasa?"
Preguntó KyuJong alegremente, mientras contestaba el teléfono. Su corazón dio un vuelco al ver que el número era de su esposo. No había recibido muchas llamadas de él, y menos en sus horas de trabajo. Así que aquella llamada era bastante rara. Por lo tanto, una gran sonrisa se dibujó en su rostro. Se sentía eufórico.

"¡Hola, Kyu! Umh... ¿Interrumpí tu trabajo?"
La voz de HongKi se escuchaba algo ansiosa. Sudaba copiosamente mientras sostenía el teléfono. No sabía si estaba llamando a KyuJong en un mal momento.

'¿Estará ocupado?'. Se mordió los labios con ese pensamiento.

SunMin le había dicho que viniera a la casa de los Lee esa noche, y que llevara a KyuJong. Y para colmo, su hermano le había advertido que debían estar allí a toda costa. No solía llamar a su esposo dentro de las horas de trabajo, pero la impaciente voz de su hermano le obligó a marcarle.

"Por supuesto no. No te preocupes. Nunca interferirás con mi trabajo. Porque si estuviera en una misión, no podría ni siquiera llevar el celular conmigo. Así que en días normales, no dudes en llamarme cuando quieras o necesites, ¿de acuerdo? Mientras pueda contestar, siempre lo haría".
Explicó KyuJong.

¿Por qué HongKi no lo llamaba con más frecuencia? ¿Le preocupaba molestarlo durante su trabajo? ¡Qué prudente y considerado era su esposo!

Así que no le llamaba no porque no le importara. Más bien, le importaba tanto, que no quería distraerlo. Al comprender que su esposo lo amaba tanto, lo hizo sonreír más. Su corazón rebozaba de alegría.

"¡Muy bien! Verás, SunMin dijo que papá había vuelto a casa y quería vernos. Así que debemos ir a verlo esta noche".
Dijo HongKi, soltando esas palabras rápidamente en un solo suspiro. Se había sentido un poco intimidado al hablar antes con SunMin.

KyuJong era un hombre ocupado y él ni siquiera estaba seguro de que pudiera acudir. Sin embargo, no era una opción para KyuJong no presentarse, pues de no hacerlo, podría empeorar la situación entre él y su cuñado. Aunque pudo haber mencionado la situación de KyuJong, pero SunMin había sido muy claro en decir que no aceptaría ningún tipo de excusas. ¡Por el amor de Dios, ni siquiera era una petición, sino una exigencia! Por lo tanto, a HongKi no le quedó más remedio que marcar el número de KyuJong e informarle.

"¡Oh! ¿Papá ha vuelto? ¡No te preocupes! Definitivamente estaré allí esta noche. Terminaré el trabajo más temprano para poder ir contigo. Creo que deberíamos llevarle a papá los regalos que trajimos de la ciudad. ¿Podrías empacarlos antes de que regrese?"
Dijo KyuJong afirmativamente. El tiempo había transcurrido demasiado rápido. Había pasado más de un mes desde la última vez que vio a su suegro, Lee Manuel, y ya lo extrañaba. Así que aceptó la petición sin dudarlo.

"¿En serio? ¿Realmente podrás volver a casa temprano hoy? ¿Y quieres que vayamos juntos?"
HongKi preguntó con asombro. No podía evitar repetir sus preguntas una y otra vez, pues nunca esperó que su esposo aceptara tan fácilmente. Se sentía tan entusiasmado y aliviado.

KyuJong había estado llegando a casa un poco tarde en los últimos días, y no se sentía con la confianza para pedirle que dejara de lado su trabajo para estar con él. Además, ir a la casa de los Lee también significaba ver a SunMin.

"¡Claro! Ya casi termino con el trabajo. Creo que tendré suficiente tiempo para ir a casa y prepararme para esta noche antes de ir a ver a papá".
Respondió KyuJong de forma tranquila.

'No sabes cuánto me gusta ir contigo a todas partes, Kikí. Como hombre, y como... ¿tu esposo?'

KyuJong frunció el ceño al instante al pensar en esas dos últimas palabras. Tosió para aclararse la garganta, luego volvió a hablar:
"Estaré allí".

Aunque todavía tenía algo de trabajo por realizar, no era tan importante como para ir a ver a su suegro. Podría dejar a un lado los archivos y volver a trabajar en ello mañana por la mañana.