Me presento ante ustedes, me llamo Lucía Noceda y soy una asesina, una peste entre la sociedad, una adicta, pero también tengo buenas intenciones (a veces), lo hago por gusto propio, aunque solo me limito a dañar a escorias peor de desquiciadas que...
Cada segundo aquí hace que mi corazón lata más rápido
Finalmente creo que encontré lo que estoy buscando
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Los golpes en su cuerpo le exigían que dejara de correr, pero lo ignoró pensando en una sola cosa: debía llegar a tiempo antes que fuera demasiado tarde para Kim y Lucía, su novia y su mejor amiga estaban en peligro, todo por error. Tom también se abría paso entre los obstáculos al lado de Wionna, estaban desesperados, les habían tendido una trampa y ellos cayeron como un niño en una resbaladilla que sube ahí por su propia voluntad.
—Ya casi llegamos, Wii esto será muy peligroso, pero no hay otra opción— le dijo el chico de ojos azules— si algo llegara a pasarme, por favor, no dejes sola a Luci... en verdad la amo mucho y no soporto la idea de verla derrumbada por mi ausencia—.
—¿¡Qué diablos dices!? Nada malo va a pasar, las vamos a salvar y todo saldrá bien— respondió.
—Eso espero— él estaba tan nervioso como ella.
—Pero también aplica para mí, si algo me pasa serás tú quien cuide de Kim y de Lucía ¿entendiste gusano? — le dio un golpecito en el hombro.
—Jajaja es una promesa, gusana— ambos chocaron los puños— tienes razón, esto debe salir bien, aún hay muchas cosas que quiero vivir con mi chica— soltó un suspiro de tonto adolescente enamorado.
—Yo también— imitó la acción de su amigo— descuida Viney y Jerbo ya vienen en camino—
A los pocos minutos alcanzaron a distinguir una gran cabaña en medio del bosque, ese era el lugar, todo parecía estar en silencio hasta que escucharon esos desgarradores gritos, entonces corrieron detrás de esta. Ahí fue donde todo se hizo añicos.
Kim yacía sin vida colgada con una soga al cuello de un árbol, su cabello rizado negro como el carbón caía sobre su rostro, estaba atada de manos y piernas. Lucía estaba justo frente a ella encadenada y conectada a una máquina de electroshock, las habían estado torturando a ambas.
