Mi tentación

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Punto de vista de Pran:

El bastardo está sosteniendo su engranaje.

Miles de preguntas rondan mi mente.

Mi respiración se vuelve más lenta.

Ni siquiera cuestiono mis acciones cuando empiezo a preguntarle a la gente que dónde está ese bastardo. Cuando me preguntan por qué quiero saber, solo respondo que solo quiero ver cómo es. No les parece extraño, muchas personas han ido al edificio de medicina para verle la cara.

Cuando reciba una respuesta sobre dónde está. Inmediatamente empiezo a caminar hacia donde está. Correría, pero no quiero recibir miradas extrañas de la gente.

Cuando me acerco a la fuente de agua en la que se supone que debe estar, lo veo sentado en la fuente. Camino hacia él, agarrando su camisa.

Deja caer su teléfono al suelo con una expresión de miedo cuando me ve.

-¡¿GÜEY, QUÉ MIERDA?! ¡ME HICISTE TIRAR MI CELULAR! SI SE QUIEBRA- 

-Escucha, pedazo de mierda. No sé quién diablos te crees que eres para tocar su engranaje de esa manera. Pero no es para que tus sucias manos lo toquen, ¿Me estás escuchando?-

Me agarra de los brazos mientras se ve ofendido, se ríe antes de responder: -No sé quién diablos eres. No sé quién diablos te crees que eres para amenazarme así. Puedo y tocaré su engranaje como me plazca. Él no está en una relación, así que hasta entonces nadie puede decirme qué hacer.-

Agarra mis muñecas y las aleja de él. La rabia es evidente en sus ojos cuando hace la pregunta a la que he estado esperando la respuesta,

-¿Que es tú pinchi relación con Pat?-

Levanto mi mano izquierda que ya está lista para golpear su cara, porque no verá venir un golpe de izquierda. Mientras mi puño roza su mejilla, el mundo entero comienza a desaparecer a mi alrededor.

Abro los ojos mientras jadeo.

Pinchi mierda. Eso fue solo un sueño. No puedo creer que realmente estaba a punto de ir a buscar a Plutón y exigirle respuestas. 

Siento un calor enorme en mi mano izquierda, giro la cabeza para mirar lo que hay en mi mano para ver la mano grande y áspera que siempre me ha guiado en mis momentos más oscuros. Miro hacia arriba para ver la cara del dueño de la mano, Pat.

¿Qué esta haciendo él aquí? ¿Dónde estoy? ¿Qué sucedió?

Quiero hacerle preguntas, pero veo que tiene los ojos cerrados, así que me tomo el tiempo para mirar sus rasgos que no he podido mirar en tanto tiempo. Su cabello castaño oscuro está cubierto de sudor, lo que hace que parezca que está brillando, sus cejas largas y gruesas están relajadas, sus pestañas cortas pero oscuras se ven tan suaves que estiro mi mano libre para tocarlas suavemente.

Son muy suaves como me los imaginaba.

Sus ojos comienzan a temblar, temeroso de que yo pueda extrañarlo al tocar sus pestañas, retiro mi mano.

Sus ojos se abren. -¿Pran? ¡Pran!-

Me da un fuerte y duro abrazo que se siente como si la tierra se hubiera caído sobre mi . Todavía no suelta nuestras manos, pero por alguna razón no me importa que no lo haya hecho. Tampoco quiero que los suelte. Envuelvo mi mano libre alrededor de su cintura para devolver el abrazo. Inhalo su aroma a menta e inmediatamente me tranquiliza. Me libera de las preocupaciones que tenía.

Me di cuenta de que extrañe esto. Extrañe como sus ojos se parecen como lunas crecientes cuando se ríe e sonríe, como su grande cuerpo me cubre y calienta como una cobija, como su pelo siempre esta corto porque crece demasiado rápido, como su sonrisa puede iluminar una habitación como la luna ilumina el cielo nocturno.  Lo extrañe. 

-¡Santa María purísima, Pran! ¡Me tenías preocupado! ¡¿Sabes que casi me das un ataque al corazón cuando vi tu cuerpo en el suelo de la biblioteca así?! Tienes tanta suerte de que estuviera allí justo a tiempo para llevarte a ¡La enfermería! ¡ La enfermera incluso dijo que estás así porque no estás descansando adecuadamente! ¡También mencionó que no has estado comiendo adecuadamente!-

Él me regaña mientras frunzo el ceño, -Oye, no es tan gran cosa. Solamente olvidé de comer bien. ¡Y no puedo relajarme con toda la tarea que tengo que hacer!-

Se aleja del abrazo, pero todavía no suelta su mano de la mía.

-¡Pran, esa es una excusa tan tonta! Necesitas tomarte unos descansos, ¿de acuerdo? Voy a cuidarte más, ¡Así que no te atrevas a enojarte conmigo cuando estoy tratando de cuidarte y entro a tu cuarto!-

Chasqueo mi lengua y miro hacia otro lado mientras murmuro, -bien. Tú ganas, puedes entrar a mi habitación pero tienes que enviarme un mensaje de texto de antemano, ¿de acuerdo?-

Los ojos de Pran se vuelven lunas crecientes mientras sonríe mientras asiente. 

***** 

Punto de vista de Pat:

Pran me asustó muchísimo cuando estaba en la biblioteca buscando libros para mi proyecto de clase y vi su cuerpo en el suelo. Sin pensarlo, inmediatamente lo levanté en mis brazos y corrí lo más rápido que pude hacia la enfermería. Claro, todos me miraban raro por llevar a un estudiante de arquitectura, pero me importaba me vale lo que estaban pensando.

Mi amigo, incluso si no fuera mi amigo, ¡Lo habría llevado a la enfermería!

Me sentí aliviado cuando la enfermera me dijo que todo lo que necesitaba era descansar, tomar más descansos y comer con regularidad. Mientras estaba en la cama, todo lo que pensaba mi cerebro era acercar mi oído a su pecho para asegurarme de que su corazón estaba latiendo. Pero eso hubiera sido extraño, así que agarré furtivamente su mano suave pero con callos, masajeándola suavemente con el dorso de mi pulgar.

Caray, se sentía bien poder verlo de nuevo. Poder tocarlo, escuchar su respiración silenciosa. 

Me imagino que así se sentía Eva cuando Dios le dijo que no comiera la fruta prohibida. Aunque ella sabía que no lo debería comer, se cayó en la tentación tan pronto cuando la serpiente le sugirió la idea. Porque ella siempre lo a querido probar.  Él es mi fruta prohibida.  Pero ni siquiera en mi vida lo voy a poder comer. Él es solamente mi adición.

Estoy al límite de volver a regresar como era antes con él.

No puedo.

Esto simplemente no terminará bien para mí si lo hago.

Solo lo cocinaré o le compraré sus comidas para asegurarme de que esto no vuelva a suceder.

No lo veré tan a menudo como solía hacerlo.

Todavía puedo ser su amigo.

Mis ojos comenzaron a ponerse pesados ​​ya que me sentía tan cómoda sosteniendo su mano.

Luego, sentí algo en mis ojos, ¡así que me desperté y Pran estaba despierto!

Mi cuerpo obtuvo lo mejor de mí mientras lo envolvía en un fuerte abrazo. Esperaba que me empujara, pero no lo hizo. Tal vez es demasiado débil para hacerlo, pero también me devolvió el abrazo.

Es extraño.

Pero al abrazarlo, olerlo, poder escuchar su voz nuevamente es demasiado bueno para siquiera cuestionarlo.

No sé si alguna vez podré superarlo.

Es demasiado adictivo para mí.

Después de un rato, lo llevo de regreso a su dormitorio mientras me aseguro de que nadie nos vea saliendo juntos.

Fue duro, pero valió la pena hablar un poco más con Pran.

OlvidándoloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora